La estación de los despiertos

La cosa es así, me junté con mi amigo infalible de noches de caminatas extraviadas AC, le expliqué cómo venìa la mano. Me dijo: dame un par de horitas y veo qué puedo hacer. Y un par de horas después me mandó un casete a través de un motochorro. El casete contenía la siguiente grabación:


Ya pasó la estación de los vampiros
y la de los ojos abiertos
la próxima es la de los despiertos
sábados, domingos y feriados.

La de los calendarios atrasados
y vidas anteriores perdidas
la de las almas heridas
y vidas bohemias que premian libertad.

La de la inspiración y la locura
y los precipicios interiores
la de los viejos olores
que se quedaron en la nariz.

Las estaciones del país
son más de 4 estaciones
con el hombre de las emociones
de los viajeros en el tren de la vida.

Esta estación está escondida
entre el hambre y no hay pan duro
pero tiene gran futuro
en las rutas interiores.

Porque amores entrenados
para largos recorridos
o se dieron por perdidos
o los fueron a buscar
al ramal de los olvidos
y en el pito del sereno
y el tren de la voluntad
que no tiene frenos
que no sabe frenar
donde duermen los trenes sin durmientes
y los ramales secos en otoño
ferrocarriles con talón de Aquiles
Sabina tiene los abriles.

Ojalá los trenes de Argentina
los lleven donde los sueños se cumplen
son nobles y no contaminan
ni envejecen como las cosas de antes.

De ahora en adelante
me dicen el loco
el locomotora, el supertren
el loco loco locomotora es el super tren.