La noticia del día es de una trascendencia enorme para el futuro político argentino. Están expresada en estas fotos: la tremenda masivididad del acto y la calidad de la composición social de quienes se movilizaron. Es una noticia muy mala para el macrismo y muy buena para el pueblo. El ajuste salvaje como única política del partido gobernante tiene un límite infranqueable ante el pueblo en las calles. No es viable un régimen ajustador que defraude los pactos electorales, por más difuso que haya sido el discurso de campaña de Cambiemos. "Te vamos a dejar todo lo que tenés y te vamos a dar más": el pueblo le dijo hoy a esa mentira: hasta acá llegó mi amor. La inoperancia política del macrismo le hizo liquidar todo el capital político que tenía en una estación: el verano republicano dio paso a un otoño con el pueblo en la calle. Ninguna maniobra de apriete a gobernadores o compras de senadores o diputados cooptables puede parar esto. "Los dirigentes hemos entendido que los intereses de los trabajadores están por encima de los dirigentes" dijo Moyano y está bien lo que dijo. Le llevó unos meses entenderlo pero lo entendió. Nunca es tarde. Hoy Moyano habló del plato de comida que falta en la mesa de los trabajadores. Es un cambio de agenda correcto: hasta hace meses paraba el país por el Mínimo No Imponible. Barrionevo se bajó del acto por la fuerza de las circunstancias. No tiene espacio ahí. ¿Tiene espacio ahí Massa y su zigzagueante Frente Renovador? Este acto es un problema para ellos. No hay ancha avenida del medio, sino un estrecho desfiladero. La ancha avenida la llenaron los trabajadores que dijeron "NO" al ajuste macrista.Pero como dije en mi nota anterior, el pase de facturas a la burocracia sindical o las lecturas internistas son temas menores ante el dato impresionante de un pueblo ganando la calle. Las lecturas que se hagan en términos de moyanismo, kirchnerismo, sciolismo, massismo... son puro humo. El gobierno tuvo hoy su peor día. Hay que decirlo: la condición de posibilidad de este acto son dos enormes movilizaciones anteriores: las de los organismos de DDHH el 24 de marzo y la vuelta de Cristina, única lider que mueve multitudes ella sola. Pero ningún frente anti-ajuste tiene futuro sin la clase obrera movilizada. Eso es lo que pasó hoy, el único dato trascendente.
Que no es lo mismo que la dirigencia sindical movilizando, como lo demuestran las escuálidas movilizaciones de estos mismos contra Cristina, y es algo que debemos recordarles.
ResponderEliminarLa unidad se hará con los dirigentes o sus cabezas, porque las bases , en mki opinión ya lo han decidido.
Nunca menos y abrazos