Por Martha Silva
Un grupo de amigos formado por René, Miguel Ángel y Atilio (Luis Machín, Sergio Boris y Carlos Defeo) proceden respecto de la pesca igual que como la mayoría de los hombres lo hace respecto del fútbol o el automovilismo. Es lo único que se acerca a la felicidad y es el sustituto de sus ambiciones y amores frustrados. Pescar es para ellos un rito sagrado en el que invierten mucho dinero, ostentan una vestimenta ad-hoc, aparejos complicadísimos y un lenguaje técnico especializado. Se trasladan a un Club de Pesca “bajo techo” que fundaron en sus primeros años y ahí empezamos a sospechar cierta anormalidad. Porque la cruda verdad es que el lugar en el que desarrollan estas prácticas tan refinadas no es más que un torpe agujero en el sótano de una fábrica abandonada que da al arroyo Maldonado, donde han plantado unas cuantas tarariras que terminan comiéndose entre sí.
En realidad la pesca es lo de menos, no es más que una actividad encubridora de una soledad espantosa, de miedos varios, deseos sexuales reprimidos y canalladas que no se atreven a confesar. Terminan siempre hablando del peronismo, al que traicionan y por el cual son traicionados, pero que nunca van a abandonar. El trío tan mentado concurre al encuentro semanal donde esperan encontrar el pique o quizás a un Godot inalcanzable, quién sabe.
Ricardo Bartís es el director y autor -maestro de nuevas generaciones- en el que tenemos que valorar un trabajo auto-poético: él oficia siempre de intermediario y para descubrir la poesía teatral ya dada, investiga permanentemente, registra, estudia, ensaya. Este proceso no es rutinario sino que lo lleva a cabo a través de la teatralidad, pensando el mundo y produciendo sentido.
Ricardo Bartís es el director y autor -maestro de nuevas generaciones- en el que tenemos que valorar un trabajo auto-poético: él oficia siempre de intermediario y para descubrir la poesía teatral ya dada, investiga permanentemente, registra, estudia, ensaya. Este proceso no es rutinario sino que lo lleva a cabo a través de la teatralidad, pensando el mundo y produciendo sentido.
(La pesca, de Ricardo Bartís, viernes y sábados, a las 21. Sportivo Teatral, Thames 1426, Palermo)
Voy a tener que ir a verla. Fijate Martha porque creo que el horario ahora (desde que terminò Machin Los padres terribles) es a las 21.
ResponderEliminarBeso
Silvia
Es exacto. Me quedó así la nota porque hace bastante que la hice, pero en este momento Machín ( que es un grande) puede ir más temprano al Sportivo y se está dando a las 21. Con esta obra Bartís vuelve por sus fueros.Martha
ResponderEliminarQuè bueno, si no, me tenìa que tomar un taxi desde Palermo que me sale m``as de 20 pesos (!)
ResponderEliminarEntonces pásenme en limpio lugar, días y horas que tienen vigencia hoy, así lo modifico en el cuerpo principal de la nota.
ResponderEliminarsaludos
Viernes y sabados a las 21 en el Sportivo Teatral (la direccion està bien)
ResponderEliminargRACIAS sILVIA POR TU APORTE
ResponderEliminarhABLANDO DE TEATRO , COMO SIEMPRE, tiene su inter�s "Ciudad como botin", la �ltima puesta de la obra de Ren� Pollesch hecha por Luciano C�ceres. Muy buenas las actuaciones. Jos�ma Muscari, me result� gracios�simo como actor. Ya escribir� sobre esto en cuanto salga de ciertos apurones. No s� si eso de la simultaneidad de Filmaci�n de la obra , con el video es lo mismo que hace Tantanian, porque esa no la v� aun.O sea que se ve dos veces la misma escena: una en la realidad cuando la est�n filmando y otra en la pantalla que est� a un costado.
Lo que me parece impecable es la parte musical, las mujeres del grupo, esas prostis alemanas.
martha
No, la de tantanian no la filman, es teatro en estado puro.
ResponderEliminarTe la vuelvo a recomendar; Los sensuales, Vie y Sab a las 23.30 en el Camarin de las musas.
Saludos
Silvia