miércoles, 9 de abril de 2008

LA OTRA 18 / BAFICI: Pablo Llorca


El cine fingido de Pablo Llorca

(Consideraciones acerca de Uno de los dos no puede estar equivocado)

Por Juan Aguzzi

Con Uno de los dos no puede estar equivocado Pablo Llorca sigue apostando a ese libre tránsito que eligió como vía posible para su cine. No es su inventor, ni el único que lo ejerce, pero el modo lúdico con que estructura su narrativa, ese pasearse libremente por las tangentes del relato, abonando el cauce de interpretaciones paralelas que sin embargo no abandonan su linealidad, lo sitúan como una (otra) rara avis, un inclasificable que hace de la indefinición un verdadero ejercicio de estilo, como si fingiera contar una historia mientras despliega sus artificios para poner a prueba sus supuestos. Es un cine de entrecruzamientos y despistes, donde la densidad dramática puede diluirse en una humorada cercana a la perversión (Jardines colgantes), o donde la suficiencia de personajes que desconocen sus límites deviene en un puritanismo de manual de autoayuda (La espalda de dios).

(La nota completa en LA OTRA 18; Uno de los dos no puede estar equivocado se exhibe en esta edición del BAFICI.)

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