SPOILER ALERT: Me temo que las dos canciones que incluye este post no pasarían los filtros de la corrección política que viene imponiéndose en estos últimos tiempos, simétricamente opuesta a la tontería importada de San Valentín y portadora de la crítica radical (de raíz) al amor romántico que propicia la militancia deconstructora de los roles de género. Me explico, por si la oración anterior no fue clara (no lo fue): esta semana en las redes sociales proliferaron dos especies de mensajes intrínsecamente incompatibles: los que se prendían a la boludez consumista del Día de los Enamorados (como bien se sabe, el día de los enamorados son todos los días o ningún día) y los que criticaban esta fecha no desde la imposición del sistema consumista sino desde la peligrosidad de un amor que amenace la autonomía individual y, por su naturaleza excesiva, pueda desencadenar un crimen. Bueno. La otra se declara a favor de la igualdad de derechos de todos los géneros habidos y por haber y fervorosamente en contra de la violencia del acoso y de la opresión patriarcal. Pero La otra no entiende bien que para vaciar la bañadera haya que tirar al bebé. Es decir: amar es depender, necesitar del otre, desmayarse, atreverse, estar furiose, áspere, tierne, liberal, esquive, alentade, mortal, difunte, vive, leal, traidor, cobarde y animose, eso es amor, quien lo probó lo sabe.
Dado el clima poco propicio para este tipo de canciones, y dado que son lindas, nos vamos a apurar a pasarlas antes de que quede muy mal.
Se da el caso de que, cuando hace ya bastante tiempo que con Maxi Diomedi proyectamos un programa nocturno y estival llamado Antojo (que tuvo dos o tres temporadas en FM La Tribu), desde el principio estuvo en nuestros planes dedicarle un especial a una de las mejores y más desconocidas bandas de música popular de todos los tiempos: la Incredible String Band. Se dio el caso que el programa se fue postergando y finalmente Antojo no sale más. Pero hoy sale Antojo Incredible String Band por Radio Gráfica, lo que coincide con la vuelta de Maxi Diomedi a La otra, después de unas merecidas vacaciones.
Mis bolsillos vacíos, nena
cantan el blues para vos
mis bolsillos vacíos, nena
sabés que amo la verdad.
Hasta mi vieja pava
silba el blues para vos
otra vez
todavía estoy esperando
otra vez
por vos.
Mis noches son solitarias, nena
te necesito todo el tiempo
soy un chico solitario
necesito tus labios en los míos.
Hasta mi vieja pava
silba el blues para vos
otra vez
todavía estoy esperando
voy a volver otra vez
con vos.
Por si esto fuera poco, Maxi hoy va a ver a Me darás mil hijos, una banda que vuelve a los escenarios precisamente esta noche. Y al término del recital, Maxi va a contarnos cómo estuvo y, básicamente, cuál es la historia de esta banda también a la vez célebre y un poco secreta.
Suena la alarma del reloj,
tempranito a trabajar me voy andando.
Voy canturreando una canción,
una que habla de seguir, seguir remando.
Siempre, con lluvia o con sol,
haga frío o calor, mientras hago estas cuadras canto:
Voy tempranito a trabajar
para que mis hijos tengan lo mejor.
Quedan recuerdos del temblor
de palabras que nacieron en tus labios.
Oigo promesas de tu voz, compromisos de tu amor.
Hay risa, hay llanto.
Siempre busqué lo mejor, para mi, para vos.
Mientras lloro tu ausencia bailo.
Voy tempranito a trabajar
para que mis hijos tengan lo mejor.
A la vuelta siempre soñaré estar en tus brazos.
Buscar que tus ojos me reflejen lo que soy.
A la vuelta siempre sonarán nuestras canciones
Estaremos juntos hasta ver de nuevo el sol.
Porque voy tempranito a trabajar
para que mis hijos tengan lo mejor.
A la vuelta siempre soñaré estar en tus brazos.
Buscarme en tus ojos que reflejan como soy.
A la vuelta siempre sonarán nuestras canciones
Estaremos juntos hasta ver de nuevo el sol.
Porque voy tempranito a trabajar
para que mis hijos tengan lo mejor.
Hoy a las 12 de la noche en FM 89,3, Radio Gráfica, online acá o acá.