todos estamos igual

miércoles, 29 de febrero de 2012

Un momento político complicado

Una conversación entre dos cristinistas





Willy: Me parece que están organizando una movilizacion de familiares a Plaza de Mayo, tipo Blumberg.

Oscar: Es probable, el gobierno está medio shockeado. Acordate lo que había dicho Abel Fernández el otro día: "nada es tan importante –en lo inmediato– para el gobierno nacional como darle contención y asistencia a los familiares de las víctimas, a los heridos y a sus familias. Para eso no se necesitan solamente fondos; se requieren hombres y mujeres dispuestos a extender un contacto humano, no burocrático. O se creará una 'minoría intensa', con una fuerte legitimidad y motivación emocional". Cristina y su equipo tendrían que haber estado cerca de los familiares desde el primer momento. Y si aún no lo hizo, espero que Cristina los reciba cuanto antes y no se deje madrugar porque, si no, los familiares van a a terminar siendo operados por otros, y nadie tiene derecho a exigir nada de los familiares. Mi preocupación es que Cristina no se dé cuenta de que después de Once algo cambió y que las políticas anteriores, las que la llevaron al triunfo de octubre, son una etapa cumplida, ya no bastan. En estos días posteriores a Once, la presidente sigue hablando sin asumir que hay una responsabilidad del estado en los trenes, no parece acusar recibo de la tragedia, que es algo muy fuerte e incomparable con todo lo que pasó hasta ahora. Pierde tiempo discutiéndole a Clarín, cuando no es algo de lo que ella se debiera ocupar. Y si 678 sirvió, y mucho, discutiendo cada noche las operaciones de Clarín, hoy su poder ya quedó neutralizado por la repetición; pero más que nada porque lo que pasó en Once no es una operación de Clarín, es un manifestación de las fallas que todavía tiene el país. La pelea con Clarín ya no puede ser el eje de esta etapa. Eso me preocupa porque en este momento no le veo buenos reflejos a Cristina.

Willy: Le faltan reflejos porque no quiere hacerse cargo de los golpes recibidos. Le entraron y le van a seguir entrando por el mismo lado hasta que se haga cargo. Cristina confía demasiado en su contrataque, ganó muchas por knock out y ahora no se da cuenta de que el cross de izquierda le esta haciendo daño, no lo puede parar. Ayer presentó en su discurso a una piba que fue víctima de Once, mientras que los familiares se movilizaban al Obelisco pidiendo justicia. Quieren la renuncia de Schiavi y que se sancione por lo menos a alguno de los que redactaron el increíble comunicado del Ministerio de Seguridad donde hacen cargo a Chimu por viajar en una cabina de mierda, destruida, sin puertas, donde viajan los que no encontraron otro lugar en el vagón cuando está repleto. Esto es como lo de Jaime o cualquiera de los hechos de corrupción en las provincias. Si no los resuelven, si no se hacen cargo de que el paso adelante se da empezando por casa, estamos jodidos. Es la segunda vez que está pagando un gran costo por no escuchar, el primer quilombo lo tuvo con los pobres de la provincia cuando ganó De Narváez. Y ahora es con la clase media y media baja que la votó hace dos meses masivamente. Cristina no se da cuenta de que esa aparente debilidad actual va a ser fundamental para recuperar fuerzas.

Oscar: A propósito de eso hoy Gerardo Fernández dice en su blog: "Romper el corsé que dejó el neoliberalismo, esa es la clave. Si se lo hace, hay futuro, si no se va a fondo, tarde o temprano se tornará imposible seguir adelante. En cada área estratégica que uno enfoca encuentra contratos firmados con duración de décadas, legislaciones a favor de los concesionarios, etc. Al neoliberalismo le llevó seis décadas destruir el país que dejó Perón en 1955. En estos 9 años hicimos mucho para reconstruir, pero las tareas pendientes llevarán mucho más tiempo, mucha gestión y mucha audacia. (...) Y todo habrá que hacerlo en un contexto de demonización y con un avance en los niveles del odio gorila que, la verdad, día a día nos sirve para dimensionar por qué una fracción de la Argentina llegó a celebrar en su momento el slogan "Viva el cáncer". Si no nos perdonan que Cristina no tenga cáncer, ¿cómo no van a sobregirarse con una tragedia como la de una semana atrás?".

Willy: Es muy bueno el debate que hay alrededor, en los blogs y en los que apoyaron, porque aporta análisis que deberían ser oídos. Creo que lo más positivo de este momento de debilidad del gobierno es la fortaleza de la discusión política interna, o mejor dicho en la periferia, porque no se ve debate en los círculos más cercanos.

Oscar: Es que veo un déficit enorme en la segunda línea del kirchnerismo. El secreto del éxito fue la inaudita complementación de Néstor y Cristina, dos dirigentes que están a años luz de todo el resto de la clase política. Imagino la discusión que había entre ellos, que además formaban una alianza política inquebrantable, otra cosa que comúnmente no sucede entre los dirigentes políticos. Ahora, solo está Cristina debatiendo consigo misma.

Willy: Hay algo de lo que dicen los enemigos que es cierto, por eso duele. La tragedia de Once demostró que el país se levantó gracias a las políticas de Nestor y Cristina, sin dudas, pero la estructura que lo sostiene sigue siendo la heredada del neoliberalismo. Así como las concesiones ferroviarias, el modelo minero, el modelo agrotóxico, son planes concebidos por el neoliberalismo que seguimos sosteniendo con apenas modificaciones y parches sobre la marcha, cuando se hace inevitable pilotear las contingencias. Si lo seguimos negando, las bombas nos estallarán en la mano. El tema es fomentar y saber escuchar cuáles son los planteos alternativos, si es que los hay. Porque también hay algo que dicen los buenos amigos que es cierto, ojalá podamos escucharlo. 

Los Z - Parte 2

por Lilián Cámera


Al principio pasábamos por el comedor sin prestar atención a los retratos. Los Zeta mantenían la costumbre de recibir a las visitas en el living, sentados muy rígidamente. Sus ojos se movían desacompasados del cuerpo, como una maquinaria defectuosa que se ajustara un minuto después de lo esperado. No siempre fue así. En una época era usual escucharlos reír al compás de la música a todo volumen y el aroma de la comida recién hecha. Eso hasta que pasó lo del niño. Habrá sido la tristeza, pero ellos se convirtieron en seres taciturnos, en figuras abstractas que salían para comprar el diario o el pan. Por pena los visitábamos seguido, llevando una torta o frascos de dulces caseros. Fue ahí que empezamos a notar que la foto del niño iba cambiando, a la vez que los ojos de los Zeta se volvían más inquietos y animales, autónomos de una carne que no podía acompañar su esencia. Al principio fue una pequeña mancha, luego sombras, grises absurdos para una foto color. Una tarde, alguien pudo distraer los ojos de los Zeta para observar con todo detalle la transformación. Ya no quedaron dudas, lo que fuera que le sucediera al retrato tenía íntima relación con los cuerpos estáticos del living. Del rostro del niño se propagaba una masa infecciosa en línea directa a los ojos paternos: la culpa agrandaba el vacío, la humanidad perdida, el devenir animal.


Imagen: © Pilar Zeta

martes, 28 de febrero de 2012

La autocrítica de la militancia K / Las canciones de Chimu y los chimeneas / El disco de Caetano y María Gadú

La otra.-radio para descargar



Abel Fernández estuvo conversando con nosotros el domingo pasado a la medianoche en La otra.-radio. Nos contó que viene militando en el peronismo desde fines de los años 60 y por lo tanto ha sido testigo y partícipe de una historia tan larga como llena de giros dramáticos. Por esa perspectiva histórica generacional, precisamente, necesitábamos consultarlo sobre el desastre de Once, que -más allá de lo que fue para todos el dolor por las pérdida de tantas vidas- es también el mayor cimbronazo que haya recibido la joven miltitancia kirchnerista, al menos desde la muerte de Néstor. Nos dijo Abel:

"Es demasiado fácil pontificar a partir de lo que pasó, y se siente que lo que pasó es consecuencia de políticas equivocadas. Esto lo sienten muchos militantes y -a pesar de todo lo que se dice, a pesar del lugar común acerca del discurso único kirchnerista y de cómo el gobierno maneja el relato- yo he encontrado que muchos kirchneristas fervientes se sienten mal con lo que pasó y no se sienten satisfechos con la respuesta que se ha dado desde el gobierno. Esto me parece notorio y elogiable, porque es muy fácil que el militante político, tanto el que está a favor como el que está en contra del gobierno, se maneje como una hinchada; pero lo valioso es cuando pueden mantener el compromiso con sus ideas y también la lucidez para saber evaluar si lo que está haciendo está bien. En este sentido, yo le doy buenas notas a mucha militancia kirchnerista*, más que lo que le doy a la oposición, que saltó encima de esto como una forma ideal para pegarle al gobierno, que, bueno... es es también el trabajo de la oposición, es natural. Pero el problema central no es el accidente, el mantenimiento, los errores en el control, hasta la corrupción (que existe, es imposible negarlo, en un negocio en que se manejan miles de millones sería un fenómeno muy extraño en el mundo que no haya corrupción). El problema central que yo creo que se le puede reprochar a este gobierno -que uno apoya porque siente que es la mejor opción entre las que están en el menú para Argentina- es la falta de planificación. en el área de transportes, una de las más vitales para la economía de un país hay una falta de planes...".

En el programa escuchamos las canciones de Chimu, el nombre artístico de Lucas Menghini Rey, una de las 51 víctimas de la tragedia, amigo de Martín Farina, del staff de La otra

Y también escuchamos unas cuantas canciones del hermoso disco de Caetano y María Gadú, Multishow ao vivo.

Eu não tenho tempo pra falar teu nome
Eu não tenho nome pra você dizer
Meu café jamais vai matar sua fome
Nada que tu traga vai me apetecer
Sinistro parece que a gente se deu ao desfrute de nada
Tua tanga na manga do mágico falso
Tuas mãos na cartola, teu corpo no palco.

Traga pra cá tudo
Deixe teu ser mudo me fazer falar
Traga pra cá tudo
Deixe teu ser mudo me fazer falar.

Não contei ainda teus escudos surdos
Sabe que eu te estudo sem me aproximar
O teu santo gringo me mostrou teu mundo
Vi que no escuro tu fica a chorar
Se Shiva me disse pra ter paciência
Te pego no beco do sino da crença
Te assusto com a ira da minha demência.

Traga pra cá tudo
Deixe teu ser mudo me fazer falar
Traga pra cá tudo
Deixe teu ser mudo me fazer falar.

* En su blog, Abel especifica algunas de la críticas más destacables hechas en el interior del kirchnerismo en estos días:

"Mario Wainfeld en Página 12, Roberto Caballero en Tiempo Argentino, medios kirchneristas, hacen cuestionamientos severos. Luis D´Elía y Hebe de Bonafini salieron a pegar, y lo que plantea D´Elía es por lo menos atrevido e interesante: pide reformar la Constitución a fin de reformar el Estado “neoliberal” que tenemos, y, para hacerlo posible, que Cristina haga una renuncia explícita a otro mandato.

La blogosfera K, expresión de esa militancia si la hay, ha ido más lejos (para eso sirven los blogs): no sólo cuestionan el entramado de empresarios y funcionarios con responsabilidad en el área. También se nota en lo que escriben que exigen una respuesta oportuna de su gobierno ante la crisis. Y hasta ahora no la ven.

No quiero hacer una lista de los posts que leí, porque dejaría afuera a los más que no vi (uno de los motivos porque no tengo un blogroll). Pero les propongo leer esto de Fede Vázquez, y esto de Gabriel Fernández...".

lunes, 27 de febrero de 2012

Oscar para El Artista

Un premio a qué?


por Oscar Cuervo

El artista (Michel Hazanavicius, Francia-Bélgica,2011) es una pequeña huevada de 14 millones de dólares cuyo mayor mérito es su eficacia distractiva. Es zonza pero no lo oculta. No pide del espectador otra cosa que admitir que puede ir al cine del shopping y pagar por una película en blanco negro y casi muda (casi) el mismo precio que paga por películas en colores y con bramidos en sistema Dolby; el espectador ha sido convenientemente advertido de que se trata de un "homenaje" al cine mudo; en realidad es una parodia inespecífica: lo que El artista emula es un conjunto de lugares comunes sobre el cine mudo, y ninguna película, ningún estilo y ningún cineasta en particular. Es el homenaje al cine que le gusta a las personas a las que el cine no les gusta.

Digo pequeña huevada, entre otras cosas, porque 14 millones de dólares son un presupuesto exiguo para competir con los 170 millones que costó Hugo, otro "homenaje al cine mudo", realizado por Martin Scorsese pero en 3D. Hugo es más pretenciosa, más compleja y también menos lograda. El artista fluye vaporosamente ahí donde Hugo se atasca en metáforas maquínicas. Sus apelaciones a la cinefilia son más específicas y eruditas, se citan películas y cineastas concretos, pero tampoco se entiende muy bien para qué servirían estas citas. Creo que es un error poner una contra la otra (El artista y Hugo), porque ambas son síntomas de un paradigma agotado. Las películas de Hazanavicius y Scorsese compitieron cabeza a cabeza en la ceremonia de la Academia de Hollywood que ayer a la noche premiaba lo ¿mejor? del cine de habla inglesa producido en 2011. Se llevaron 5 Oscars cada una, pero El artista se llevó los más importantes. Ambas responden, más que a un concepto artístico, a un diseño de producción: 1) "hagamos una película como si fuera muda sin serlo, hagamos como si hubiera sido hecha hace 80 años pero con guiños a espectadores que nunca irían a ver películas mudas"; 2) "hagamos un homenaje al cine primitivo pero hagámoslo en 3D, expliquémosle al público inculto que hoy va al cine que el cine primitivo era tan vistoso para aquellos espectadores como lo es hoy el 3D para estos". En ambos homenajes, el barato y el caro, el subtexto nos dice que el cine es algo muy importante para todos nosotros, aunque no sepamos por qué; o, si lo sospechamos, mejor no andar averiguando demasiado, porque empezaríamos a hablar de ilusiones, fantasía, magia, ensueños e inocencia, eufemismos que usamos para no decir "mentira".

En los términos de la Academia, se va a comentar que se premió al cine europeo independiente aunque no sea cierto: el productor de El artista es el norteamericano Harvey Weinstein, un peso pesado de la industria hollywoodense que sabe envolver un paquete como este (los 14 millones de presupuesto seguro que no incluyen la inversión en publicidad). Seguramente va a hacer un mucho mejor negocio que Scorsese, sobre todo con el impulso que el Oscar significa.

Que las películas premiadas por la Academia no tengan interés artístico no puede ser ya un escándalo para nadie: las grandes películas premiadas con el Oscar siempre fueron excepciones. El gusto de los votantes viene demostrando ser conservador, cursi, demagógico y conformista, aún en sus gestos presuntos de compromiso humanitario y corrección política. El cine ñoño que Hollywood premia no es aquel que rige en el mercado. El paradigma industrial de hoy es la prepotencia sensorial de Misión imposible 4, una experiencia adrenalínica que se apoya en estímulos intensos e ideas también toscas (la intensidad de los estímulos distrae de la tosquedad de las ideas). En todos los casos, se trata de un sistema productivo rápido y obsolecente. No es imaginable que dentro de 80 años alguien se acuerde de (y mucho menos homenajee a)  Hugo, El artista o Misión imposible 4.

domingo, 26 de febrero de 2012

Chimu y los chimeneas



Yo no necesito un spa
soy todo humo y al mirar
lo llena que está la ciudad
lo llena que está
me hace pensar
auuuuhhh...

Yo no necesito un spa
soy todo humo y al mirar
lo llena que está la ciudad
lo llena que está
me hace pensar.

Aunque hoy puedas vivir muchos versos más
prefiero guardármelos
y cantar
prefiero cantar
que no necesito un spa
que es solo un cuento más
va a pasar
va a pasar
solo un cuento.

Once: la violencia y las víctimas



por Abel Fernández

Esta foto con que abro el post, de la búsqueda por Lucas Menghini Rey, no es tan impactante como las imágenes de la violencia en Estación Once que estoy viendo en vivo por TV. Pero, estoy convencido, es mucho más importante desde el punto de vista más frío y politico (Además que me despierta más solidaridad humana, y me siento mal sabiendo cómo terminó la historia. Pero esos son sentimientos personales, que no tienen cabida en un blog analítico como éste).

(...) * Pero la historia de ese muchacho de 20 años cuyo cadáver aparece 57 horas después del accidente ante el estupor de su familia … es combustible para el fuego de dolor y bronca que arde en las familias de las víctimas. Y ese fuego puede provocarle quemaduras muy graves al gobierno.

No estoy pensando en los abogados que estarán formando fila para armarles sus juicios al Estado. Tampoco doy demasiada importancia al activismo que se “prenderá” en sus protestas. Son reconocibles fácilmente, y, salvo circunstancias muy excepcionales, los deudos, la gente común, tiende a aislarlos. Se vió en Once.

Pero nada es tan importante – en lo inmediato – para el gobierno nacional que darle contención y asistencia a los familiares de las víctimas, a los heridos y a sus familias. Para eso no se necesitan solamente fondos; se requieren hombres y mujeres dispuestos a extender un contacto humano, no burocrático. O se creará una “minoría intensa”, con una fuerte legitimidad y motivación emocional.

Por supuesto, sigo pensando que se debió haber renunciado a Schiavi, suspendido la concesión al Grupo Plaza (si el Estado ya controla todo el negocio y hasta paga los sueldos, intervenirlo es un paso obvio), y anunciado, al menos, un plan de reestructuración ferroviaria. Pero esas son medidas políticas, que los de afuera discutimos sin todos los elementos.

Este aspecto humano ya lo había conversado en estos dos días con compañeros de diversas actitudes. Pero que concordamos en que la debilidad política de nuestro gobierno, hoy, sólo puede fortalecer a proyectos que no nos gustan.

* Leer post completo acá.

Nota del editor: Abel Fernández es un veterano militante peronista que en el correr de los últimos años fue sintiéndose cada vez más identificado con el kirchnerismo, como expresión actualizada del peronismo realmente existente. En su blog pueden leerse reflexiones plenas de matices, por lo general muy serenas (algo difícil en estos días de hipérboles), y sin embargo comprometidas. A Abel la mesura no le impide tomar partido. Esa rara conjunción es lo que lo destaca de la mayoría de los blogs políticos de la actualudad argentina. Hoy a la medianoche conversaremos con Abel Fernández en La otra.-radio. FM La Tribu, 88.7, online.

Además, hoy en La otra.-radio: los nuevos discos de Caetano Veloso y Paul McCartney.

viernes, 24 de febrero de 2012

En días como estos, militar es pensar. Enfriar arrebatos y desarmar provocaciones

Son días de pensar. Pensar antes de hablar de más. Buscar palabras justas. No ceder a la tentación de la facilidad de estas redes.

Nada más, solo eso.

Quería querer cantar afinado con ellos




Mientras los hombres ejercen sus podridos poderes
las motos y los escarabajos pasan la luz roja
y pierden la verde
nosotros somos unos negros.

Quería querer gritar setecientas mil veces
qué lindos son
qué lindos son los burgueses
y los japoneses
mas todo es mucho más.

Será que nunca haremos sino confirmar
la incompetencia de la América católica
que siempre precisará de ridículos tiranos.

Será será que será
qué será que será
será que esta
mi estúpida retórica
tendrá que sonar
tendrá que oirse por más de mil ańos.

Mientras los hombres ejercen sus podridos poderes
indios y padres y putos, negros y mujeres
y adolescentes hacen el carnaval.

Quería querer cantar afinado con ellos
silenciar en respeto a su trance en un éxtasis
ser indecente
pero todo está muy mal.

O entonces cada paisano y cada capataz
con su estupidez hará brotar sangre de más
en pantanales, ciudades, caatingas y en general.

Será que solo los Hermetismos Pascoais
y los Toms y los Miltons, sus sones, sus dones geniales
nos salvan, nos salvarán de las tinieblas
y nada más.

Mientras los hombres ejercen sus podridos poderes
morir y matar de hambre, de rabia y de sed
son tantas veces gestos naturales.

Yo quiero aproximar a mi cantar vagabundo
al de los que velan por la alegría del mundo
yendo a lo más hondo
latas y bienes y tales.

O entonces cada paisano y cada capataz
con su estupidez hará brotar sangre de más
en pantanales, ciudades, caatingas y en general.

Será que solo los Hermetismos Pascoais
y los Toms y los Miltons, sus sones, sus dones geniales
nos salvan, nos salvarán de las tinieblas
y nada más.

Caetano Veloso, 1984









































El domingo a la medianoche en La otra.-radio, Multishow ao vivo, el nuevo disco de Caetano y María Gadú. FM La Tribu. 88,7. Online.

jueves, 23 de febrero de 2012

Ah, bruta flor, bruta flor

Los quereres



Donde quieres revólver, soy cocinero
donde quieres dinero, soy pasión
donde quieres descanso, soy deseo
donde solo soy deseo, quieres no
y donde no quieres nada, nada falta
donde vuelas bien alto, yo soy el suelo
donde pisas el suelo, mi alma salta
y gana libertad en la amplitud.

Donde quieres familia, yo soy loco
donde quieres romántico, burgués
donde quieres Leblon, soy Pernambuco
donde quieres eunuco, semental
donde quieres un sí o un no, tal vez
donde ves, yo no vislumbro la razón
donde quieres un lobo, yo soy hermano
donde quieres cowboy, yo soy chinês.

Ah, bruta flor del querer
Ah, bruta flor, bruta flor.

Donde quieres un acto, soy espíritu
donde quieres ternura, soy tensión
donde quieres verso libre, endecasílabo
y donde buscas un ángel, soy mujer
donde quieres placer, soy lo que duele
donde quieres tortura, mansedad
donde quieres un lar, revolución
y donde quieres bandido, soy héroe.

Yo quería quererte amar amor
construirnos dulcísima prisión
encontrar la más justa adecuación
todo métrica y rima y nunca dolor
mas la vida es real y está al revés
y ve solo qué celada el amor me armó
yo te quiero y no quieres como soy
no te quiero y no quieres como es.

Ah, bruta flor del querer
Ah, bruta flor, bruta flor.

Donde quieres comicio, soy flipper-vídeo
donde quieres romance, rocanrol
donde quieres la luna, soy el sol
donde pura natura, insecticidio
donde quieres misterio, soy la luz
donde quieres un canto, el mundo entero
donde quieres cuaresma, soy febrero
donde quieres coqueiro, soy obús.

Los quereres y estares siempre al fin
de lo que en mí es de mí tan desigual
me hacen quererte bien, quererte mal
bien a ti, mal a querer así
infinitivamente personal
y queriendo quererte sin tener fin
y queriéndote, aprender el total
del querer que hay y del que no hay en mí.


miércoles, 22 de febrero de 2012

Lo sublime y lo ruin

Esther Díaz, Werner Herzog, Yatasto, Adele, Magnetic Fields, Paul McCartney. 
Un programa para bajar. (19/02/2012) Clickear en los siguientes enlaces:

Primera parte del programa
Segunda parte del programa
Tercera  parte del programa






por Oscar Cuervo

En la última emisión de La otra.-radio tuvimos la visita de Esther Díaz, esta vez no para hablar de Filosofía, sino para compartir nuestra pasión por el cine de Werner Herzog. Desde sus filmes tempranos, como Señales de vida o Fata Morgana, hasta sus últimos y sorprendentes Un maldito policía en Nueva Orleans o La cueva de los sueños olvidados, pasando por su amor-odio por Klaus Kinski, el lenguaje enloquecido de los subastadores de Pensilvania (How Much Wood Would a Woodchuck Chuck) y sus vaivenes entre el documental y la ficción (The Wild Blue Yonder o Fitzcarraldo, aunque en realidad casi toda su obra). Más allá de todos los recuerdos gozosos que sus películas nos brindan, nos preguntábamos también cuáles son las rasgos persistentes de una filmografía tan extensa como intensa. Hacia el final asomaron un par de nociones que pueden funcionar como claves de su autoría: lo irónico y los sublime, principios de procedencia romántica. Fue una conversación muy disfrutable, distante de lo académico y divertida. Escuchamos también varios temas musicales de sus bandas de sonido (Popol Vuh, Verdi, Ernst Reijseger). En la charla con Esther estuvimos Martín Farina, Maxi Diomedi y yo.

También tuvimos un diálogo telefónico con Willy Villalobos (ausente con aviso) sobre la potencia política de Yatasto, seguramente lo mejor de la cartelera porteña actual. Willy está convencido de que la fuerza del documental de Hermes Paralluelo radica en que hace visible un mundo que, desde nuestra mirada pequeño-burguesa, solo aparece como un destino a esquivar: la pobreza extrema; pero que en la misma película muestra una vitalidad sin falta. Pasolini dijo en 1973 unas palabras que podrían dar una clave para pensar esta incomodidad que produce Yatasto:

“Hay -esta es la cuestión- una idea sincera o insinceramente común a todos: la idea de que el peor de los males del mundo es la pobreza y que por lo tanto la cultura de las clases pobres debe ser sustituida por la cultura de las clases dominantes. Nuestra culpa de padres consiste en creer que la historia no es ni puede ser más que la historia burguesa. Hemos aceptado la nueva forma de poder, el poder del consumismo, la última de las ruinas, la ruina de las ruinas”.

Yatasto nos sigue haciendo pensar mucho. A mí, más allá del entusiasmo de Willy y de la angustia que provocan en otros amigos estas imágenes de la pobreza, las sucesivas visiones de la película me permitieron apreciar su forma concisa, su elegancia narrativa y esa hazaña de la distancia justa, una clave donde se anudan estética y política. Es tan sobria la ejecución del plan que la película deja un hueco por el que el espectador reconoce en la pantalla lo que trae puesto. Yatasto no es una película sobre niños pobres sino sobre la distancia a la que nos colocamos de la pobreza. 

En el programa también escuchamos un par de adelantos de los nuevos discos de Paul McCartney y Magnetic Fields. Y tratamos de entender por qué Adele ganó tantos Grammys.

martes, 21 de febrero de 2012

La farándula pide "desmalvinizar" las Malvinas por lo menos por dos años

Jorge Lanata y Santiago Kovadloff

Un "grupo" de intelectuales, constitucionalistas, deportistas y cómicos está "preocupado por el curso de los acontecimentos". Temen "lo peor". Después de la tremenda derrota que sufrió la "oposición" en octubre pasado, las figuras de Lilita Carrió, Eduardo Duhalde, Ricardito Alfonsín y Pino Solanas perdieron atractivo mediático. Pero Clarín, Perfil y La Nación necesitan llenar con "algo" tanto espacio vacío. Entonces pasaron a ocupar un lugar "destacado" estos personajes del medio cultural: Beatriz Sarlo, Juan José Sebreli, Santiago Kovadloff, Rafael Filippelli, Emilio de Ipola, Martín Palermo, Marcos Novaro, Eduardo Antón, Jorge Lanata, Gustavo Noriega, Quintín, Pepe Eliaschev, Luis Alberto Romero, Hilda Sábato, Roberto Barbarella, Daniel Sabsay y la diputada por la Coalición Cívica Fernanda Iglesias.

Eduardo Antón: "Yo me opongo a todo porque me parece que en el kirchnerismo todo es una estafa, aun lo que pueda parecer correcto".


Gustavo Noriega y la diputada Fernanda Iglesias

Son 17 en total (sin contar a Guillermo Saccomano, que esta vez leyó antes lo que había que "firmar"). Todos ellos tienen garantizado, en los próximos días, espacio en los programas de las 22:00 en TN y "entrevistas" en las radios de la mañana. Elaboraron un "documento" que tienen guardado entre siete llaves hasta que lo den a conocer hoy en un centro "psiquiátrico".

Beatriz Sarlo y su esposo

No obstante, fuentes muy allegadas a los faranduleros opositores han dejado trascender que el documento pide "desmalvinizar" las Malvinas, por lo menos hasta que no haya ni un niño con hambre en el país y Martín Caparrós vuelva a autorizar la venta de sus libros. Todo comenzó cuando el respetado "historiador" Luis Alberto Romero presentó su ponencia "¿Son realmente nuestras las Falklands?". Hicieron falta unos pocos mensajes de texto por celu para que el grupo de pensadores llegara a redondear la idea de que es precisa una versión alternativa a la que sobre las Islas "Malvinas" propone el gobierno de los Kaka: uno de los ejes centrales de la propuesta será que la "Presidenta" adopte una posición que tenga en cuenta los intereses de los británicos, principalemente los de David Cameron. El humorista Daniel Sabsay aseveró: "en los últimos 30 años el nacionalismo a ultranza no dio mayores resultados, ¿por qué no cambiamos drásticamente nuestros planteos y nos volvemos mucho más cipayos?". La diputada Fernanda Iglesias, que se mostró muy entusiasmada por la idea de Sabsay, concluyó: "estoy en contra de todo tipo de escalada, incluso de una verbal, ni siquiera me gustaría que pongamos trompita de enojados".

Los "trascendidos" aseguran que el documento contendrá también severas críticas contra el ajustazo, la kilométricas colas para pedir la tarjeta Sube, el plan de espionaje pergeñado por la ministra Garré y el "silenciamiento" de las críticas opositoras.

En consonacia con este pronunciamiento, un grupo de cantantes pop ha preparado un clip que el gobierno de la Kretina no quiere que veamos. Es este:

lunes, 20 de febrero de 2012

Partida del barco con alas

(Vladimir Kush, 2007)
Visuales XLIX‏

por Liliana Piñeiro

El aleteo de las mariposas acompaña el murmullo implorante del agua. Las nubes se arremolinan señalando la costa, los hombres se agitan en la orilla y el aire se cruza de vibraciones, en un ruego inútil y amoroso.

Pero hay una crueldad agazapada bajo las alas, inconmovible. Con el color desplegado en sus mástiles el barco se aleja, como la felicidad.

domingo, 19 de febrero de 2012

Los Z - Parte 1

por Lilián Cámera

La tormenta de hojas llegó al jardín de los Zeta un día agobiante de verano. Llegó sin aviso como las plumas del ave que yacía sobre el césped, primero en un dulce vaivén y luego con furia colándose por ventanas abiertas y rendijas. El pequeño Zeta jugaba en el porche y por momentos se abanicaba con un sombrero viejo. Sus manos se tornasolaban del ocre a un rojo viscoso, apretando y soltando espasmódicamente. No hubo tiempo de nada. En cuestión de segundos los gritos de la madre destemplaron la tarde. Un murmullo ininteligible brotaba de lo que había sido la cara del niño, aún sosteniendo el sombrero su figura se encumbraba detrás de las cortinas como un árbol diminuto con piernas. Desde entonces los vecinos murmuran que los pájaros rodean la casa en círculos concéntricos pero jamás se posan en su techo o sobre las flores del terreno. Todo, hasta el juego, tiene su precio.

Imagen: © Pilar Zeta

sábado, 18 de febrero de 2012

Andrew en drag

Anticipo del nuevo disco de The Magnetic Fields



Qué pena que ella no exista, qué lástima que él no sea puto
la única chica que yo amé fue Andrew en drag
no hay esperanza de amor para mí
de aquí en adelante voy a quedarme solo
la única chica que yo amé fue Andrew en drag.
Andrew en drag
Andrew en drag
Andrew en drag
yeah.

Ni siquiera sé por qué me pasó, no es lo mío
el momento en que él salió a escena mi rabo se empezó a menear
se meneaba como un perro salchicha por Andrew en drag.
Andrew en drag
Andrew en drag
Andrew en drag
yeah.

Yo siempre fui un mujeriego y no tengo que fanfarronear
pero me volví un chico de mamá por Andrew en drag
firmaría mi fondo fiduciario, hasta vendería el Jaguar
si pudiera pasar mi juventud perdida con Andrew en drag
Andrew en drag
Andrew en drag
Andrew en drag
yeah.

Ponele un vestido y es el único chico al que cojería
el único con el que haría cualquier cosa es Andrew en drag.
Nunca volveré a ver a esa chica, él lo hizo como un gag
voy a languidecer por siempre por Andrew en drag.


Se acaba de conocer el primer corte del nuevo disco de The Magnetic Fields. El disco, que sale el 6 de marzo, se llama  Love at the bottom of the sea y el primer simple es "Andrew in drag". Como de costumbre, se trata de otra historia de amor tragicómica, cuya comicidad viene muy apoyada en una serie de rimas intraducibles: fag, drag, stag, bag, wag, Jag, brag y... shag! Aún sin ese plus, el tema es superdisfutable.

viernes, 17 de febrero de 2012

Werner Herzog / Esther Díaz

Domingo a la medianoche en La otra.-radio


por Oscar Cuervo

¿Tiene sentido seguir sosteniendo, a esta altura del cine contemporáneo, el concepto de autor cinematográfico? Para algunos, este concepto puesto en circulación por la revista Cahiers a fines de los años 50 está pasado de moda. ¿Quedan autores? En el blog de Roger Koza se está debatiendo alrededor de esta cuestión.

Quedar quedan.

Está Herzog. En los últimos años hizo películas tan distintas como Un Maldito Policia en Nueva Orleans y La cueva de los sueños olvidados. ¿Qué tienen en común, desde el punto de vista temático, formal, estilístico? Y sin embargo, ¿es posible tender un puente de ideas entre ambas películas?

Desde los años 70 Herzog viene ensayando en sus películas diversas aproximaciones a la pregunta por el hombre y la civilización, la naturaleza y la cultura, el individuo y la especie; desde hace décadas viene buscando una experiencia límite de la mirada humana a través de la cámara cinematográfica. Bueno, esto es discutible, podés no acordar con ello, supongamos que es solo un esbozo esquemático que permite ligar muchas de sus películas, si no todas. ¿Esto describe una esencia “Herzog”? No importa: sirve para encontrar nuevos sentidos en sus películas (o no sirve y descartamos la idea). En el terreno de la puesta en escena, el personaje de Cage se mueve de una manera particular, adopta ciertas posturas, entra a cuadro haciendo un giro que recuerda a los personajes de Kinski en las películas de Herzog en los 70. ¿Qué relación podemos encontrar entre los personajes de Kinski y Cage? No está dicha la última palabra, pero hay cierto eco de unas películas en otras.

Este domingo viene Esther Díaz a La otra.-radio. Vamos a hablar de un autor cinematográfico: Werner Herzog.

Domingo a la medianoche, FM La Tribu, 88.7, lo podés escuchar online.

La respuesta artística de Almodóvar a la amnesia española




En los últimos tiempos algunos críticos marcaron que el cine de Almodóvar se fue alejando progresivamente de la realidad para cerrarse sobre sí mismo. Quizá no sea este el lugar para discutirlo (creo que en cine hay varias posibilidades de hacer presente la verdad sin necesidad de hacer referencia directa a la realidad; y que en sus últimas películas Almodóvar está cada vez más afilado en la busca de la verdad de la obra como obra). Pero creo que vale la pena considerar que Almodóvar fue hasta el momento (que yo sepa) el único cineasta español en pronunciarse artísticamente contra la repugnante decisión de complicidad de los españoles con los crímenes franquistas. Cosas del primer mundo: la degradación colectiva de la amnesia. En una España atorada de omisiones, Almodóvar recuerda.

jueves, 16 de febrero de 2012

Yatasto: la película argentina del año


por Oscar Cuervo

Este jueves se estrena una de las mejores películas argentinas de los últimos años. Se llama Yatasto, la dirigió el catalán Hermes Paralluelo y fue filmada en Córdoba Capital.

Llega a las pantallas con un lanzamiento sumamente precario, sin publicidad, sin un mínimo respaldo de prensa. En una sola sala, el Gaumont. Por lo que su visbilidad y permanencia en pantalla va a depender de condiciones linderas con el milagro.

Así que yo en este momento haré lo que debo: advertirles a los lectores de este blog que esta película vale mucho más que la mayoría de otras de las que mucho se habla. En el número de revista La otra que sale en marzo, le dedicamos a Yatasto una de las notas más extensas: la película argentina del año. Le paso la palabra a Willy Villalobos, que escribió esto:


por Willy Villalobos

Yatasto es un gran documental que trata de una familia que vive del cirujeo. Todos los días los pibes salen a ganarse la vida en un carro tirado por un caballito, recorriendo las calles de Córdoba. La película está hecha para mirar lo que pocos pueden ver, su director lo deseaba desde el principio: “Tengo que hacer la película más linda hecha en un carro, necesito hacer una película en la cual haya belleza, que sea una cosa muy frágil, tengo que devolver lo que estas personas me han dado”, decía Hermes Paralluelo, el muchacho recien llegado de su tierra, Cataluña, mientras hacía Yatasto. “Creo que si vas con la idea de filmar la pobreza, los marginados, ya es un desastre desde el principio, te aleja de los seres humanos que estan ahí, vas tú mismo con una barrera, una gran barrera”, aseguraba Hermes, demostrando que ya sabía lo que no tenía que hacer. 

Esa forma de mirar lo llevó a descubrir que Ricardo, el Bebo, el Pata, la Chinina, la Mónica, el Canece y el Chupa , mas allá de ser pobres, aman, odian, desean, la pelean y disfrutan, en un lugar del mundo donde la mayoría de la gente solo ve carencias y privaciones. 

El que sostiene la película es Ricardo, un personaje que enamora, ama a su padre, lo defiende, lo ayuda, quiere ser jockey, está seguro de que va a ganar carreras y tiene un amor a la libertad que queda claro en este pequeño diálogo con su hermana:

- ¿Es lindo pirarse?- le pregunta la hermana.
- Sí.- dice Ricardo.
- ¿Qué tiene la calle?
- Acá adentro no me gusta, en la calle podés divertirte, irte al río, salir en carro, ganarte una monedita. Vos te quedás aquí encerrada. Tenés que salir, chiquita, a la calle.
- No, porque primero está el estudio.
- No, al estudio yo lo dejo, lo dejo para mierda, lo dejo para el ocote.
- A vos no te gusta estudiar.
- A mí nunca me gustó.
- Ya sé, sos igua al papi vos.
- Sí, soy igual que el pá, burro.

Ricardo parece hablarnos a todos nosotros, a los que las buenas intenciones nos impiden ver lo que tenemos delante de los ojos.

No se pierdan Yatasto, es inolvidable.


Yatasto from El Calefon Cine on Vimeo.

miércoles, 15 de febrero de 2012

Sí a la minería



En este momento al kirchnerismo le está faltando un comunicador como Correa.

Recuerdo los tiempos de la 125, ese error político que a la larga fue tan fértil para el gobierno. En los primeros meses no se lograba comunicar una idea seductora, consistente, creíble. Pero de esos meses de tanteo y error salió la fortaleza política que se traduce en el 54 % de octubre pasado.

Esperemos que esta vez el gobierno se avive pronto de que falta hacer más política, más comunicación, más debate y más beneficios tangibles.

Y en cuanto a los que andan con ganas de bajarse, probablemente unos cuantos progres ambientalistas que votaron vía Sabbatella se bajen del carro, pero quizá, si es por eso, ni siquiera hace falta que nos acompañen.

martes, 14 de febrero de 2012

Por todas partes voy buscando un parlante

Spinetta - Lado B (Un programa para bajar)
La otra.-radio, 13 de febrero de 2012
Para bajar el audio completo del programa, clickear acá.

Todos los espejos dan ¿a qué?
por todas partes voy buscando un parlante,
todas las palabras son los hombres,
por todas partes voy buscando así
sólo con mi ruido de magia.

Brújulas de cuerpos para armar
por todas partes van buscando un parlante,
en el silencio se oye un inmenso parlante,
ni la luz del amor ni el dinero ni la revisión,
por todas partes voy buscando un parlante,
por todas partes voy buscando así,
solo con mi cono de lluvia.

Oh, Madeleine, loco amor, vives junto a la radio
no creo en un cuerpo sin sonido
por todas partes voy buscando un parlante
me despierto sin el son de un parlante.

Todas las palabras son los hombres
por todas partes voy buscando un parlante
por todas partes voy buscando así
sólo con mi cono de lluvia.

Oh, Madelaine, loco amor, vives junto a la radio
no sé si es detrás de tu cono que vibra,
no sé si es detrás de tu cono que no cesa de decirme:
todos los espejos dan ¿a qué?


Los temas que escuchamos en el programa (para bajar el audio completo, clickear acá)

1 - Toma el tren hacia el sur (Almendra)
2 - Hoy todo el hielo en la ciudad (Emilio del Guercio y Litto Nebbia, Celebración)
3 - Despiertate nena (Pescado Rabioso en vivo)
4 - Viejos ratones del tiempo (Invisible)
5 - Parlante (Luis Alberto Spinetta, Tester de violencia)
6 - Tonta luz (Checho Fla, en vivo en nuestros estudios)
7 - Barro tal vez (Spinetta, Unplugged)
8 - Los elefantes (Spinetta en vivo en Santiago de Chile, fecha desconocida)
9 - A Starosta el idiota (Checho Fla y Martín Farina, en vivo en nuestros estudios)
10 - Que ves el cielo (Spinetta y Charly en vivo, Obras, 1980)
11 - Panacea (Checho Fla, en vivo en nuestros estudios)
12 - Dale Gracias (Spinetta Jade, en vivo en Obras 1980)
13 - Spersitición (Spinetta, Artaud)

Checho Fla y Martín Farina interpretando a Spinetta en vivo en La Tribu:





Hay más videos en el canal La otra.-cámara en Youtube.

lunes, 13 de febrero de 2012

Hugo o el ilusionismo embalsamado

La última tentación de Scorsese


por Oscar Cuervo

¿Qué le pasó a Scorsese?

Su última gran película de ficción la hizo hace ya 17 años. Entretanto hizo algunos documentales que alentaron la ilusión de que volviera a ser el que fue: notablemente No direction home. En cambio, su producción ficcional fue perdiendo cualquier atisbo de estilo. Perdió su estilo. Pero no para ganar otro. O para suplir la necesidad de tener un estilo por alguna osadía formal que el concepto de "estilo" no pudiera contener. No. En lugar de su propio estilo, lo que ha quedado en la obra reciente de Scorsese es un desdibujamiento: sus películas podrían estar hechas por cualquier otro. Jamás nos daríamos cuenta de que Los infiltrados, La isla siniestra o Hugo han sido hechas por la misma persona si los títulos no nos lo advirtieran. No hay un distanciamiento, un desacomodamiento, una negación o una alteración de su estilo anterior. Hay una especie de sepultamiento, de borramiento u oclusión. Me da la sensación de que Scorsese ha perdido de vista a su espectador. Debe pensar que los que vieron Taxi Driver, El Rey de la Comedia, Toro Salvaje, Buenos Muchachos o Casino están todos muertos. Que la gente que va al cine hoy en día no podría asimilar esas películas y se impuso a sí mismo simplificar sus planteos estéticos para hacerlos accesibles a audiencias más básicas.

Hugo es una película en la que Scorsese intenta entablar contacto con la audiencia de Spielberg. Parece estar concebida bajo la hipótesis de que Spielberg ha triunfado y que toda resistencia es inútil. Taxi Driver fue conocida apenas unos meses después de Tiburón. Son sus respectivas películas consagratorias. Todo el mundo sabe que el paradigma Spielberg triunfó en Hollywood. A la altura de Hugo Scorsese parece haber firmado su rendición incondicional.

La coartada es la cinefilia: la preservación de las viejas películas, la rememoración de los pioneros, la evocación de un inventario sentimental común a grandes audiencias. La restricción de base es que planteos inquietantes, perturbadores, desestabilizadores no pueden tener lugar en el cine actual: por ejemplo, el punto ciego que une en Taxi Driver la escena de la masacre con el presunto (y terriblemente ambivalente) happy ending es hoy un gesto imposible. La sensación de malestar soterrado que mina El Rey de la Comedia es una experiencia hoy proscripta. La tortuosa estrategia de identificación/distanciamiento que nos producía Toro salvaje ha sido abjurada. 

En lugar de esto, el paradigma Spielberg impone dirigirse al "niño que todos tenemos adentro". Nos propone una identificación confiada con una mirada infantil. Se supone que ante determinadas películas nos volvemos niños: mentira elevada al cuadrado: nadie que no lo sea podrá volverse niño jamás, ni siquiera por dos horas. El dispositivo cinematográfico de la puerilización demanda un importante monto de mala fe por parte del puerilizado. Pero además y sobre todo: la niñez nada tiene que ver con la sensiblería, con un sentimentalismo férreamente codificado, con primeros planos de caritas sonrientes, bondadosas, lacrimosas, falsamente inocentes, con mundos simplificados y unidimensionales. La infancia es un territorio terrible, poblado de horror, de angustia, de inquietud, siempre al borde del abismo. Hugo es una película llena de primeros planos con caritas emocionadas, de lectura inmediata y unívoca. Entonces, no se trata de una mirada infantil sino de una mirada construida en base a los clisés industriales acerca de la infancia.

Ser niños otra vez ante la experiencia cinematográfica. Pero ¿qué cine es el que, según Hugo de Scorsese, merece ser preservado? ¿Y preservado de qué manera? La salida ante la mecanización parece ser el ilusionismo: es precisamente Melies el precursor al que Scorsese le tributa en esta ocasión. ¿Y por qué Melies, entre todos los precursores posibles? Por su ilusionismo. El ilusionismo homenajeado aquí está abstraído del flujo histórico que lo hizo posible: porque el ilusionismo ha sido una reacción mecánica al mecanicismo. El principio constructivo de Hugo es el de la máquina con corazón. Melies abrió posibilidades para el cine con su iniciativa. Pero lo que Scorsese celebra hoy de Melies en Hugo es un ilusionismo abstracto. Como si se tratase de un principio elemental y eterno, que siempre puede surtir efectos parecidos. 

Se sabe que desde hace unos años Scorsese se ha vuelto un preservacionista de las viejas películas, que pone parte de su dinero para preservar a Vertigo o Belle de jour del deterioro del tiempo. Los negativos son puestos a salvo, se los remasteriza y se los muestra a las nuevas generaciones en condiciones óptimas. Loable propósito. Mirada infantil, máquinas sentimentales e ilusionismo abstracto. Preservación y restauración de piezas arqueológicas. La operación cinematográfica que Hugo propone es finalmente retrógrada. Propone la restauración del cine de Melies y su remasterización en 3D. Hay que borrar en la imagen ilusionista toda huella histórica del tiempo del que proviene para reciclarla en el mercado de las imágenes aggiornadas. Hay que embalsamar los restos de Melies con técnicas de última generación para repetir el asombro en espectadores puerilizados. 

Con todo respeto, Scorsese: ¿por qué no te vas a cagar?

sábado, 11 de febrero de 2012

Lanata ta pa la chanza

El Pájaro Salinas en La otra.-radio. 5/2/2012
Link para bajar el audio del programa completo: clickear acá.


por Willy Villalobos

Conocí al Pajaro Salinas en el exilio, allá por los 80.

Antes, en la cárcel de La Plata, en el pabellón 1, el de los irrecuperables, según decían los cobanis, compartí aquella mazmorra con su hermano, "el piraña" Luis Salinas. Este pibe que tanto quiere el Pájaro murió de un injusto cáncer a poco tiempo de salir de la cárcel. Era un tipo raro, escribía muy bien, ganó un concurso literario que organizamos en el llompa con una editorial similar a la de la revista Gente donde los personajes éramos los internos de esa cárcel de mierda. Luis era un militante de la desprolijidad, capaz de ir castigado a los buzones y comerse una paliza por no tener la celda arreglada tal como la exigían los botones. Buen pibe, cabeza dura, inteligente.

El Pájaro tambien es un cabeza dura, inteligente y charlatán, no para. Compartimos el exilio y una innumerable cantidad de amigos que conocimos en la militancia, en la orga, y volvimos los dos a esta gran ciudad con el peso de haber sobrevivido mientras la mayoría de nuestros seres queridos habían desaparecido. Volvimos a reencontrarnos en el diario Sur, una corta experiencia de prensa de izquierda, donde tuve el gusto de tenerlo como jefe en la sección Policiales.

Ahí descubrí al escritor, periodista y fundamentalmente investigador. Salinas es un laburante de la vieja escuela, la de Rodolfo Wlash, que seguían la pista hasta donde fuera, sin importarle las consecuencias.

El domingo pasado vino a la radio, lo habíamos invitado con la idea de que nos hablara sobre Irán, porque es especialista en temas internacionales, pero nunca pudimos llegar al estrecho de Ormuz. En realidad, hablamos de Lanata, de Solanas, los Montoneros, Página 12, del periodista Homero Alsina Thevenet, de su hermano Luis, de El Porteño, de Cristina, la minería, Nancy Pazos, del facho Paqui Forese, de la probable estatización de YPF y qué se yo de cuantos temas más. Cuando te encontrás con este personaje pasa eso, vas de tema en tema y el tipo siempre tiene una info especial que no puede decirte, aunque te dice que alguna vez va a escribir sobre eso, pero al final, termina contándote todo y aún más.

¿Lanata es el Neustadt del siglo xxi?

De la larga charla me quedo con una frase: "yo me muevo por los bativillanos", un comentario que define su necesidad de investigar a los servicios de segunda categoría que sólo él recuerda y persigue. El programa pudo haber durado cinco horas y estoy seguro de que habría conservado la misma intensidad, porque Salinas no filtra lo que dice, no mide las consecuencias, dice lo que se le ocurre en el momento y lleva el hilo de la conversación como el mejor de los contadores de cuentos. Hoy este personaje labura en el Archivo General de la Memoria, como no podía ser de otra manera, y esperamos volver a tenerlo como invitado pronto, nos debe la historia de la tercera guerra mundial, que, según sus análisis, está por empezar.

¿Por qué Lanata termina trabajando para el Grupo Clarín?

La obsesión de Lanata con el Pagui Forese

Salinas opina sobre Solanas y sobre YPF

Lado A y Lado B de Spinetta

Sábado y domingo en FM La Tribu



D D2 D ______ ______
Si a tu corazón yo llego igual,
D D2 Bm B2 Bm
todo siempre se podrá elegir.
Bm B2 A/G G A/G
No me escribas la pared.
G Em7 A Bm B2
Sólo quiero estar entre tu piel.

D D2 D
Y si acaso no brillara el sol,
D2 Bm B2 Bm
y quedara yo atrapado aquí,
B2 A/G G A/G A/G G
no vería la razón
G Em7 A
de seguir viviendo sin tu amor.

F#
Y hoy que enloquecido vuelvo
Bm | Em7 A
buscando tu querer,
Em7
no queda más que el viento,
A/G A
no queda mas que el viento.

F#
Y si acaso no brillara el sol
y quedara yo atrapado aquí
no vería la razón
de seguir viviendo sin tu amor.


F#
Y hoy que enloquecido vuelvo
Bm
buscando tu querer,
Em7
no queda más que el viento,
A/G A
no queda mas que el viento.

D D2 D
Y si acaso no brillara el sol,
D2 Bm B2 Bm
y quedara yo atrapado aquí,
B2 A/G G A/G
no vería la razón
G Em7 A
de seguir viviendo sin tu amor.

Sábado a las 17:00 (hoy!) en Patologías Culturales.
Domingo a las 23:59 (mañana!) en La otra.-radio.
((con invitados!!)
FM La Tribu 88.7 Online

viernes, 10 de febrero de 2012

Gracias, Luis Alberto

por Lukas Karrizo

Al cumplir 15 años en medio de Malvinas y el final de los milicos, cuando se venía la democracia, "el novio de mi hermana" me hizo un regalón: Guitarra Negra del flaco Spinetta. Nunca estuve tan agradecido, al Flaco y a Enrique (el novio). ¿Qué habria sido de mi vida si no hubiese leído esas poesias en aquel momento?

El ángulo de la vida

El ángulo de la vida
es una semilla.
Las trabajosas hileras
que nos dieron años de respiración.

El secreto del árbol
consiste en proyectar la luz,
la luz de los rayos del cosmos
y las últimas fuerzas que resucitan desde el fuego del centro.

Y el atisbo del fin
es el desierto interminable
inmerso en la finitud
de la que nace el árbol.

Ahora me voy a escuchar La. La, La del Flaco y Fito.
Abrazo a todos los contemporáneos.

jueves, 9 de febrero de 2012

Umbral

por José Miccio

Todavía no había escuchado a Spinetta cuando el rock empezó a decirme con claridad que ya nada sería igual que antes de su llegada. Fue mi hermano David el que me dijo que tenía que escucharlo. No era un consejo (mi hermano nunca escuchó música) sino un modo de molestarme: yo era fan de Charly García desde hacía unas semanas y David buscaba hacerme cargo de una falta imperdonable.

El rock me quemó pronto y cambió mi percepción del tiempo. Entonces, unas semanas era una eternidad. Es obvio, se trataba de lo intenso. Poco después, Spinetta toco gratis en Mar del Plata como parte de la campaña presidencial de Eduardo Angeloz. Fui al recital con la condición de regresar temprano a casa, así que si Spinetta tocaba tarde me lo perdería. Vi a Virus ya sin Federico. Luego subió Spinetta. Yo estaba lejos del escenario, no alcanzaba a distinguir demasiado y, medio apichonado, miraba a la gente tanto o más que a los músicos, sobre todo a un tipo que bailaba en cueros a unos metros de mí. Del recital de Virus no recuerdo nada. Del de Spinetta una sola cosa: terminó con “Lulú toma el taxi”, una canción reiterativa que recién podría volver a escuchar mucho tiempo después, porque en aquellos años dependía de la edición en casete y Spinettalandia era inconseguible, al igual que los simples de Invisible, Alma de diamante, el misterioso álbum en inglés y los dobles de Almendra, el de Obras en su regreso y el fenomenal de 1970, despedazado en compilaciones y maltratado también en su primera edición en CD, que no respeta el orden de los temas ni incluye los que fueron editados como simples o “tuvieron la intención de serlo” (las comillas indican el grado superlativo de la barbarie).

Como primer contacto, el show aquel fue bastante pobre. Al menos para mí, que me sentía obligado a ser testigo de la voladura de mi cabeza. Antes de volver a casa, igualmente, pasé por la disquería de San Martín y Entre Ríos y compré con la plata que tenía ahorrada un casete llamado Crónica, que compilaba canciones de Spinetta Jade (excepto de Alma de diamante), de Kamikaze y Mondo di Cromo. Eran alrededor de veinte, y la primera del lado A era “Contra todos los males de este mundo”. Me gustó mucho la canción, me gustó mucho el riff. Y recuerdo haber pensado que el antídoto sobre el que Spinetta canta debía ser forzosamente el amor, aunque la letra no lo dice ni lo sugiere.

La canción que me pareció más hermosa pertenecía también a Los niños que escriben en el cielo, y es mi primera experiencia de extrañamiento spinettiano. Puedo recordar todavía, más de 20 años después, cómo de raro me pareció escuchar la palabra “moras”, la frase “ombligo de piedra marcado” y la última nota de piano, y cómo de raro me pareció leer el título de la canción, con el paréntesis que reitera la última palabra. “No te busques ya en el umbral (umbral)” es mi escena primaria. Podría exagerar la claridad del recuerdo y mencionar rasgos circunstanciales, que estaba en la cama de mis viejos, que eran más o menos las diez de la noche, que pensé qué bello era eso que escuchaba. Es todo cierto.

Pero lo que todavía me sorprende es la persistencia del efecto Spinetta, como si no hubiera nada en mi vida que no contara con una inflexión nacida de su música. No me refiero a la idea de banda sonora, a una canción por episodio… siento la inestabilidad del mundo y suena “Parvas”, me obligo a una idea generosa de la historia y suena “Cantata de puentes amarillos”, amo y suena “Que ves el cielo” (o me voy de viaje y suena “Rutas argentinas”). Me refiero a algo más pegajoso y más inasible, a una cuestión sentimental que no puedo comprender bien y necesita otra imagen además de la habitación adolescente y el abandono del hogar, que son para mí las imágenes fundamentales de los relatos de rock y que Spinetta ya había enrarecido en dos canciones memorables del primer disco de Almendra, la de Ana y la de Laura.

Hace poco supe que “Umbral” decía “Manzano en la nada”. En tiempos del casete conseguir una letra no era sencillo. Los sobres no solían traerlas. Como tantos, pasé horas haciendo transcripciones, retrocediendo y adelantando la cinta, modificando el volumen, consultando revistas. Las imágenes que escribía Spinetta y su manera de modular eran un reto especial. Todo con él era así. Ahora pienso que también la dificultad de transcribir sus letras expresa una característica de su obra, tal vez una de las más importantes. Las palabras son muchas cosas para Spinetta, entre ellas un modo de cantarlas; por eso pueden descomponerse con facilidad en sonidos y cadencias tan singulares, desde “Ti ti ti ti ti” a “Cielo en blanco enorme”. La idea de Poeta del rock es un elogio equivocado, porque una letra es algo especial, irreductible a la transcripción, y la voz no es un accidente. Spinetta era ante todo un cantante, no un poeta. Es su voz la que realiza las palabras, es ella la que convierte “moras” en parte de la música, y es la música la que (no) sigue la melodía en el sorprendente final de “Umbral”.

En esta y en tantas otras canciones Spinetta suena frágil y dulce, como seráfico, pero es el más rocoso de los músicos. No hay obra tan resistente, tan poco permeable en el rock argentino. No es que sea difícil. Es sabia. Desde el primer disco de Almendra hasta Pelusón of milk Spinetta levantó una cordillera imponente. Después cada uno sabrá. Cuando a la tarde me enteré que había muerto me hice el adulto superado, vi una película como cualquier día y atendí a mi hermano Alejandro que me llamó para comentar alguna cosa sobre el Flaco pero sobre todo para probar el canal, para hacer contacto. Seguramente por pensar en esto me di cuenta hace un rato que no quería estar solo. Spinetta me dio una enorme cantidad de canciones extraordinarias y un gozo que existe solo en el arte. Quería compartir la pasión y agradecer.

miércoles, 8 de febrero de 2012

Darle gracias

No hay dos seres en la tierra capaces de hacer Barro tal vez, Para ir, Credulidad o Basta de pensar. No hay en esos temas el menor despliegue virtuoso, pero esa música suena como algo inaudito, inexplicable, anómalo, desconcertante. No es blues, no es tango, no es folklore, no es beatle, es alguien que se nutrió de todo eso y entregó un producto azaroso, contingente e irrepetible. Hubo algún alineamiento astral, alguna conjunción neuronal imprevista, un accidente de la naturaleza y entonces salió Spinetta. Es improbable que el universo repita algo así. Y tenemos la dicha de encontrarnos en su época y en su ciudad.

Jorge Lanata y los defectos de los argentinos

Una nota de Homero Alsina Thevenet


Nota del editor: Homero Alsina Thevenet (HAT) fue un periodista uruguayo de un estilo muy distinto al de Jorge Lanata. Generaciones distintas, formaciones distintas, diferentes éticas. El domingo pasado en nuestra charla con el Pájaro Salinas hablábamos de los periodistas que ha conocido a lo largo de su trayectoria, hablamos de Lanata y se me ocurrió preguntarle si había conocido a HAT. "¡Un crack!" me dijo inmediatamente el Pájaro. Nos contó anécdotas de la redacción de la revista El Porteño donde esas dos éticas periodísticas (la de HAT y la de Lanata) quedaban en evidencia. En cuestión de horas voy a subir el audio del programa íntegro y ahí podrán escuchar las divertidas anécdotas del Pájaro. En un momento del programa Salinas nos dijo que HAT había escrito una nota sobre Lanata que él venía buscando desde hace tiempo pero le resultaba inhallable. Con ironía implacable el uruguayo comentaba los libros de Lanata sobre historia argentina. Entonces me acordé de los cuatro enormes tomos en los que Fernando Martín Peña, Elvio Gandolfo y Alvaro Buela compilaron miles de artículos de HAT nunca antes publicados en libros, Homero Alsina Thevenet. Obras Incompletas (Buenos Aires, 2010), editados por el Festival de Cine de Mar del Plata y el INCAA. Le dije al Pájaro que creía que ahí estaba la nota de HAT sobre Lanata. Fui a revisar el tomo III y efectivamente ahí estaba. A los que no conocen la escritura de HAT les puedo asegurar que el resto de las miles de notas son tan buenas como esta:

En su primera línea, Lanata se confiesa: "Hace años que este libro me escribe". Sufrió contra tiempos durante estos años. Dice que tuvo que escribir otros dos libros, que se llamaron Argentinos Uno y Argentinos Dos, para acercarse al tema. Después cambió el título DNI (o sea Documento Nacional de Identidad) por este ADN, que se ofrece como "mapa genético de los defectos argentinos", según el subtítulo. pero que aspira a mucho más. Quien haya tolerado sus 318 páginas deducirá que el sueño de Lanata ha sido crear la Gran Enciclopedia Argentina, abarcando historia y literatura, con algo de bueno y mucho de malo, con acopio de centenares de páginas ajenas y a menudo con ingenio: "¿En qué se diferencia un argentino de un terrorista? En que el terrorista tiene simpatizantes" (p. 161).

DEMASIADA PROSA. Pero hay que llegar a la página 120 para encontrar el primer defecto argentino de la lista, que es el narcisismo. Gracias al laborioso equipo de lectura, eso viene completo, con dos páginas sobre mitología griega y la debida figuración de Narciso, Liríope, Tiresias, Némesis, la ninfa Eco y la mención incidental de Freud, Adler y Jung, tres pensadores que se ocuparon de los complejos personales. Cien páginas previas a Narciso aparecen cubiertas por la erudición derramada sobre Lanata por su laborioso equipo de lectura, que primero explica la química del ADN y después plantea y discute los problemas de la identidad, lo cual se estira a ocho inútiles páginas sobre la evolución política, social y religiosa de los Estados Unidos (p. 51). Más cerca del tema, Lanata empieza por dudar que exista una identidad argentina, en la que se incluyan los pescadores de Península Valdés o las maestras de Formosa (p. 15), así como otras zonas, profesiones y vocaciones muy distintas. Del hecho el autor se propone preguntas que nadie sabría contestar, porque sólo con aproximaciones alguien podría definir una identidad inglesa, francesa, argentina, alemana o coreana. la gente es muy variada y las generalizaciones tienen siempre un enorme margen de error.

Lanata lo sabe, pero el plan enciclopédico y su laborioso equipo de lectura le permiten lucirse, viajando por el pensamiento universal. Juega de culto cuando dedica ocho excesivas páginas a una biografía de Manuel Dorrego (1787-1828) o cuando repite frases de pensadores argentinos como Joaquín V. González, Juan Bautista Alberdi, José Ingenieros, Carlos O. Bunge, Esteban Echeverría, Jorge Luis Borges, Eduardo Mallea, Julio Mafud, Raúl Scalabrini Ortiz, Arturo Jauretche, Leopoldo Lugones, Víctor Massuh o Tomás Eloy Martínez, entre otros compatriotas citados, más una Bibliografía final que abarca ocho páginas. También es muy extensa la lista de escritores extranjeros que convoca, lista que da a Lanata un exagerado prestigio de cultura internacional. Esa otra nómina comprende a Ernest Renán, Bertrand Russell, David Hume, José Ortega y Gasset, Voltaire, Miguel de Unamuno, Francisco Quevedo, Rudyard Kipling, Vicente Blasco Ibáñez, Primo Levi. No se trata desde luego de que esos pensadores hayan escrito sobre Argentina. Se trata de que sus ideas y frases puedan ser utilizadas como apoyo para las ideas y frases de Lanata. Así el llamado "entreguismo" del argentino al poder extanjero imperial aparece analizado con el ejemplo de Gunga Din, el aguatero de la India que quería ser inglés, según el relato de Rudyard Kipling, que George Stevens dirigió en cine en 1939. Aquí Lanata mete mano a la erudición rápida, señalando que el guión de esta película era de William Faulkner, dato mal leído en alguna biografía del escritor norteamericano. La verdad es que Faulkner tuvo en 1936 una mínima intervención, sin crédito oficial alguno, en una adaptación de Kipling que tres años después reescribieron Ben hetch, Charles MacArthur, Fred Guiol y Joel Sayre, quienes figuran como libretistas en los créditos de Gunga Din, donde Faulkner no está. El laborioso equipo de lectores para Lanata no llegó a tanta erudición cinematográfica, pero a él le pareció lustroso mencionar a Faulkner en la metáfora que él llama Complejo Gunga Din, donde quema como traidores apátridas a Julio Roca (h), Ezequiel Martínez Estrada, los Alsogaray, Martínez de Hoz, los Anchorena, Carlos Menem y otros "entreguistas filosóficos" como Sarmiento, Bunge, González Rivadavia y Pellegrini (p. 138).

ALGO ÚTIL. La erudición del laborioso equipo asesor, que ha leído y buscado mucho, ha servido a Lanata en algunas páginas. Señala que el mismo nombre Argentina deriva de argentum, que significa plata, pero el país nunca tuvo minas de plata y el Río de la Plata tiene el nombre equivocado. Más útil que esa paradoja es un capítulo que titula "Inventos Argentinos", donde procura desinflar algunas jactancias nacionales, especialmente las porteñas. El examen de tales presuntos inventos argentinos abarca la clasificación de huellas dactilares, el "colectivo", el bolígrafo o "birome", la calle más larga (Rivadavia) o más ancha (9 de julio), la yerba mate, la taba, el dulce de leche, las empanadas y la cédula de identidad. En cada caso hay antecedentes extranjeros y los argentinos no deberían jactarse de lo que inventaron otros. En cambio, parecen haber sido argentinos los inventos de ciertos útiles de tortura como la "picana eléctrica" y el "tacho", aplicados por el truculento comisario Polo Lugones, quien también persiguió a su padre Leopoldo Lugones y lo empujó al suicidio, según averiguación de Lanata o de su laborioso equipo asesor (p. 184). Esa erudición sirvió también para enumerar los 17 apellidos ilustres que integraron  las clases altas argentinas durante dos siglos. Los encuentra en un libro de Diana Hernando Ling que se titula Linajes y política (p. 39) y que está omitido en las ocho páginas finales de bibliografía utilizada. Para la Gran Enciclopedia Argentina que soñó el autor, los grandes nombres del "mapa del poder" tenían que estar.

A esa soñada enciclopedia le sobran citas entre comillas y le sobra prosa de Lanata. Es sólo una acumulación a la que faltan un orden, una coherencia, un índice, que la asemejen a la Británica y a otros modelos del género. En este libro que explica el narcisismo habría sido útil que Lanata aplicara una autocrítica más rigurosa. Con su vasta experiencia en diarios, revistas, televisión y hasta cine, el autor sabe que lectores y espectadores son convencidos más fácilmente por los datos concretos que por las generalizaciones. Pero no lo aplica. En página 273 enumera los motivos que habrían llevado al país a "un abismo" y menciona, con toda razón, la corrupción, el mal uso de los fondos oficiales y el descrédito de la justicia. Habría ganado convicción ilustrando la idea con nombres propios elegidos en los diez años del gobierno Menem. Allí están los jerarcas como Granillo Ocampo y Oscar camillón, que cada mes cobraban sobresueldos ilegales de treinta mil dólares, sin comprobante. Allí pudo mencionar a la procesada María Julia Alsogaray (que está presa). a Matilde Menéndez y a otros ex directivos de asistencia social del PAMI. En cuanto a la justicia, le sobrarían ejemplos con el caso Cabezas, la Embajada de Israel, la Amia, la inoperancia de jueces y fiscales frente a los sobornos del Senado y frente al crimen de García Belsunce. Esos son los derivados de los "defectos argentinos", que Lanata debía documentar, porque conoce muy bien esos materiales y ha escrito al respecto. Pero en este último plan de ADN ("hace años que este libro me escribe"), estaba empeñado en superar al periodista que ya fue y convertirse en el historiador y el ensayista. Ese nuevo Lanata olvida la útil concisión y se estira a las citas y a las 320 páginas, para dar cabida a los muchos cuadernos de apuntes que le brindó su laborioso equipo. Hay un toque de Narciso en ese error de plan.

Homero Alsina Thevenet, El País Cultural, Montevideo, 7 de enero de 2005