Autoconvocados, empoderados, espontaneístas, orgánicos, unidos, organizados: de la forma que quieras, no es momento de plantear divisiones tácticas si la estrategia es la misma: frenar la avanzada de la derecha, resistir, hacerse cargo cada uno de defendernos todos. En la cancha se ven los pingos. Putear frente a la pantalla la vuelta del neoliberalismo, lamentarse o quejarse en las redes sociales: todo eso ya fue. Hay una sola manera de parar el ajuste y la destrucción del salario, el empleo y la libertad de expresión. En defensa del trabajo nacional, contra los decretazos para nombrar jueces serviles y funcionarios fascistas, contra el DNU como arma para derogar las leyes democráticas, Contra la persecución ideológica y el cepo informativo. Salir a la calle. Juntarnos. Decirnos las cosas en la cara. Decírselo en la cara al Congreso. Movilizarse. Como dice la chica de River en TN: Hoy, todos al Congreso.
Cuervo, yo sinceramente los admiro. Lo que aprendí con ustedes en estos años se los voy a agradecer toda la vida. Estoy de acuerdo en que hay que salir a defendernos todos. Lo único que les pido (y lo digo con mucha humildad, con las limitaciones a cuestas de alguien que no sabe como se mueve todo en los lugares donde uds laburan), es una autocrítica sincera. No logro entender como, sabiendo que estaba en juego la vuelta al neoliberalismo (con el apoyo de casi un 50% de individuos sin posibilidades de entender lo que pasó estos 12 años) y sus consecuencias, como con eso a la vista no se tomo la decisión de ceder para evitar ir divididos a una elección. ¿Porque se decidió no darle lugar a los que (probablemente incentivados por esa falta de espacio) nos traicionaron?. Vuelvo a repetir que estoy planteando esta pregunta desde un lugar donde no puedo ver muchísimas cosas que uds si manejan.
ResponderEliminarCon esto no pretendo desdibujar el llamado a defendernos que seguramente sea la prioridad en estos momentos. Solo que me parece que, en paralelo, habría que replantearse como medimos nuestras fuerzas y hasta que punto tiene sentido arriesgar tanto sabiendo que estaba en juego tanto dolor para nuestro pueblo. Ojala aprendamos para tener cada día un mejor liderazgo y continuar haciendo grande a este pueblo.
Galimatías: hay algo que yo no entiendo en lo que decís y/o que vos no entendés en lo que digo. Cuando decís "ustedes" parece haber un malentendido. ¿De qué ustedes hablás? Yo soy kirchnerista, a full. Pero no formo parte de ninguna dirigencia, mesa chica, mesa grande, orgánica, nada. Soy del llano. Mi práctica la llevo a cabo en esta visibilidad: en el blog, la radio, los textos que me encargan, mi trabajo (la docencia). Mi aporte es en mis propios lugares. Incido desde donde estoy. No formo parte de ninguna dirigencia. No decido las alianzas del FPV. Así que las únicas autocríticas que podría hacer se refieren a lo que yo hago. Yo no puedo "autocríticar" a otros. Puedo, sí, criticar a otros. Y mis críticas en estos años están metidas en todos los miles de posts que escribí. Más de 4000.
ResponderEliminarDicho esto, no entiendo tu reclamo. ¿Por qué se decidió no dar lugar a los que nos traicionaron? Aunque yo no lo decidí, te lo puedo responder. Porque nos traicionaron, es decir, no sólo se fueron sino que se fueron con el enemigo. ¿Te referís a Massa? Afirmo que se pasó de bando, está del otro lado. Es la decisión de él. ¿Para qué le vas a dar lugar al que te está traicionando? Que traicione tranquilo desde la vereda opuesta. A la palabra traición hay que darle el peso que tiene. No hablamos de disidencias tácticas ni de críticas, ni de contradicciones secundarias que comparten una misma estrategia. Massa no es eso, es un traidor, trabaja para la Embajada, es un facho, además es un falso y un oportunista. Antes que unirme a Massa, estoy más cerca de los trosquistas. Ellos, equivocados, forman parte del campo popular, igual que Lozano, De Gennaro y otros sectores de la izquierda crítica enojada con cosas del kirchnerismo. Ellos no traicionaron, disienten con nosotros. Con algunos nos podemos encontrar resistiendo juntos en el futuro. Pero Massa no es el caso. Incluso no lo es Urtubey. Ellos son parte del enemigo. Lo mismo que aquel que abrió la cårcel bonaerense para que entrara Lanata a destruir a Anibal. En esos casos, la ruptura es irreversible y cuanto más lejos estén, mejor. Aunque lo juren y prometan no estarán de tu lado.
No sé si con esto despejo los malentendidos. Saludos.