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sábado, 5 de diciembre de 2015

Lopérfido: hay gestos que lo dicen todo


Lopérfido integraba el grupo Sushi, la mesa chica del delarruísmo que llevó al país al abismo. Tuvo que huir a Europa porque no podía salir a la calle sin que intentaran lincharlo. Ahora ha sido nombrado ministro de cultura de la ciudad de Buenos Aires por el gobierno macrista. En 2001 los ahorristas enfurecidos gritaban en la calle "que se vayan todos" y "piquete y cacerola, la lucha es una sola".

Con Cambiemos, volvieron todos.


3 comentarios:

Luis Enrique Arias dijo...

Lo más triste del caso es que creo que a la ENORME mayoría que votó a Macri incluso si le mostrás esto, le importa poco, diría nada ... Aquello de que los dolores del pasado se olvidan cuando ya no los sentís ... "fue hace tanto" ... La memoria flaquea, y parece que no hay tónico que la revitalice ... mejor dicho, creo que el "tónico" nos lo van a hacer probar los que en breve nos gobernarán ... y ahí sí, ahí recordaremos, pero en algún punto será tarde ...

Diego dijo...

En el prontuario te olvidaste que se casó con una Mitre. Cada vez que veo la foto del casamiento me alegro porque me confirma lo feos que son nuestros oligarcas.

Carlos G. dijo...

Qué mal le pasan los años a este personaje...o será "el retrato de Darío Lopérfido"?
Y qué apellido tan honesto, no?