Ley antiterrorista
por Oscar Cuervo
En la maratón legislativa de fin de año se aprobaron varias leyes que me parecen muy positivas y desde hace largo tiempo necesarias, como:
- la Ley que declara de interés público la producción, comercialización y distribución de papel para diarios (ley que Clarín y La Nación están atacando histéricamente, como si estuviera bien que dos empresas privadas puedan controlar este mercado a su antojo, y en cambio fuera objetable que la regulación quede en manos de instituciones públicas, como la Comisión Bicameral creada a tal efecto o la Comisión Federal Asesora integrada por los diarios que no forman parte de las empresas productoras de papel);
- la Ley de Tierras, que establece límites a la extranjerización de las tierras rurales;
- la imprescindible Ley de Trabajo Rural, que hace llegar la edad moderna al campo argentino, que hasta ayer seguía regido por un sistema jurídico feudal, con la complicidad de impresentables sindicalistas que dicen defender a los peones rurales.
En este contexto, me parece lamentable y también un error bastante difícil de reparar la aprobación de la denominada "Ley Antiterrorista", cuyo principal argumento de defensa es que es necesaria "para cumplir con exigencias del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI)", bajo la amenaza de que el país pierda su lugar en el G20 de no sancionar dicha norma. La aprobación de esta ley requiere la modificación del artículo 41 del Código Penal, en estos términos: “Cuando alguno de los delitos previstos en este Código hubiere sido cometido con la finalidad de aterrorizar a la población u obligar a las autoridades públicas nacionales o gobiernos extranjeros o agentes de una organización internacional a realizar un acto o abstenerse de hacerlo, la escala se incrementará en el doble del mínimo y el máximo”. Sin saber casi nada de derecho, estoy convencido de que semejante texto es una aberración jurídica, por su falta de precisión para definir una figura penal, lo que habilita a cualquier juez del país a aplicarla a su arbitrio, contra los más diversos reclamos populares.
Para colmo de males, el titular de la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF), José Sbatella salió a declarar ayer que, si algunos medios se unieran a una operación financiera para provocar una corrida bancaria, podrían quedar expuestos a una acusación de terrorismo. Sbatella, que en otra ocasión tuvo una actitud muy digna (para oponerse hace 4 años a la fusión de Cablevisión y Multicanal), acaba de cometer una torpeza mayúscula, regalándole a Clarín el gusto de titular "Podrían acusar a los medios de terrorismo", lo que empaña innecesariamente la justicia de la ley de regulación del papel. Lo de Sbatella es torpe, porque un funcionario debe ser muy cuidadoso cuando su palabra se refiere a temas tan sensibles como este. Pero su torpeza no tendría mayor importancia si no fuera que la misma Ley Antiterrorista tiene una peligrosidad potencial, dada la ambigüedad y vaguedad de su redacción. Como bien dijo el senador Rubén Giustiniani la ley “habilita una persecución penal contra las personas y organizaciones que luchan por la reivindicación de derechos”, como sucedió recientemente en Chile para criminalizar las protestas de la comunidad mapuche.
Dije que la aprobación de esta ley configura un error difícil de reparar, pero no imposible. Creo que todos podemos sumarnos para reclamar que la ley se derogue, incluso alentando a que finalmente la Corte Suprema de Justicia reconozca su inconstitucionalidad.
Pienso que apoyar las grandes líneas políticas de este gobierno no impide oponerse a la vigencia de esta ley.
De hecho, esta ley va contra la base de uno de los principios articuladores del discurso kirchnerista que son los DDHH. Va contra uno de los pilares que construyen el apoyo.
ResponderEliminarLas mismas razones que le hacen a uno apoyar al gobierno son las que nos hacen rechazar esta ley y romper la organinicidad. Ésta, tiene un límite y es cuando se va contra los fundamentos.
Ojala tengas razón y la Corte la declare inconstitucional.
Sin embargo, esta ley, por lo poco que sé de ella, solamente modifica penas, pero no tipifica, crea o define un delito nuevo: por esta ley nadie puede ser acusado de "terrorismo", me parece obvio; para esto (me parece, no soy un experto en derecho) tienen que darse las condiciones del artículo 213 ter.:
ResponderEliminarSe impondrá reclusión o prisión de CINCO (5) a VEINTE (20) años al que tomare parte de una asociación ilícita cuyo propósito sea, mediante la comisión de delitos, aterrorizar a la población u obligar a un gobierno o a una organización internacional a realizar un acto o abstenerse de hacerlo, siempre que ella reúna las siguientes características:
a) Tener un plan de acción destinado a la propagación del odio étnico, religioso o político;
b) Estar organizada en redes operativas internacionales;
c) Disponer de armas de guerra, explosivos, agentes químicos o bacteriológicos o cualquier otro medio idóneo para poner en peligro la vida o la integridad de un número indeterminado de personas.
Para los fundadores o jefes de la asociación el mínimo de la pena será de DIEZ (10) años de reclusión o prisión.
(Artículo incorporado por art. 2° de la Ley N° 26.268 B.O. 5/7/2007)
Supongo que nadie ha usado esto hasta ahora para "criminalizar la protesta social" y condenar a alguien, y la nueva modificación del Código tampoco sirve para eso; además, si se quiere, ya hay muchos artículos que pueden usarse (y a veces se usan, no?)
Dicho esto (porque los miedos por esta ley me parecen exagerados), aclaro que hubiera preferido que no saliera, porque rechazo todo lo que signifique endurecimiento, agravamiento, intensificación de las penas, los castigos los sufrimientos que nos provocamos los unos a los otros.
Ojalá que lo que vos decís, Alex, restrinja la aplicación de esta ley. porque "obligar a un gobierno o a una organización internacional a realizar un acto o abstenerse de hacerlo" es cualquier cosa: ¿acaso cualquier protesta contra los planes de Ajuste del FMI o manifestaciones contra el bombardeo de Israel contra campamentos palestinos, para citar solo dos ejemplos, no pueden hacerse para "obligar a un gobierno o a una organización internacional a realizar un acto o abstenerse de hacerlo". Lo grave parece ser que no se castigan actos objetivos sino las intenciones subjetivas por los cuales se hace algo, lo que me parece que atenta contra todos los derechos civiles. Ojalá alguien salga a aclarar que es imposible que un juez facho (de los tantos que hay) o un gobernador que quiera llevarse puesto a un pueblo originario que reclama por el derecho a la tierra (para citar un ejemplo de cómo fue aplicada en Chile una ley semejante) la usen para reprimir. No se trata de la intención de Cristina, ni la de los legisladores, sino de lo que esta ley habilitaría hacer a los jueces.
ResponderEliminarQué bueno sería eso de sumarnos para reclamar, pero cómo?
ResponderEliminarLeo en Página de hoy:
ResponderEliminar"En Diputados, ante los cuestionamientos realizados a este artículo, la semana pasada se incorporó otro párrafo, con el cual se trató de reparar la ambigüedad del texto. Se estableció que las agravantes “no se aplicarán cuando él o los delitos que se traten tuvieren lugar en ocasión del ejercicio de derechos humanos y/o sociales o de cualquier otro derecho constitucional”.
También dice que "ese agregado fue calificado como “superficial” por organismos de derechos humanos como el CELS"; no veo claro por qué sería superficial.
Otra vez, me parece que estamos dramatizando demasiado el asunto...
Terrorismo el de la GAFI por obligar a un gobierno o a una organización internacional a realizar un acto o abstenerse de hacerlo. Terrorismo el de la OMS por aterrorizar a la población con epidemias inexistentes, obligar a los gobiernos a tomar medidas y a la población a limitar sus actividades y de yapa vender medicamentos caros y tóxicos. Terrorismo el de Monsanto, que nos está matando lentamente con agroquímicos. Es otro terrorismo el que está en marcha. Espero otro tipo de acciones de este gobierno. Estas no son las leyes que necesitamos. Parece al menos, totalmente anacrónico.
ResponderEliminarAlex: el hecho de primero redactar una figura tan difusa como "obligar a un gobierno o a una organización internacional a realizar un acto o abstenerse de hacerlo", que jueces o gobernadores fachos pueden usar para criminalizar cualquier reclamo; para después hacer un agregado haciendo salvedades que también están sujetas a interpretación de esos mismos jueces, no me parece una buena manera de legislar sobre temas tan delicados.
ResponderEliminarLos que hacen terrorismo son esos mismos países que están presionando para este tipo de legislación, así que es todo lamentable. Ojalá que cuanto antes sea declarada inconstitucional.
Y pregunto: ¿serviría esta ley para evitar un atentado como el de amia? Me parece que no. ¿Entonces para qué sirve? Esa es la pregunta que nos tiene a todos inquietos y que en ciertos sectores es visto incluso como una provocación.
ResponderEliminarAlex: el problema es justamente que la ley deroga ese artículo 213 ter y el 213 quáter (incorporados en el gobierno de Kirchner), con lo cual "terrorismo" queda como un tipo penal abierto, por la nueva redacción que les da a los que pasarían a ser artículos 306 y 307 del Código Penal.
ResponderEliminarAhí está el riesgo, y en la agravante genérica del 41 quinquies, que juega para cualquier delito tipificado en el Código
Es preocupante que el gobierno que mas judicializo la protesta(4500 procesados) de fuerza de ley al proyecto exigido por USA, votado de madrugada como lo hacen las ratas.
ResponderEliminarMenem ira preso por la voladura de Rio Tercero o por los atentados de AMIA y Daia?
Apenas re asumida la bestia muestra su costado mas facista.
La ley de tierras es una buena muestra, le deja a la oligarquia nacional todo el botin de los latifundios, ahora sin competencia externa(claro que se va a llenar de testaferros).
Uno esperaba una ley de tierras que sociabilice, le de propiedad a los pueblos originarios, a los campesinos o a los que ocupan tierras por generaciones.
Creo que es bien visible que la profundizacion del modelo es a la derecha , como lo fue siempre.
Hay una diferencia que hay que reconocerle a Cristina:ya el discurso es fronta y dejo la hipocresia"progresista" de lado.
Saludos y felices fiestas
Lamentablente es un titulo (el del post) que me parece que vas a tener que usar seguido.
ResponderEliminarEl solo nombre, ley antiterrorista, es de terror, con la historia que tenemos.
en el mismo setido, la publicidad "Argentina, un pais de buena gente" no te suena a "Los argentinos somos derechos y humanos"?