por oac
"¿No saben ustedes que los malvados no tendrán parte en el reino de Dios? No se dejen engañar, pues en el reino de Dios no tendrán parte los que comenten inmoralidades sexuales, ni los idólatras, ni los que cometen adulterio, ni los hombres que tienen trato sexual con otros hombres, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los chismosos, ni los tramposos. Y esto eran antes algunos de ustedes; pero ahora ya han sido limpiados y consagrados a Dios, ya han sido librados de culpa en el nombre del Señor Jesucristo y por el Espíritu de nuestro Dios"
1 Corintios 6:9-11.
Con esta cita de San Pablo empieza una alucinante autobiografía de quien firma como "Maurio Montion" y escribe con una sintaxis atravesada su experiencia como homosexual que se "recuperó" gracias a ser enteramente penetrado ("hasta los huesos") por el Señor y fue empapado por una "catarata de amor", según su propio testimonio:
«Este versículo -dice Maurio Montion- ha sido de mucha inspiración para mí ya que, como Pablo indica, había homosexuales en la iglesia de Corinto que fueron limpiados, consagrados y justificados en el nombre de Jesús. Me gustaría compartir la increíble travesía de cómo Jesús y su iglesia me ayudaron a superar la homosexualidad».
Montion es el líder de un autodenominado "Ministerio Restauración". En su página web, este extraño "Ministerio" declara: "El Ministerio Restauración provee ayuda y apoyo cristocéntrico a las personas que luchan con diferentes problemas sexuales. Nuestro apoyo está basado en el fundamento bíblico de la compasión, la integridad y la dependencia en Dios. (...)El Ministerio Restauración nace a partir de la transformación que Mauricio Montion, su fundador y director, experimentó en su sexualidad y relaciones a partir de noviembre de 1995. Después de haber experimentado sanidad, el Señor lo llama a comenzar un ministerio de apoyo a personas con quebranto sexual y relacional en Córdoba, Argentina. En septiembre de 1998 comienza su capacitación en Desert Stream Ministres con Andy Comiskey, donde adquiere las herramientas para comenzar un ministerio. A su regreso en abril del 2000 nace el Ministerio Restauración. Desde entonces el Ministerio Restauración ha capacitado a muchos líderes no sólo en Argentina, sino también en diferentes partes de Latinoamérica para comenzar grupos de apoyos en sus propias comunidades".
Para la semana que viene el Ministerio anuncia unas jornadas que llevan como título "Reparando muros caídos": "Conferencia de restauración emocional, relacional y sexual. Jornada dirigida a personas víctimas de abuso sexual, rechazo, descuido, adictos sexuales, personas con luchas homosexuales indeseadas, y otros problemas relacionales". El encuentro se hace en la Iglesia de la Puerta Abierta, de la calle Santo Tomé 5124 y el costo de la inscripción es de $ 40 por cabeza.
El relato autobiográfico de Montion sigue así:
«Primeramente, me gustaría compartir un poco de mi trasfondo familiar. Mi madre creció en una familia con muchos problemas. Sus padres se divorciaron cuando ella era una niña. Para entumecer el dolor en su vida, mi madre recurrió al alcohol. Me acuerdo lo desconcertado que yo quedaba cuando encontraba botellas de vino escondidas en los rincones mi casa. Al principio no sabía de qué se trataba. Mi madre pasaba mucho tiempo en la cama, no aseaba la casa y discutía con mi padre constantemente. Yo llegué a creer que mi madre no me amaba, lo que causó un gran vacío en mi vida. Un vacío que anhelaba ser llenado. Esta falta de amor me hizo creer que yo no era digno de ser amado y, por lo tanto, que no tenía valor en absoluto. (...)
«Otro de los factores que contribuyó a mi confusión sexual fue el hecho de haber sido abusado sexualmente por otros niños mayores que yo. Estuve expuesto a la pornografía y a la masturbación grupal desde los 6 años hasta los 12 de edad. Estos niños me prestaban atención y me eran amables conmigo, lo que hizo que esperara con ansia esos encuentros. Mi idea de amor y sexo estaba totalmente quebrantada y tergiversada. Yo estaba completamente confundido.
«El tener sobrepeso también contribuyó a que me sintiera inadecuado con niño. Esto me causó que envidiara a otros niños. (...) Tenía mucha envidia de aquellos niños cuyos cuerpos eran delgados y musculosos. Así que desde muy chico, comencé a anhelar tener lo que yo no tenía. Recuerdo cuando pensaba acerca de los cuerpos de otros niños, lo que con el tiempo se tornó en una búsqueda erótica. (...)
«La religión de los Testigos de Jehová proveyó esa clase de estructura que yo tanto necesitaba dado que me estaba desmoronando por dentro. La vida no tenía sentido para mí: una madre alcohólica, un padre adúltero, mi propia lucha con sentimientos homosexuales… Era mucho para mi… Fue bautizado en los Testigos de Jehová en 1989. Mi madre falleció de cirrosis al hígado unos meses más tarde. Yo recibí un montón de ayuda por parte de los Testigos de Jehová, lo que me ayudó en este período difícil de mi vida.
»Nunca le confesé a nadie mi lucha con la homosexualidad. Sólo le pedía a Dios que quitara esos sentimientos. Pero con el tiempo, sólo se intensificaban. Dado que me estaba costando ocultar mi pecado, y dado que temía que me descubrieran y me expulsaran de la congregación, decidí mudarme a Córdoba cuando tenía 18 años. Una vez allí, empecé la universidad y eventualmente abandoné los Testigos de Jehová.
«En 1992, algo pasó que tendría significado eterno para mí. En abril de ese año, conocí a dos matrimonios de Estados Unidos que trabajaban para Cruzada Estudiantil me mostraron el camino a Cristo. Nunca antes había escuchado el concepto de la gracia, lo que me pareció asombroso. En junio de ese año, un grupo de 40 estudiantes norteamericanos vino a Córdoba. Sus vidas tuvieron un increíble impacto en mi vida. Gozaban de una paz que yo no tenía. Me dijeron que se debía a una relación personal con Jesús. Me sorprendió tanto que decidí buscar una relación con Jesús, con la esperanza de encontrar una salida a la homosexualidad. Así que en agosto de 1992, decidí entregarle mi vida a Jesús y me uní al cuerpo de Cristo. (...)
«Pero en 1995 sucedió algo que cambiaría para siempre mi vida. Mi vida se había convertido en un incansable espiral de bajada. Día a día, la vida se tornaba más y más gris. Mi adicción a la pornografía se había hecho incontrolable. No sólo esto, sino que también me había hecho adicto a la comida, lo que hizo que llegara pesar 133 kilos, que para alguien que sólo mide 1,75 es una barbaridad. Llegué a fumarme 40 cigarrillos por día. También ese año hasta llegué a tomar cocaína. Mi vida se había convertido en un verdadero caos. Pero el 11 de noviembre de ese año, un amigo me enfrentó con la realidad y me preguntó qué era lo que realmente estaba pasando. Fue por primera vez que me había enfrentado con la devastadora realidad de mi vida. El tomar conciencia de esto produjo un incontrolable y amargo llanto, el que duraría por muchos días. Nunca antes había sentido el dolor que el quebranto y el pecado habían causado.
«En ese momento clamé: "Señor, sólo vos podés cambiar y revertir esta situación tan espantosa". Me arrepentí de mis pecados y le pedí perdón. Nunca me voy a olvidar la manera en la que Se manifestó. Sentí su amor y su ternura de una manera que nunca antes la había experimentado. Fue realmente un encuentro que cambiaría mi vida. Empezó paulatinamente a sostenerme y a contenerme en sus brazos de amor. Gradualmente sentí muy profundamente Su compasión, que era tan poderosa que sentía que me penetraba los huesos. Yo por mi parte, empecé a aprender a recibir su "catarata" de amor. Había estado privado de amor por tanto tiempo que quería todo Su amor. Yo no sabía si había una salida a la homosexualidad o no. Sólo sabía que quería desesperadamente el amor de Dios. (...)
«El Señor ha restaurado mi sexualidad de una manera asombrosa. A principios del 2002, me enamoré de una joven mujer. Conocí a Daniela Di Liddo en el grupo de jóvenes mayores de Renacer, la iglesia donde asistimos en Córdoba. Yo le había pedido al Señor en oración que quería llegar a la plenitud de lo que él tenía planeado para mí, y yo creo que esto involucraba mi sexualidad. “No es bueno que el hombre esté solo” dijo el Señor en el comienzo. Yo no quería estar solo porque no me sentía pleno. Dios había restaurado mi sexualidad lo suficiente para trascender las “paredes” de mi soltería y extenderme más allá de mí mismo. ¿Qué hizo el Señor con Adán? Le dio una ayuda idónea. Así que yo le pedía al Señor: “Dame esa ayuda idónea para poder llegar a la plenitud de lo que vos quisiste para mi humanidad”. En su gran fidelidad, Dios me trajo a Daniela. Nunca antes me había sentido atraído hacia una mujer de la manera como me sentí atraído a Daniela. Al principio me llamó la atención el amor a Dios que tenía ella. A medida que nos fuimos conociendo, empecé a sentirme atraído emocionalmente hacia ella. Y con el tiempo, me sentí atraído físicamente a ella.¡Qué sensación nueva! Luego de 18 meses de novios, el 21 de noviembre del 2003 ¡Daniela y yo nos casamos! Junto a ella, me siento más pleno como varón. Nunca antes me había imaginado que iba a poder amar a una mujer tan plenamente; todo gracias a la restauración que Dios ha forjado en mi vida. El sentido de satisfacción y plenitud actual me promueve a proclamar que la heterosexualidad saludable es verdaderamente la intención de Dios para la humanidad. Y como si eso no fuera poco, en septiembre de 2005, tuvimos a nuestro primer hijo, Jonatán Santiago, quien ha bendecido nuestra vida enormemente.
«Finalmente, después de recibir la compasión de Dios, me siento llamado a extender esa compasión a otros que están acorralados por el quebranto homosexual. La libertad que he encontrado es tan impresionante que quiero que otros lleguen a alcanzarla también. Cuando yo busqué ayuda allá por el año 1995, no encontré ningún grupo que me pudiera ayudar. Dios ha puesto en mi corazón el empezar un ministerio de ayuda para los quebrantados sexuales en Córdoba. Es así como comenzó el Ministerio Restauración en Córdoba. Es a través de este ministerio que proclamamos que Dios es fiel de sanar no sólo al homosexual, sino también a aquellos que están afectados por el quebranto sexual y relacional.
«Puedo ahora apropiarme de la promesa que Jesús declara en Apocalipsis 22:14 cuando dijo: "Dichosos los que lavan sus ropas para tener derecho al árbol de la vida y poder entrar por las puertas de la ciudad. Pero afuera se quedan los pervertidos, los que practican la brujería, los que comenten inmoralidades sexuales, los asesinos, los que adoran ídolos y los que practican el engaño". Ahora anhelo el día que pueda ver a mi Señor y Redentor cara a cara y vivir en su presencia para siempre» finaliza Montion.
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La convocatoria del Ministerio Restauración a los desdichados homosexuales que quieran "sanarse" motivó este comunicado de repudio del Area Jóvenes de la CHA:
Acto de repudio del Área Jóvenes de la CHA contra la “cura” de la homosexualidad.
El Ministerio Restauración, instalado en la provincia de Córdoba desde hace cuatro años, realiza esta semana en Buenos Aires su conferencia "Reparando Muros Caídos", cuya finalidad es la de "ayudar a superar la homosexualidad y el travestismo", entre otras "perversiones", según informan en su página web.
Allí mismo pueden leerse falsos testimonios de quienes han superado su “homosexualismo” y “travestismo”, y han podido reintegrarse a una vida “normal”. Se recurre en ellos a la retórica del sufrimiento, de la angustia con la cual estas personas vivían sus deseos, como impulso a buscar una salida a los mismos, y cuya extirpación, negación y represión se muestran entonces como la única vía posible a una vida feliz y plena de sentido.
La violencia simbólica de estos discursos que colonializan la sexualidad y pretenden “curar” lo que no entienden, merece todo nuestro repudio y rechazo. El origen de la angustia sobre las sexualidades y corporalidades de lesbianas, gays, travestis y transexuales adolescentes, jóvenes y adultxs no es la sexualidad en sí misma, sino la represión y los discursos vergonzantes que se imponen sobre ella. Esa angustia, de la cual el Ministerio Restauración pretende alejar a quienes acuden a él, como fin noble, es producto justamente de su propia retórica, que patologiza un sentimiento de deseo, convirtiendo en invivible la vida de quien expresa una forma de afectividad no heterosexual.
La violencia de la discriminación que se impone sobre nuestros cuerpos y nuestras vidas encuentran su génesis en el rechazo a nuestras sexualidades, que las ideologías más fundamentalistas reproducen sin pausa. Así, la homofobia, la lesbofobia y la transfobia siguen encontrando asilo en las iglesias, en las calles, en las escuelas, en los medios de comunicación y en los recintos parlamentarios.
Porque la angustia con la cual es vivida la sexualidad y el deseo por muchxs lesbianas, gays, travestis y transexuales es producto de estos discursos de odio, invitamos a todas y todos a acompañar la acción de repudio y desagravio del Área de Jóvenes de la Comunidad Homosexual Argentina (CHA), el próximo viernes 9 de Octubre a las 18hs, frente a la Iglesia de la Puerta Abierta (Santo Tomé 5124)
Enviá tu repudio por e-mail a:
reparadoresdemuroscaidos@hotmail.com, info@restauracion.org.ar
Contactos:
email: jovenes@cha.org.ar
web: www.cha.org.ar
dios mío...
ResponderEliminaruna mención especial merecería la total omisión de las mujeres y de las relaciones entre mujeres, en el fragmento citado al comienzo y la mención de la mujer como una "ayuda" del o para el varón, en el relato autobiográfico...
y al pobre de caravccio le toca ilustrar esta barbaridad!!!!
ResponderEliminarOjala que la gente este despierta y no caiga en manos de estos que pueden hacerte mierda la cabeza!!!
Excelente el artículo, y alucinante la primera ilustración, "Incredulidad de Santo Tomás", uno de los mejores cuadros de ese hermoso libertino llamado Caravaggio.
ResponderEliminarEn cuanto a lo demás, sólo queda tomarlo en solfa para no aullar de terror.
«El tener sobrepeso también contribuyó a que me sintiera inadecuado con niño. Esto me causó que envidiara a otros niños. (...) Tenía mucha envidia de aquellos niños cuyos cuerpos eran delgados y musculosos. Así que desde muy chico, comencé a anhelar tener lo que yo no tenía. Recuerdo cuando pensaba acerca de los cuerpos de otros niños, lo que con el tiempo se tornó en una búsqueda erótica."
Así que todos los gordos son trolos, o futuros trolos. Mirá vos, che. Lo tendré en cuenta, dado mi exceso de peso. Un capo este señor Montion.
Aunque quizá vaya para curarme de "rechazo, descuido, adictos sexuales, y demás problemas relacionales"
En fin, hay gente que vive en el medioevo.
Ed Chinasky (gordito y con inclinaciones raras)
gracias por difundir nuestra movida. sigamos en contacto y un abrazo muy grande. te cuento que voy a escrache pero mis compañeros no saben q llevo $20 pesos, no para curarme del todo (el servicio completo cuesta $40) sino para hacer medio tratamiento y ver si puedo ser un poco menos puto.
ResponderEliminarMartín LANFRANCO
Área Jóvenes CHA
jovenes@cha.org.ar
www.cha.org.ar
"En el origen de nuestra lucha esta el deseo de todas las libertades"
Martín:
ResponderEliminaren el origen de todas las luchas está el deseo ;-)
Creo que hay un ser superior, pero no creo en un Dios barbado vigilante de todo lo que hacemos.
ResponderEliminarEl tema es que estas organizaciones siguen revolviendo mierda con esos mensajes. Tendrian que dejarse de joder y dejar vivir a las personas.
No creo tampoco que ayude mucho que los homosexuales griten a viva voz que son homosexuales porque la realidad es que a nadie le importa.
Yo soy heterosexual y no necesito una bandera por eso.
La gente ultra religiosa debe empezar a callarse la boca con estos asuntos.
Y los homosexuales tambien.
Realmente se le da mucha importancia a esto, ya que en realidad a nadie le importa que hace el otro con su sexualidad.
que "ayude" a qué? a que las y los homosexuales sean aceptados/as?
ResponderEliminarvos no necesitás gritar a viva voz que sos heterosexual porque la heterosexualidad es más que visible, pero hay un problema que se llama de "visibilidad" que acarrea muchos otros problemas como la discriminación, por ejemplo. tu comentario va en la misma línea: que existan pero que no se noten. y es lamentable.
Bueno señores, creo que gente enferma hay en todos lados, y no precisamente me estoy refiriendo a homosexuales. La respuesta de Martín Lanfranco es simplemente perfecta, e ilustra como reacciona frente a estos despropósitos la gente que ya la ha vivido y entiende como tomar las cosas como de quien vienen, lo cual no significa indiferencia, sino todo lo contrario, sana acción. Mis respetos, señor Lanfranco. Finalmente amigo Yoink la definición de apateismo dice: "las deidades, aún de existir, no cambian la condición humana, por lo tanto las religiones, son irrelevantes." Quizás se pueda identificar con esta opción. Finalmente, me gustaría pensar que llegará el día en que aprendamos a convivir respetando las elecciones de los demás, así como los demás respeten las nuestras, siempre intentando por sobre todo no dañar a terceros con lo que hacemos, pero desafortunadamente, no me queda tanta fe en la humanidad. Abrazo a todos y me alegra ver que sigue quedando gente independiente y con pensamientos inconquistables.
ResponderEliminarDe chipote, Güey!:
ResponderEliminarya te dije que te gánás el premio al mejor nick del año? Aparte de eso, podemos intentar no dañar a terceros, pero creo que vivir es dañar. Y esto no tiene nada de apología a la crueldad, ni siquiera de pesimismo. Pero la ruta de la corrección es una vía muerta. Y quizá los que apuestan a ser correctos no sepan el daño que ellos mismos hacen ni cómo empiedran el camino del infierno.
Puede que tenga razón, mi estimado Cuervo, al fin de cuentas no soy más que un humilde escriba ocacional que no las tiene todas consigo. Pero de cualquier manera, y entrando ya en un terreno por demás delicado; aunque usted crea que vivir es dañar, y crea incluso que la ruta de la corrección es una vía muerta, así como también crea que quienes intentamos ser correctos no sepamos o seamos concientes del daño que causamos; yo no lo comparto, y a mi me es suficiente con que cada quien tenga una conciencia llena de intenciones sanas. Idealista!, podrá gritarme usted a través de este monitor, y probablemente tenga más razón de la que me gustaría admitir, y sin embargo, son esos ideales de intentar hacer lo mejor de corazón, considerando a terceros según mi criterio y mi juicio (tan errado como pueda estar), lo que me permite levantarme de la cama todas las mañanas y reconocer en algunos de mi iguales que no todo está perdido. Le mando un abrazo, amigo Cuervo, y sostenga este espacio de expresión sin importar su costo. Gracias por sus elojios hacia mi nick, mucho se aprecia.
ResponderEliminarseñor lefranco CRISTO TE AMA Y MURIO POR TI Y ESTA AHI ESPERANDO QUE VAYAS A SUS PIES Y TE ARREPIENTAS.NO ENTRARA AL REINO DE LOS CIELOS NADA QUE HAGA INMUNDICIA, COMO VARON QUE SE ECHA CON VARON O SEA LOS HOMOSEXUALES.BUSCALO EL ESTA AHI ESPERANDO POR TI POR EL ES UN DIOS DEAMOR ,DE PERDON Y DE GRAN MISERICORDIA.BUSCALO Y LO HALLARAS MIENTRAS PUEDA SER HALLADO.
ResponderEliminarGracias, hija de Dios, pero acá nos encanta la inmundicia. Aparte, ir al cielo acompañado por gente como vos, te la regalo.
ResponderEliminarAh! Y el señor lefranco ya no vive aquí.