Oir las imágenes

usted durmió conmigo

quiero saber

todo dormía
como si el universo entero
fuese un vasto error



le decía un día
señorita
figúrese un cubo
lo veo



imagínese en el centro del cubo
un punto
ya está


de ese punto
trace líneas rectas
hasta los ángulos
y bien
habrá dividido el cubo
en seis pirámides iguales
cada una de las cuales tiene
las mismas
caras



la base del cubo
y la mitad de su altura
es verdad
pero dónde ve esto

en mi cabeza
como usted

(...)
y luego
me gustan las ventanas abiertas
y las sábanas frescas



la tentación de existir

señor
es un film que nunca
se ha hecho



ah, usted dice la verdad
señorita
es un film
que nadie vio



si mi mano izquierda
puede tocar mi mano derecha
mientras toca
las cosas
tocarla
tocando por qué
tocando la mano de otro



no tocaría
en ella
el mismo poder
de abrazar las cosas
que toqué
en la mía



ahora bien, el dominio
uno se da cuenta rápido
es ilimitado
si podemos
mostrar que la carne
es una noción última
que no es unión
o compuesto
de dos substancias



sino pensable por sí misma
si hay una relación
en sí misma
de lo visible
que me atraviesa
y me
constituye
viendo



viendo
este círculo
que no hago
pero que me hace
este enroscamiento de lo visible
sobre lo visible
puede atravesar
animar otros cuerpos
tanto
como el mío



y si pudiste entender
cómo en mí
nada esta ola
cómo lo visible
que está allá es
simultáneamente
mi paisaje



la tentación
de existir

con mayor razón
puedo comprender
que en otra parte también



soy
leyenda



se cierra sobre sí mismo
y que haya otros
paisajes
aparte del mío



cuando uno se expresa
dice siempre más
de lo que quiere
puesto que cree
expresar lo individual
y dice lo universal



tengo frío
soy el que dice
tengo frío
pero no soy yo
el que lo escucha
ha desaparecido
entre esos dos momentos
de mi palabra



solo queda de mí
el hombre que tiene frío

(...)

JLG