todos estamos igual

miércoles, 18 de enero de 2012

Muchacha ante el espejo

(Pablo Picasso, 1932)
Visuales XLIV‏


































por Liliana Piñeiro

Escena de dislocación: la imagen se abre como si la piel hubiera cedido y el sentimiento se desdoblara, reflejándose al exterior.

La muchacha extiende su mano y ofrece el abrazo a la mujer que la espera, inevitable, dentro del espejo. Pero ella, oscura, ya no la ve. Ha olvidado sus ojos en alguna parte.

2 comentarios:

Martha dijo...

Qué te puedo decir Lili? Estremecedor...

martha

Liliana dijo...

Estremecedor...como el tiempo y los espejos