Sergio Berensztein en su columna de Perfil del domingo pasado desliza una hipótesis que maneja el oficialismo, del cual él es un vocero sibilino
Cambiemos administra los tres presupuestos más holgados. Tiene un manejo más transparente de la pauta publicitaria, pero de todas formas sigue siendo el que más gasta. Se supone que no habrá trampas en la administración de las elecciones, aunque sorprendió el reto de la Cámara Nacional Electoral por la contratación de Indra.
Si las hay, debemos suponer que no favorecerán a Cristina ni al peronismo. Tal vez por eso, todavía sin demasiado ruido, muchos gobernadores peronistas se preparan para retomar protagonismo luego de este proceso electoral.
Intuyen otros vientos, otros debates, un sendero en el cual Macri requerirá de sus servicios para impulsar una agenda un poco más audaz. Córdoba, Tucumán, Salta, Entre Ríos, San Juan… las provincias que protagonizaron la gesta de la Organización Nacional se ven a sí mismas como contrapeso del otrora gigante del puerto, ahora convertido en el pantanal del Conurbano.
Si unimos el hilo de la proposición en la lanza el dato duro: "Se supone que no habrá trampas en la administración de las elecciones (pero) si las hay, debemos suponer que no favorecerán a Cristina". Una manera acorde a su estilo de anticipar que el gobierno tantea la posibilidad del fraude electoral para evitar una derrota en las urnas.
La semana pasada la Cámara Nacional Electoral emitió una acordada en términos muy duros contra la decisión de privatizar el escrutinio provisorio. En sus párrafos centrales, la Cámara decía: "pese a reiterados requerimientos, el escrutinio provisorio continúa bajo la órbita exclusiva del Poder Ejecutivo sin participación alguna de la justicia nacional electoral" y enfatizaba que esa Cámara no tiene nada que ver "en la contratación de prestadores de servicios". Los integrantes de la Cámara, Corcuera y Dalla Via, también destacan que el Poder Ejecutivo no aceptó escanear los telegramas del escrutinio ni implementar un sistema de trazabilidad en tiempo real de las urnas, padrones y materiales para las mesas de votación para hacer los resultados más transparentes. Hace meses el gobierno decidió anular una licitación preparada por el secretario de Asuntos Electorales, Adrián Pérez, y traspasar eĺ escrutinio al Correo Argentino, que en su condición de Sociedad Anónima amañó el proceso de contratación mediante un concurso privado que el propio oficialismo anticipó que iba a ganar la empresa Indra.
El 17 de junio anticipaba La Política Online:
La empresa INDRA está salpicada por escándalos de corrupción en todo el mundo. ¿Por qué el macrismo querría privatizar el escrutinio provisiorio y sacarlo de la órbita de la Justicia Electoral? El propio macri impuso su preferencia por que el "concurso privado" lo ganara INDRA. Curiosamente, en 2015, cuando macri desde la oposición no estaba en condiciones de controlar el proceso de escrutinio había reclamado el escaneo de los telegramas que ahora se retaceará.
Después de su duro comunicado, la Cámara Nacional Electoral se sumió en un espeso silencio. ¿Volverá a reclamar por esta maniobra del oficialismo o ya acordó con él?
En España, los escándalos desatados por las denuncias contra INDRA escalaron hasta un nivel similar al caso Odebrecht en Brasil: los tribunales españoles detectaron que la empresa coimeaba al Partido Popular a cambio de obtener contratos con sobreprecios. Según informa La Política Online el nexo de Indra con el Gobierno es Alejandro Tullio, reconvertido en director de Asuntos Públicos del Correo Argentino, la empresa estatal dirigida por el ex Socma Jorge Irigoin, quien fue denunciado en Tribunales por la condonación de deuda al Grupo Macri por la concesión de la compañía en los 90. En todos lados está vos, mauricio: en el Correo, en el gobierno y en el proceso de escrutinio. El pliego del "concurso privado" lo hizo macri a medida de INDRA. ¿A qué se debe el interés en quitarle a la justicia electoral el control del escrutinio? Quizá convenga releer el párrafo citado inicialmente de Berenzstein: "Se supone que no habrá trampas en la administración de las elecciones (pero) si las hay, debemos suponer que no favorecerán a Cristina". Para decirlo en menos palabras: si las cosas se le ponen demasiado fuleras en el escrutinio provisorio, macri no descarta hacer fraude.
Hace dos días la diputada del FPV Teresa García dijo que para asegurar la transparencia del resultado de las elecciones en la provincia había que garantizar la fiscalización del escrutinio, porque teme que la noche de las PASO el macrismo intente maniobras fraudulentas, sobre todo en los municipios que maneja o en aquellos que son manejados por intendentes afines al randazzismo.
Es que las encuestas en provincia están dando a Cristina ganadora y eso, en una semana de escalada del dolar y rebrote inflacionario, sin brotes verdes, pone al macrismo cada vez más nervioso.
Hoy Jorge Asís tuiteó:
Por instrucción presidencial José Torello -jefe de asesores- tramita ante la jueza Servini eliminación de las PASO 2017.Ampliaremos.
— Jorge Asis (@AsisOberdan) 7 de julio de 2017
Y en tuits sucesivos instala otras dos conjeturas: "¿Y si gana la Doctora?" y "De Vido. La construcción de otra morsa".
Es decir, el turco alude a maniobras desesperadas del gobierno ante la probabilidad de ser derrotado por Cristina. ¿Habrá que esperar un regreso apurado de Lanata a Canal 13 para armar una operación resonante que embarre la campaña ante los datos adversos de las encuestas?
Teresa García dice que un gobierno que intentó nombrar a dos jueces de la Corte Suprema por decreto, ante la posibilidad de ver derrumbarse sus perspectivas políticas en una elección de medio término, es capaz capaz de cualquier cosa.
El penúltimo intento fue "dividir al peronismo", tarea para la cual encomendaron a su cadete todo servicio Alberto Fernández, con la construcción del muñeco electoral Flopy Randazzo. Primero intentaron que Cristina se aviniera a perder meses discutiendo su liderazgo popular con este cuatro de copas. Cuando Cristina desbarató la maniobra con el lanzamiento de Unidad Ciudadana (con la gran mayoría del peronismo bonaerense alineado tras ella), el régimen también apuesta a un objetivo de mínima: arañarle 3 o 4 puntos a Cristina, quien está peleando el 5° puesto con el FIT. La entrevista de ayer de Floppy en C5N mostró a un político endeble, muy preocupado por seguir discutiendo la interna kirchnerista de 2015 y atribuyendo el tarifazo macrista a "errores nuestros" [del gobierno que entonces integraba]. Las repercusiones en las redes sociales de la entrevista fueron abrumadoramente negativas para Randazzo. Cuando algún tuitero se atrevía a reivindicarlo, mostraba también sus simpatías al macrismo y su aversión a los "kukas". Por lo que se hace posible postular que el puñado de votos que saque Randazzo se los reste a Massa o al macrismo. El asunto sería, una vez más, la fiscalización del escrutinio provisorio en las intendencias que responden al engendro diseñado por Alberto Fernández por encargo del macrismo.
¿Qué no intentarán ante la posibilidad de que gane la Kuka?
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