Por Oscar A. Cuervo
Bueno, el supermartes se acaba. Dos movilizaciones en la ciudad de Buenos Aires, la tele dice que hubo más gente en el acto de los ruralistas. Mañana parece que se vota en el Congreso. De todos modos, la cosa no termina hoy, ni mañana, ni el jueves. La Argentina está fracturada no desde el 11 de marzo, sino desde que el país existe. Ahora ha vuelto la movilización y eso a muchos los asusta, les parece violento. A mí me parece bien, ojalá se siga discutiendo como en estos meses, ojalá se siga resolviendo pacíficamente como en estos meses.
La fractura de la Argentina no está reflejada exactamente por la composición de los actos de hoy, ni tampoco por los bloques que voten mañana. Las cosas son más contradictorias. La cosa no es "Campo vs. Gobierno". Pero no creo que uno pueda mantenerse indefinido, yo estoy de un lado y no del otro. El asunto no es sólo el gobierno de los Kirchner, sino todo el tiempo por delante.
5 comentarios:
En esos términos lo pienso. Cabe destacar que tiene este país serias tendencias filicidas en un sector discursivo de los intereses en pugna que "casualmente" plaga los medios.
Un saludo cordial.
Escribís "ojalá se siga resolviendo pacíficamente como en estos meses". Y el problema es justamente que pasaron ciento y pico de días y no se resolvió absolutamente nada y cada vez queda mas claro que no hay vocación de resolver nada.
Juan Pablo:
tu discurso acerca de la vocación de resolver es una réplica del monodiscurso radiotelevisado, que podemos escuchar todos los días a toda hora. Forma parte de la lucha política, el enmascaramiento de la lucha y de los intereses en juego en términos de "vocación", con jergas psicológicas, morales y hasta religiosas. La fractura que que existe en la Argentina no se disuelve con vocación, y este imperio irrestricto del periodista-psicólogo-sacerdote que grandes sectores de la población replican como si lo hubieran pensado sirve para ocultar la verdadera naturaleza del problema.
Para mí esta historia no es el teleteatro que la radio y la tv nos quieren hacer creer. Yo creo que pasarán no cineto y pico de días, sino ciento y pico de meses, los kirchner pasarán, Biolcatti y Barrionuevo pasará, Morales Solá y Nelson Castro pasarán, el diario La Nación no sé si pasará o seguirá.
Y quizá el conflicto aun no se habrá resuelto. Yo me alegro de que el país esté movilizado y que se discuta, que se perciba que esta sociedad no cierra, que se sienta angustia por la situación, que haya que pensar a cada rato para comprender lo que sucede, que haya que pelearse con las palabras para nombrar lo que sucede y que no se pueda creer en ninguna versión de lo que nos dicen que pasa. Hay gente que tiene otra idea de la política, que prefiriría volver a la placidez del consumidor y del televidente.
Lo que yo sostengo es que me parece muy bueno que este conflicto y esta fractura abiertos se siga tramitando pacíficamente, a pesar de las ameanzas, las patoteadas, los escraches de gente como De Angeli, que para el actual melodrama trasmitido por cadena nacional privada, es un buenazo salido de las entrañas de la pachamama. Es una suerte que a pesar de todo esto, con 126 días de conflicto, la Argentina esté movilizada y todo se desenvuelva en forma pacífica.
Hay que politizar a la gente, eso es verdad, este conflícto por lo menos obliga a salir de la burbuja de entreteinment e industria cultural que de otra manera no se podría salir. ¿Esa mirada es algo
kierkegaardiana?
Yo tengo mis reservas para con Kirchner, pero la gorilada esta a full!
Oscar, menos mal que esto lo postiaste ayer, porque con la tapa de Clarín tenías un material. HOy pase por un kiosco y decia algo asi como "el acto del campo fue multitudinario pero igual van a votar x las retenciones". Con el agregado icónico de una panorámica mostrando una multitud del acto campestre, que cubría toda la tapa del diario.
Solo el hecho de que el diario se consume por costumbre... explica que sea el diario más popular de la Argenitina. Más allá que la objetividad no existe... Indignante.
Fede:
me quedo con la pregunta por la mirada kierkegaardiana: no es fácil de responder, porque en el pensamiento K (de Soren) no hay indicaciones políticas directas. Soren K fue en su momento pro-monárquico y anti-parlamentario.
Pero yo estoy convencido de que una posición de pensamiento no es lo mismo que las opciones particulares de quien la encarna: es muy controvertido lo que nos "dicen" politicamente las posiciones de pensamiento de Marx, Nietzsche, Freud, Heidegger o Wittgenstein. No necesariamente nos dicen lo que ellos individualmente hicieron.
En este kilombo que es la historia argentina, siento que a veces me habla al oído Marx, a veces Hegel, a veces Nietzsche, a veces Heidegger y otras Kierkegaard. A veces siento que nadie me dice nada y tengo que pensar algo yo. Y a veces me hablan al oido todos juntos y no entiendo un pomo.
saludos
Publicar un comentario