domingo, 4 de diciembre de 2016

Movimientos que Evitan a Cristina

El kirchnerismo, acosado como un hecho maldito cuya subsistencia altera todo el escenario


–Sectores del bloque político, económico y social que respalda a Macrì -le dice el Chino Navarro a Horacio Verbitsky- piden más ajuste, más despidos, menos déficit y en consecuencia menos inversión pública, que ellos llaman gasto. Si esto se agudiza y se produce una situación crítica de conflicto abierto, el gobierno tiene consenso para avanzar y van a perder los más humildes. Para nosotros la calle es fundamental. Esto alguien tiene que capitalizarlo electoralmente, con un programa claramente opositor.

–Pero vos mencionás a Massa…- acota Verbitsky.

–Esto sólo se reconstruye desde el peronismo -despeja Navarro-, Massa ha sido funcional a la política de Macrì de transferencia de recursos y no está dentro de la fuerza que puede ir a una PASO.

Algunos que sí están también han sido funcionales- recuerda Verbitsky (el senador Juan Manuel Abal Medina, mano derecha de Peceto, escucha).

–Tampoco podemos expulsarlos -ataja Navarro-. Pero no alcanza con el peronismo, hay que tomar lo mejor de los últimos doce años, hacernos cargo de los errores y de una agenda nueva que nos plantea este capitalismo salvaje. Como decía Cristina en el 2011 yo no pregunto de donde vienen sino a dónde van. [Cristina no sólo lo decía en 2011, lo dice a cada rato]. La unidad se suelda en la pelea, en la calle. Si se traslada al parlamento mejor, después determinaremos quien nos representa. Hablar de personas sesga el debate. 

(No obstante,  -recuerda el Perro- en el Movimiento Evita sí se habla de personas. Y con personas. En forma activa su dirigencia está tratando de convencer a Florencio Randazzo para que compita en esas primarias con Daniel Scioli, dando por supuesto que CFK apoyará al motonauta, lo cual se parece a una expresión de deseos. La mera hipótesis de que ella sea candidata los ensombrece. “Favorecería al gobierno”, dicen, aunque no queda claro por qué).

NOTA DEL EDITOR DEL BLOG: Las negritas son nuestras. Los que dicen que la candidatura de Cristina favorecería al gobierno son Navarro y Abalito. Se cuidan de decirlo en actos multitudinarios, pero bajan esa línea. Hay que ver por cuánto tiempo pueden sostener esos dos discursos dirigidos a distintas audiencias. Pero la estrategia se complementa bien con la del triunvirato sindical massista y los anhelos de Peceto, que quiere a Masa como jefe del peronismo. Echar a rodar a Randazzo no garantiza ganarle una interna a Cristina, ni ahí, pero facilita la dispersión del FPV/peronismo que favorece el triunfo de Massa o la opción macrista en octubre próximo. Hablando con militantes de base del Evita no aparece con todas las letras: muchos de ellos votarían a Cristina, (aunque a veces le reclaman "autocrí´a"). Algunos no visualizan con claridad las sinuosidades de sus jefes o no les agrada embarcarse en una aventura ideológicamente incierta. Se aferran a una idea de "unidad" que en sus jefes implica Cristina afuera. "El kirchnerismo, acosado como un hecho maldito cuya mera subsistencia altera todo el escenario" traduce Verbitsky a Navarro y Abal. Todos menos ella, la única líder política opositora al macrismo.

La Evitan.



2 comentarios:

tamino dijo...

Hay que prestar atencion a las definiciones de Francisco sobre los movimientos populares que niegan su anuencia a un pacto de no agresion con el gobierno a cambio de la Emergencia Social como reza el documento firmado. Ratifica el "hagan lio" y descalifica a estos dirigentes (esto lo digo yo) que forman parte del rosario de traidores no solo a Cristina sino a sus votantes.

Unknown dijo...

Las internas deberían poder resolver estas diferencias, para eso existen, nadie tiene la precisa. Por otro lado las PASO establecen la distribución de lugares en la lista definitiva de acuerdo a los votos que cada lista obtiene en la interna. Hoy es un paso necesario para ir definiendo los liderazgos de cara a las ejecutivas en base a lo que el pueblo elija.

Ahora esta a novela contra el Evita aburre. Es la re edición del culebrón que le armaron a Scioli y nos terminamos todos comiendo el garrón. Pareciera que no se bancan las diferencias y revientan a cualquiera que proponga algo distinto a lo que piense y diga Cristina.

Cuando al Evita le toco bajar su candidato en las elecciones anteriores y militar a Scioli lo hizo sin chistar y sin tirarle piedras a nadie. Lo mismo con los lugares que le dieron en las listas. Aceptaron todas las condiciones sin un pero.

Si les parece que con Cristina como ordenadora sola alcanza, adelante. Quizás estén en lo cierto. Pero no atenten contra los compañeros que están construyendo desde sus posibilidades otra alternativa desde una lectura política distinta, quizás la tengan que militar, quien sabe.