Bluesky

Al actuar como jefa de La Cámpora en detrimento de los intereses populares @cristinafkirchner.bsky.social se arriesga a devaluar su legado. En Rosario se la vio aislada, simulando liderar a una totalidad que no está, ansiosa por revalidar una relevancia que ni siquera debería estar en discusión.

[image or embed]

— Oscar Cuervo (@oscaracuervo.bsky.social) 24 de noviembre de 2024, 3:45

domingo, 6 de julio de 2008

Sed de mal (o Un toque de maldad)

Por Oscar A. Cuervo

Cuando programé este ciclo a desarrollarse en el Centro Cultural Fortunato Lacámera (San Juan 354) en homenaje a Maurizio y don Jaramillo, se me ocurrió contar 100 años de cine en doce películas que no fueran las más mencionadas en las listas canónicas. Fui tirando títulos al acaso. Pero me sucede en estos martes que, volviendo a verlas, empiezo a creer que las que propuse son películas insuperables, perfectas, milagrosas. Este renovado asombre me permite acompañar al asombro de la gente que viene al taller y las está viendo por primera vez: Amanecer (Murnau), La tierra tiembla (Visconti), Ugetsu (Kenji Mizoguchi) son simplemente cumbres del cine, vistas en el humilde espacio que nos provee el programa cultural de barrios.

Este martes le toca el turno a Sed de mal (A Touch of Evil), de Orson Welles, 1958.

Sin dudas Citizen Kane es una película extraordinaria, uno de los grandes relatos de la historia del cine. Sed de mal es mejor.

Algo no encaja en la vida de Miguel Vargas (Charlton Heston). Es, pese a su juventud, a big fish, un tipo importante, digamos. Funcionario antinarcóticos con una foja impecable, acaba de mandar preso al jefe de la familia Grande, una banda narco. Aunque tiene la cara de un hombre disgustado, Vargas hace siempre lo correcto: quiere ser respetable. "Muchos soldados odian la guerra. Aplicar la ley es un trabajo sucio pero debemos hacerlo". Su celo por la ley lo ha hecho ascender en su carrera y no piensa detenerse. Parte de su ascenso consiste en haber conquistado a Susan (Janet Leigh). El, un policía de origen mexicano en USA, se ha casado con una rubia niña rica. Todo hombre respetable debe tener un buen matrimonio. Está de luna de miel y se lleva a la mujer a su país: en ello se juega su orgullo viril. ¿La desea? Desea que sus compatriotas lo vean con ella. Desea que ella vea el brillo que él refleja en la mirada de los otros hombres, por su celo y por su mujer. Están por cruzar la frontera de USA con México. Pero algo va a pasar. Vargas va a encontrarse en el camino con el capitán Hank Quinlan y eso va a trastornar sus planes.

Quinlan (Orson) es el ocaso de un hombre, un gran detective y un policía sucio, viudo y alcohólico, gordo y rengo, una americano en la frontera. "Estás hecho una ruina, querido -le dice Tana (Marlene Dietrich), la puta del improbable burdel siempre vacío en el que constantemente suena una pianola, se diría que tocada por un fantasma-, deberías dejar de comer tantos dulces". "Los dulces me dan asco, ojalá engordara con tu chilli" -contesta Quinlan con melancolía. Se miran de un modo especial, no tanto como dos viejos amantes, más bien como dos hermanos, o como dos mitos del cine venidos a menos. Todos respetan a Quinlan, pero parece que hay dos personas que lo quieren. Tana es una. El sargento Menzies, que lo sigue como su sombra, que recoge el bastón que Quinlan deja siempre olvidado, el otro. Menzies mira a Quinlan con embeleso, verdaderamente lo ama; no deja de admirar la infalible intuición de su gordo jefe, intuición que lo lleva siempre a descubrir a los culpables. Menzies le debe la vida: una bala que iba dirigida a él fue a dar en la pierna de Quinlan. Y la pierna renga de Quinlan es una antena: por ella intuye siempre la presencia del mal. O sea: Quinlan y Menzies están enlazados por una bala, para siempre.

Un ricachón americano vuela en pedazos cuando está cruzando la frontera en su descapotable. Hace una hora era el dueño del pueblo, ahora pasa a través de un colador. Le han puesto dinamita en el coche en el que iba a buscar a su querida del lado mexicano. El coche vuela al entrar al territorio americano: territorio de Quinlan. Justo cuando el coche explota, Vargas y su rubia esposa van rumbo a la luna de miel. Él: "Te llevaría, pero ahora tengo preguntas que hacer." Ella: "Claro, el presidente de la comisión de narcóticos tiene un deber sagrado".

Los personajes transitan una y otra vez de un lado al otro de la frontera. En un punto ciego entre ambos lados, la ley se licúa, se derrite, se pierde. ¿La ley? ¿Qué ley? En esa zona regida por el caos, todos se agitan como moscas en la mierda. Ese territorio difuso es el que disputan Quinlan y Vargas. La dramaturgia de Welles, 16 años después de Citizen Kane, ha llegado a su punto óptimo, aquel que le permite plantear una interrogación sobre la ley y el amor en términos estrictamente narratológicos: dos oponentes luchando en el límite de sus territorios, transitando ese límite. Vargas más que transitar, erige: un muro que continuamente se desmorona, una ley que caduca a cada instante. Quinlan, más que transitar, cojea, resbala: resbala de la legalidad, de la ética profesional, hacia el alcohol y el crimen. Se cae.



Ahora se me ocurre que Quinlan y Vargas representan al personaje estético y al ético de los cuales habla Kierkegaard en O lo uno o lo otro. El primero desesperado por no querer ser sí mismo. El segundo, desesperado por querer ser sí mismo. Después que la veamos el martes voy a escribir un poco más de Sed de mal, pero ¿hace falta que diga que es una película de visión indispensable?

15 comentarios:

Anónimo dijo...

Es la deslumbrante historia de una traición. Una historia de fronteras entre EEuu y México, entre el bien y el mal- vaya a saber a qué otras situaciones linderas alude- ha sido narrada magistralemnte desde sus primeras imagenes. En la versión del 2000 luce mucho más el largo plano secuencia con que comienza el film.Se le han extraído los títulos superpuestos y la música demasiado fuerte que perturbaban la narración, cediendo paso a los ruidos callejeros,risas, gritos, en un clima que desembocará en el famoso estallido de la bomba conque se preanuncia la entrada de Quinlan. Es una secuencia que - si se la ve bien- cuenta toda la trama .
Marlene está mejor que nunca señalándole a quinlan, en secuencia inolidable también, que no puede adivinarle el futuro porque él, "ya sólo tiene pasado". Martha

Oscar Cuervo dijo...

Según mi top five personal, Sed de mal, junto con Ugetsu, Vertigo, Pickpocket y el primer episodio de Three times son lo más alto de la historia del cine.

Las cinco siguientes? La angustia corroe el alma, Un condenado a muerte se escapa, Histoire(s) du cinema, El padrino y El río.

Un día podríamos hacer una lista de listas entre todos los participantes del blog.

Oscar Cuervo dijo...

Ah, pero me estoy olvidando se Sokurov. Queda todo anulado por 180días!

Anónimo dijo...

De acuerdo con Fassbinder, ese bresson ( aunque Pickpocket y l'argent,no estaban nada mal) y Sed de Mal y ...dejame pensar.
martha

Anónimo dijo...

Sì, la vì. Charlton Heston como mexica està genial!

Anónimo dijo...

En el celebérrimo libro " Ciudadano Welles" de Peter Bogdanovich, éste último le pregunta mucho a oRSON SOBRE cHARLTON hESTON. sE EXTIENDEN 10 HOJAS y lo alaba como gran profesional. Ahí explica como lo ayudó HeStson y lo protegió en su pleito con la RKO y da a entender que ese rol no tenía nada ( el de Heston) por lo cual lo transformóen mexicano para enriquecerlo algo.
Dspués su tema con las armas lo desprestigió pero eso no signiica que no fuera el actor más disciplinado con el que trabajó OW.
eN LAS OBRAS DE ARTE TODO TIENE EXPLICACION.
mARTHA

meridiana dijo...

Ah, pero hay que ir, así como lo contás y además tratándose de Welles, es como una cita ineludible.y a qué hora?

El otro día en cable vi a la Dietrich, en la Dama de Shangai, en todo su esplendor.

Saludos

Lilián

Oscar Cuervo dijo...

Martes a las 18:00 hs. San Juan 354

saludos!

Anónimo dijo...

Tambien ví LA DAMA DE SANGHAI.Qué placer?
Sos Liliana?
Martha

Anónimo dijo...

Ah! Sería interesante que consiguieras la nueva versión de SED DE MAL completada por un equipo de expertos, que fuera traísa al país en ocasión del BAFICI 2000 y presentada luego por quien supervisó la restauración para Universal, el famoso crítico e investigador Jonathan Rosembaum, en el cine Cosmos. Posteriormente se ha exhibido en diversas salas y esto ha sido considerado un estreno comercial, aunque haya sido rodada en 1957.
Esta versión es maravillosa y parece haber sido filmada en la actualidad por su calidad tecnica. Por ejemplo, el plano secuencia inicial mejoró notablemente ya que se limpió de los títulos iniciales.
Liberarate tenía una versión vieja y auqneu es una película excelente, no conviene la copia vieja. bUENO, estos detalles ya los sabés Oscar, no sé para qué te lo digo. Beso. Martha

Oscar Cuervo dijo...

Martha:
la versión que hoy vamos a ver es la NUEVA, remasterizada y editada de acuerdo a las instrucciones que dejó orson en un memorandum.
saludos!

Analia dijo...

Nunca podria hacer un top five ni un top ten ni un top de nada menos peliculosamente, hay tanto, tan bueno, tan magico que se escurre.
Por suerte estan estos espacios, donde si queremos y el invierno logra sacarnos de las cuevas...vemos JOYAS!.

Oscar Cuervo dijo...

Analía.
yo sí puedo hacer un top five, y después otro y otro. Se pueden ir haciendo y con el tiempo unas películas bajan y otras suben.
Es más: este domingo en La Otra .-radio vamos a dictaminar cuáles son las mejores canciones de la historia universal
saludos

meridiana dijo...

upsss1 me la perdí Oscar, por culpa de la gripe...una pena realmente.

Martha, soy una de las compañeras meridianas de Liliana, y la verdad que sí un placer la Dama de Shangai.

un abrazo a todos

Lilián

Analia dijo...

Oscar:
es tu criterio yo no puedo y tambien me niego hacerlo. Me surgen contradicciones todo el tiempo.
Con las canciones me pasa lo mismo, hay mucho mucho y se me hace dicifil.
besos.