todos estamos igual

martes, 31 de octubre de 2017

"Hay una incompatibilidad esencial entre derecha y democracia" - Alejandro Kaufman sobre el nuevo totalitarismo

Una conversación con Alejandro Kaufman en La otra.-radio, que se puede escuchar clickeando acá



Fotografía: Sebastián Puenzo

- Quisimos volver a hablar con vos a propósito de tu texto "Antes y ahora, esto y aquello" -acotamos-, aparecido en la revista Contraeditorial, en el que cuestionás la caracterización que algunos hacen de este período como una derecha democrática y planteás el problema de cómo reconocer esta nueva forma del negacionismo.

- Es una ilusión esa de la derecha democrática, ¿no? - dice Kaufman-. Porque el siglo xx está lleno de crímenes que invierten la carga de la prueba. Cuando uno sostiene ciertas posturas políticas, tiene que dar cuenta de la inversión de la carga de la prueba. Y eso ocurre por derecha y por izquierda, porque ocurre también con el Partido Comunista Soviético, en Camboya con el Khmer Rouge, hay un genocidio por hambre en Ucrania en la época del stalinismo donde murieron 6 millones de personas. Entonces que nadie se ponga nervioso porque haya que invertir la carga de la prueba. Es un fenómeno generalizado. En el caso de la derecha está acentuado, porque en su propósito no está la igualdad, la emancipación, la libertad, aunque ellos usen esta palabra para referirse a otra cosa: entonces queda solamente la inversión de la carga de la prueba. Así que hay una incompatibilidad esencial entre derecha y democracia, una incompatibilidad que tiene mediaciones, zonas grises, no se tomen está incompatibilidad en una forma literal. Pero la relación entre capitalismo y democracia es problemática por la acumulación de capital. Viste que se pregunta qué tiene de malo ser rico. Y... ¡todo tiene de malo ser rico! Las formas de pensamiento vinculadas con cualquier ética en toda la historia de la humanidad han considerado que ser rico es algo malo. Malo como otras cosas con las que se convive y que pueden encontrar formas de habitabilidad, pero hay que  buscarlas, no es que tan fácilmente se convive con la acumulación de riquezas. La acumulación de riquezas siempre tiene que dar explicaciones, tiene invertida la carga de la prueba. Porque ¿cómo hago yo para ser rico en un mundo en el que hay necesidad, pobreza, injusticia, ignorándolo? Si no ignoro que hay desigualdad, no puedo ser rico.

- Una de las características de la derecha argentina es que no osa llamarse a sí misma "derecha", es difícil que se asuma como tal.

- Es un fenómeno de la Argentina. sí. Porque la Argentina ha tenido una tradición muy progresista, populista, igualitarista, y la derecha durante mucho tiempo ha estado descalificada, deslegitimada.

- Ha sido una derecha vergonzante, ¿no? -pregunto.

- Sí -dice Kaufman-, deshonrada por ella misma. Y entonces lo que estamos viviendo ahora es un intento de recuperar respetabilidad.

- A mí me sorprende -digo- la irrupción a la que estamos asistiendo del odio, el racismo, el clasismo de la las clases dominantes, el desprecio, la crueldad con que se mueven en el caso de Santiago Maldonado. Y pienso: en realidad esto ya estaba, porque la hipótesis de que aparece en los últimos años a esta altura yo ya no la puedo creer, pienso que es un sector de la sociedad que estuvo siempre, pero estaban recluidos porque las condiciones culturales no daban para que ellos lo digan a viva voz abiertamente, en los medios oficiales.

- El afloramiento de la expresión pública de ese tipo de enunciados comenzó en 2008 -dice Kaufman-. En 2006 y 2007 habían empezado con la cosa de la crispación. Entonces empezamos a ver algo que en nuestras generaciones no habíamos visto, porque había ocurrido en el 55. Cuando decían por ejemplo que Perón abusaba de las adolescentes de la UES -y hay gente que todavía lo repite- por decir la cosa más obviamente disparatada de todo, porque imaginate que si alguien abusa de personas, esas personas durante años estarían dando testimonios. No es como un bien que es enajenado, que se puede guardar o no, es algo que queda tan marcado en la subjetividad que no puede guardarse. Esas cosas, una vez que se pronuncian, quedan ahí. Pero nosotros no habíamos visto esto. Mucha gente más joven no lo sabe, cree que puede haber ocurrido en la dictadura y no es así. A nosotros nos contaban esto y no lo creíamos del todo. Los libros de historia o los mayores te cuentan cosas que no las terminás de creer, las tenés que comprobar vos mismo. 

- Incluso la dictadura, con todas las atrocidades que hizo, en el nivel del discurso tenía un cierto cuidado, un disimulo para no nombrar las cosas, como ahora sí las nombran de manera totalmente desatada. No solamente algunos funcionarios, sino también en las redes sociales, en los medios de comunicación masivos, y un sector de la población no menor se anima a decir estas cosas.



E.S. Fotografía

- Yo creo -dice Kaufman- que lo que los conduce a explicitarse así son dos situaciones: el primer peronismo y ahora el kirchnerismo. Esos dos momentos produjeron este tipo de odio, porque efectivamente realizaron procesos igualitarios. Hay una multitud que impone un proceso igualitario, de maneras pacíficas, democráticas, y eso les resulta completamente intolerable. Aparte de que, en un caso, terminó con un golpe de estado en el 55, con bombardeos, las masacres, etc., y ahora llegaron de un modo electoral, como si el solo voto les confiriera un carácter democrático, desconociendo que muchos totalitarismos empezaron con procesos electorales. Pero el odio tiene la misma estructura. Trataron unos años de aguantarse ese igualitarismo, pero es insoportable. Es insoportable que la doméstica haga turismo y se vaya a otro país. Encontrarse en el avión con la doméstica les resulta totalmente intolerable.

- Bueno -digo-, el tema del fútbol para todos, justamente este fin de semana es especial, porque hay que volver a pagar para ver los partidos por la tele. Y aparecieron fotos en twitter de gente que se juntaba en las vidrieras de los bares para espiar la pantalla con los partidos. Es una condensación de época, de los que quedan afuera.


- Sí, de la ñata contra el vidrio. Es ese odio que puede estar siempre como sentimiento de clase y aflora inconteniblemente en estos momentos. ¿Qué define a la derecha? La idea inherente de desigualdad. Hay personas que tienen un merecimiento y una virtud y otras que no lo tienen. Y las que no lo tienen, tienen que servir a aquellas o estar excluidas. Esa es la idea de derecha y no hay manera de matizarla, ni de atenuarla, ni de hacer nada con eso. 

- Y esa exclusión no tiene límites, porque en el extremo más bajo es la exclusión del derecho a la vida. Es lo que le pasa a Santiago Maldonado: porque sos hippie, porque sos artesano, porque estás con los mapuches, bueno... ¿de qué te quejás?

- Es la servidumbre, la esclavitud, que el otro me sirva, verte eximido de la necesidad del trabajo porque otro te sirve. 

Santiago Maldonado



- Nosotros estamos perdiendo derechos semana a semana y a veces no nos damos cuenta -pienso en voz alta-. Porque las balas pican cerca y le pegan a otro y pensamos que cayó uno con el que no tenemos nada que ver. 

- Cuanto antes dejemos de tener la idea de que había algo que estaba disponible, que poseíamos y que lo estamos perdiendo, mejor. Los derechos están muy bien cuando son un instrumento de lucha, o cuando son reconocidos políticamente, como pasaba hasta hace poco. Pero hay momentos como este, cuando empiezan a desconocerse políticamente, entonces lo único que queda es cuánto se los sostiene en la vida real, en la vida práctica, como pasa en la mayor parte de la historia. Hay que pensar esto: la dictadura lo que hizo fue castigar a un gran movimiento social igualitario, emancipatorio, con componentes revolucionarios. Lo castigó de la manera más atroz y eso dejó un trauma en la sociedad. Yo siempre les digo a los chicos más jóvenes -si tengo que sintetizar la diferencia que ahora ya empieza a ponerse en cuestión-, que una madre, un padre que tenían un hijo adolescente que militaba, ¿qué implicaba militar en la década del 70? Implicaba que te podían torturar o te podían matar. Cosas que pueden ser asimilables: tu mamá puede tener un hijo muerto, puede tener un hijo torturado o un hijo preso. Lo que no puede tener, lo que no es asimilable, lo que se hizo fue decirnos "esto no lo vas a poder soportar, te voy a hacer algo que no vas a poder soportar": es la desaparición. Entonces la desaparición se instala en la sociedad argentina como una figura, una condición que bajo la democracia se podría atenuar. Pero lo que está ocurriendo ahora viene de una manera muy compleja, porque viene como inocentemente. El caso Maldonado, que no sabemos cómo va a terminar, indica por un lado a quienes han tenido afinidad con la dictadura, que piensan que de un modo u otro la desaparición es justificable porque hubo violencia política. Esto se dice de un modo aparentemente inocente, el otro día veía a un intelectual diciendo esto: que la democracia erradicó la violencia política. Esto no es así: la violencia política no depende de si hay o no hay democracia y la democracia no consiste en que no haya violencia política, sino en cómo se trata la violencia política. Eso son los derechos humanos, no son que algo no pase, sino cómo se lo trata: si lo tratás de una manera atroz o si lo tratás de una manera humanamente y jurídicamente concebible.



- Se trata de equiparar la desaparición de Santiago Maldonado con el asesinato de Mariano Ferreyra o la desaparición de Julio López, como si fueran equivalentes: "bueno, el kirchnerismo tiene dos, nosotros tenemos uno, Duhalde tuvo dos, etc.". Y ahí hay algo que se nos escapa.

- Sí, yo creo que estas circunstancias nos han colocado en un lugar muy difícil de definir, porque evidentemente no hubo el propósito de que desapareciera Santiago Maldonado. Lo de Mariano Ferreyra fue un asesinato, un tipo de asesinato patoteril que no es tampoco "vamos a matar a alguien", sino que se desarrolla en una situación que implica correr ese riesgo y permitir de algún modo que suceda. Tiene toda la responsabilidad de un homicidio y en eso no hay ningún atenuante. Y hubo una decisión política del gobierno de no tolerar que eso hubiera sucedido. Pero es diferente a un atentado, por ejemplo, donde se busca a alguien particular y se atenta contra su vida. En el caso de Julio López sí hubo un atentado específico contra una persona, de hacerla desaparecer porque era un testigo, eso está en cualquier novela policial básica: que desaparezca el testigo. En el caso de Maldonado está ocurriendo algo diferente, porque lo primero es que no hubo un propósito de que esto le pasara a un muchacho de clase media bonaerense, rubio, encima con características de santidad, en una especie de situación crística. Yo, si fuera católico, estaría pensando en beatificarlo. Un muchacho que de un modo totalmente desinteresado va a apoyar una lucha de un pueblo ancestral desde la pobreza, humilde, con una mirada pura, una belleza física, tiene todo para ser santo. Si hubiese sido un mapuche, como ellos mismos lo dicen, esto no les hubiera ocurrido. Aquí está la matriz desaparecedora del estado argentino, porque quien cometió los crímenes de lesa humanidad es el estado argentino, no alcanza con ningún perdón que pida un presidente, sino con décadas y generaciones para que eso se limpie, para que se pueda redimir de ese crimen. Lo que está haciendo el caso Maldonado es reponer esa precariedad del estado con respecto a los crímenes de lesa humanidad. Y empezó como una especie de accidente, de algo que no les salió bien, como dicen con ese lenguaje brutal, que se les fue la mano. Pero lo que es completamente desalentador y desolador es la consecuencia que decidieron tener con respecto a esto. Porque en algún momento puede haber habido una inadvertencia, como dice Beatriz Sarlo, porque ella ve todo siempre desde el punto de vista pedagógico: "no leyeron el libro, no aprobaron el examen de los derechos humanos" y entonces eso no lo saben hacer. Pero ya van a hacer tres meses, recibieron la información de lo que estaba ocurriendo. Por esta afinidad con la dictadura, ellos forman parte de este sector de la sociedad, que será un 15% o un 20%, a los que les parece natural que eso ocurriera. Si vos defendés de manera incondicional el derecho a la propiedad, no te parece tan mal que desaparezcan unos miles de personas, porque, bueno, "es necesario, la historia, ha ocurrido siempre", etc. Lo que pasa es que vivimos una época en la que esto no es compatible con las formas contemporáneas de convivencia. No es compatible con la sociedad de consumo. ¡Porque yo no puedo abrir una botella de agua comprada en el supermercado si desaparece gente! Eso es lo que no se está entendiendo. Pero el capitalismo tiene una doble cara. Por un lado, el capitalismo necesita que vos puedas abrir una botella de agua con confianza, porque la confianza es un término muy precario que articula la vida contemporánea. Pero el capitalismo es otra cosa también: el capital puede prosperar aunque eso no funcione. El capital carece de toda ética y se basa totalmente en la acumulación, la lucha a muerte por la posesión, y puede prosperar en situaciones de catástrofe, de guerra, de naufragio, en cualquier situación. El capitalismo contiene esa contradicción, eso es lo que nos suele confundir en los contextos democráticos, porque nos terminamos creyendo que hay una derecha democrática (se ríe). Puede haber un capitalismo democrático, pero es contingente. Lo es en tanto les sirva la institucionalidad democrática para su acumulación. Los capitalistas no se arruinan con las guerras, las catástrofes, los desastres, sino que se enriquecen, es cuando más se enriquecen. Entonces la desaparición tiene una relación débil o ausente con estos sectores dominantes. No es el tema pedagógico de los derechos humanos, que no leyeron un libro. Lo desatienden porque no les importa. Ahora, hay un momento en el que ya no lo pueden seguir desatendiendo, porque hay evidencia de que es un problema político de primera magnitud.



Y ahora no sabemos todavía qué va a pasar con Santiago Maldonado. Lo preocupante es que a los que conducen esto se les metió en la cabeza, a través de Durán Barba, que "si nosotros usamos esta máquina de persuasión, de segmentación, que ya usamos con eficacia para las elecciones, entonces vamos a poder pasar la cresta de esta ola". ¿Qué puede decir uno sobre eso? ¿Que no va a ocurrir? No lo sé. Yo espero que no. Porque además el costo que tendría para Argentina que les salga bien, desde el punto de vista de los derechos humanos, de la democracia, de la convivencia, sería enorme, sería una tremenda deuda ética que la Argentina volvería a contraer, aparte de la deuda externa que hay, que podría también llevar años superar. Es mucho mayor el costo que para ellos va a tener también, porque después, en algún momento, cae la ficha, vos no podés sostener una cosa como esta indefinidamente, sin que produzca consecuencias, traumas, malestar, incredulidad, que van a ocurrir, no sé cuándo ni cómo. Es muy preocupante que hayan seguido este camino.

***

Esto es menos de la mitad de lo que hablamos con Kaufman. En una conversación con el tono torrencial de su habla, pasamos por otros lugares del presente y de la historia argentina: la fragilidad del peronismo, Cristina, las comparaciones entre la década del 70 y la actualidad, el nuevo totalitarismo, el ser consumista, las economías populares, el trauma de Cromañón, la mentira de la alternancia democrática, Durán Barba, la Big Data y las posiciones de izquierda, liberales y socialdemócratas, que no saben cómo pararse ante este nuevo totalitarismo que asoma y aún no sabemos hasta dónde puede llegar. Vale la pena escuchar la charla entera, clickeando acá.

La música que escuchamos: Charly, Mercedes Sosa, Milton Nascimento, Leonard Cohen, Tom Waits, Tunng y Gonzalo Aloras.

lunes, 30 de octubre de 2017

El día que murió Néstor


por Willy Villalobos

El día que murió Néstor me enteré por Victor Hugo a través de la radio que tenía debajo de la almohada, estaba en la casa de mi vieja.

Fue como un palazo que me dejó mas estúpido de lo que me levanto habitualmente.

Voy despertando y con la radio en la mano salgo del cuarto y en el baño me doy cuenta de que tengo que ir a la Plaza. Cuando llego a la cocina, mi vieja y mis tías, a pesar de no ser kirchneristas ni ahí, estaban conmovidas, la muerte conmueve. Les pregunto a "las chicas", así las llamábamos, si necesitan algo y en eso toca el timbre la del censo que estaba como yo, no acreeditaba, preguntaba si era cierto, era una compañera.

Mi vieja me da la lista para la feria, bajo rápidamente, agarro la bici y cruzo el parque pedaleando al mango, porque me voy dando cuenta de que la noticia es muy grave y quiero estar con los compañeros. Compro y compro hasta que llego a la cola de la huevería, donde se produce el siguiente diálogo entre la señora que estaba delante mío y la que despachaba:

- Menos mal que se fué este tipo ya no lo aguantábamos más- dijo la vecina.

- Le voy a pedir que sepa respetar, porque gracias a este hombre nosotros tenemos casa y podemos mandar al pibe a la facultad- contestó la morocha, mientras envolvía los huevos.

Me atendió, le di un beso y volví a los pedos llorando y riendo al mismo tiempo como buen kirchnerista.

domingo, 29 de octubre de 2017

Tramas de la derrota popular: Stornelli fue ministro de seguridad de Scioli

Stornelli, amigo de macri, Angelici, Darío Richarte y Rafa Di Zeo, fiscal de la República


Agosto de 2007: La primera definición decisiva de Daniel Scioli en la provincia para la que fue electo gobernador fue designar a su ministro de Seguridad. El cargo lo ocupó Carlos Stornelli, entonces fiscal federal, quien al asumir pidió licencia en su fiscalía. Scioli elogió la figura de Stornelli: “Me gusta contar con una persona como él, con sus valores y su coraje”. Stornelli desactivó las reformas que el anterior ministro de seguridad provincial, León Arslanián, había dispuesto en la bonaerense durante el gobierno de Felipe Solá. Stornelli le devolvió autonomía operativa a la maldita y, en lugar de desempeñarse como el jefe que bajaba la línea del poder político, fue considerado por la fuerza como "un policía más". Representó a la bonaerense ante el gobierno sciolista.

En 2009, Luis Arias, juez en lo contencioso administrativo de La Plata, acusó a policías bonaerenses de reclutar menores para delinquir. Stornelli respondió furioso: "Hay un juez que por estos días está teniendo proyección mediática, nos había ordenado por sentencia no subir a los menores a los patrulleros, denuncia pactos de la policía con el crimen".

Ese mismo año Arslanián criticó la complacencia de Stornelli con la bonaerense: "Nosotros creemos que la Policía no se puede autogobernar. Creemos que hay que gobernarla desde la conducción política. Hay una lista muy larga de desaciertos, de contrarreformas y de falta de control del funcionamiento policial" [acá].

Stornelli contraatacó: "Hace muchos años desembarcó una generación de pensadores abolicionistas que cree que se puede tener seguridad sin policías, sin cárceles y sin jueces. La policía de la provincia de Buenos Aires fue denostada, humillada, desmantelada [por Arslanián]. El gobernador Scioli y yo nos encontramos con una policía prácticamente desmantelada".

"Los dichos de este hombre -respondió Arslanián- son tan desdichados como su gestión. Yo me mantuve en silencio todo este tiempo, pero no puedo dejar pasar semejante agresión injustificada, que creo que responde a que a esta gente la cosa se le fue de las manos y tiene el agua al cuello, están desesperados y, lejos de hacerse cargo, salen a buscar culpables. Si este señor Stornelli hubiera usado la energía psíquica que aplicó en romper y desandar la reforma policial en seguir adelante, no estaría hoy ante esta situación que implica haber sucumbido a su propia torpeza y pasividad" [acá].

Stornelli siempre tuvo buena relación con macri y es amigo íntimo de Daniel Angelici, con el que compartió varios viajes al exterior. En 2007, macri, entonces presidente de Boca, creó una comisión de seguridad integrada por Stornelli, el juez Ariel Lijo, los fiscales Raúl Plée y Gerardo Pollicita (todos funcionarios judiciales que hoy encabezan una brutal ofensiva contra dirigentes kirchneristas). Esta comisión era comandada por el ¿ex? Side Darío Richarte, expulsado hace pocos meses de la UBA al trascender su condición de service. Durante su función como ministro de Scioli, Stornelli nombró como asesora a Soledad Spinetto, la esposa de Rafael Di Zeo, barrabrava de Boca, que entonces estaba preso en Ezeiza. Stornelli admitió que el violento barrabrava de Boca era su amigo. 



Cuando Stornelli terminó su rol de ministro de Scioli, vuelve a Boca. En este documental de la televisión española de 2015, Rafa Di Zeo recibe un llamado de Stornelli. Di Zeo tenía supuestamente prohibida la entrada a la cancha pero Stornelli seguía manteniendo una fluida comunicación con el barra.

¿Por qué Scioli mantuvo por tanto tiempo en su cargo a Stornelli?

En 2009 el ministro recibió graves cuestionamientos por la ineficiencia policial mostrada para encontrar los restos de la familia Pomar. Un artículo publicado en La Política Online, titulado Las razones ocultas de la supervivencia de Stornelli en el gabinete de Scioli decía que el entonces gobernador "le expresa [a Stornelli] un respeto que roza el temor. Lo que más lo inquieta es la represalia que el ministro podría tomar ante una salida poco elegante, si a su partida le sigue el final de su licencia como fiscal federal, un fuero donde recaen la mayoría de las causas que investigan a los políticos. La frialdad de Stornelli para condenar a sus ex padrinos políticos tiene un antecedente de peso: fue él quien en 2001 llevó adelante la investigación que tomó el juez Jorge Urso para condenar a prisión a Carlos Menem. Difícil garantizar que no actúe igual con un dirigente que lo haya maltratado".

Finalmente, los malos resultados de la gestión como ministro de seguridad bonaerense  hicieron que Scioli decidiera desplazarlo, excusándose en la unificación de los ministerios de Seguridad y Justicia, que quedaron bajo el mando de Ricardo Casal (proviniente del sistema penitenciario bonaerense, quien merecería otro capítulo de estas tramas de la derrota popular).

Stornelli, desplazado por Scioli, volvió a su fiscalía. Y al año siguiente a Boca. Desde entonces empezó a operar en planes desestabilizadores contra el gobierno de Cristina. En enero de 2015, después de la muerte de Nisman, se presentó "espontáneamente" ante la fiscal Viviana Fein. Lo que entonces aportó a la causa: "Mi percepción es que [Nisman] estaba asustado". Nada más. Pero fuera de la causa, encabezó la marcha de los fiscales del 18 de febrero de 2015, que adjudicaba al gobierno kirchnerista el presunto asesinato de Nisman.

En julio de este año, en el marco de la causa de la minera Río Turbio, Stornelli pidió el desafuero y la detención de Julio De Vido, objetando los convenios que el ex ministro firmó con la UTN. Hasta el día de su detención, De Vido nunca había sido indagado por estas acusaciones. Este video que incluyo a continuación explica en qué consiste el proyecto de Río Turbio, por qué la acusación de Stornelli es arbitraria y cómo distorsionan los medios la información sobre el proyecto. 


No existe hasta ahora en la causa una pericia que demuestre que los convenios con la UTN hayan sido por valores superiores a los que cobra una consultora privada ni que haya habido sobreprecios en la compra de bienes. Cuando asumió el gobierno macrista, el nuevo interventor de Río Turbio pidió al ministerio de hacienda los fondos para continuar con los acuerdos, avalándolos de hecho. Durante todos los años que estuvo en marcha los presupuestos del proyecto eran aprobados por el Congreso Nacional, muchos de cuyos integrantes votaron esta semana el desafuero de De Vido. Si el proyecto merece ser investigado, debería haberse respetado el derecho a defensa hoy vulnerado. 

Cohetes a la luna

De Vido respondió a todos los requerimientos del poder judicial y nunca intentó fugarse. Sin embargo, Stornelli fundamentó su pedido de desafuero y detención con la excusa de que De Vido "está en condiciones de entorpecer las investigaciones en su contra, ya que conserva relaciones e influencias para obstaculizar las medidas de pesquisa". Una vez detenido, Stornelli sugirió a la defensa del ex-ministro que se acoja a la figura del arrepentido. Es decir: Stornelli apunta más arriba: la detención intempestiva quiere inducir al preso a declarar contra Cristina, como vociferan los propios operadores mediáticos oficialistas.

El desafuero aprobado por la Cámara de Diputados y la prisión preventiva sin motivos que la justifiquen funcionan como un arma para despojar de sus cargos a legisladores opositores elegidos por el pueblo, al que de esta forma también se priva de su representación democrática. Y es también una sombría advertencia para otros legisladores de la oposición, librados al arbitrio de mayorías circunstanciales que consientan avasallar el derecho de las minorías. La cuestión de fondo no es la inocencia o culpabilidad de De Vido sino el respeto a la presunción de inocencia. Esta ruptura del orden jurídico fue avalada incluso por diputados de la izquierda trosquista que algún día podrían sufrir en carne propia idéntica persecución por otros motivos, si el régimen forma las mayorías requeridas. 

Los medios oficiales, que actúan coordinadamente con jueces y fiscales, ya anuncian más desafueros de diputados opositores. El establishment económico, político, mediático y judicial se encarga gradualmente de "mandar en un cohete a la luna" (como deseó macri hace poco) a los argentinos que osen obstruir los cambios drásticos que el actual régimen pretende imponer sobre la estructura socioeconómica del país. Elestado de derecho se extingue a un ritmo cotidiano y sostenido, hasta naturalizarse la anomalía. El respeto a las instituciones declamado por la derecha y sus medios cuando eran opositores al kirchnerismo fue solo una burda excusa para desestabilizar al gobierno anterior. En el poder, esta misma derecha no se detiene ante ningún freno institucional.

Una pregunta me sigue dando vueltas: ¿por qué Stornelli fue sostenido durante tanto tiempo por Scioli al frente de la Bonaerense?

sábado, 28 de octubre de 2017

66 años


por José Miccio

En 1982, con “Inconsciente colectivo”, Charly García llama la atención sobre algo que ya había escrito al menos dos veces, en “El tuerto y los ciegos” (“No hablo yo / de fantasmas ni de Dios, / sólo te cuento las cosas que / se te suelen perder”) y en “Para quién canto yo entonces” (“Yo canto para la gente / porque también soy uno de ellos. / Ellos escriben las cosas / y yo les pongo melodía y verso”). Sus frases más conmovedoras en aquel umbral histórico eran, por supuesto, las que hablan de los ausentes, los presos y la necesidad de cantar de nuevo. De éxito menos coyuntural resultó su pequeña y romántica ars poetica: “Hoy desperté cantando esta canción, / que ya fue escrita hace tiempo atrás”.

En la revelación (en el despertar) el tiempo encuentra un pliegue y una continuidad. La canción que se escribe se reescribe y se lega. Preexiste al autor pero solo él puede comunicarla. La trae a la vigilia desde la voz que se oye de vez en cuando en “los aleros de la mente / con las chicharras”.

Charly canta esta, su hermosísima imagen de aires místicos, en secuencia descendente, como si cavara en busca de ese grial al que solo tienen acceso los elegidos. Algunos, a falta de una palabra menos incómoda, hablan de su genio. En los 80 Charly obtiene un título, el único al que un rocker puede acceder sin perder su condición. No es un poeta áulico ni un bufón de corte. Es un vate. Alrededor de su nombre se multiplican las metáforas. Es el radar, el termómetro, la brújula. Charly codifica sensaciones dispersas, lee signos poco claros, compone, pero ante todo traduce. Es un médium. Su aura procede del pueblo. Lo retiene junto a él y lo distingue. De ahí que combine las gracias del romántico social y los caprichos del poeta maldito. De su absoluta singularidad el escándalo es su manifestación más epidérmica. Que grite, que demuela hoteles. En lo profundo Charly remienda los desgarrones, rellena los vacíos, asegura la comunidad, canta la unión de lo disperso. Su hiperestesia no le fue otorgada solo para autoindagarse sino también (y sobre todo) para darle a conocer al pueblo lo que al pueblo pertenece pero ignora o solo intuye. Es, en todo sentido, el Intérprete. Por eso sus canciones son simultáneamente una autobiografía y una historia de la sensibilidad juvenil en Argentina. Charly - ¿cuántas veces lo dijimos desde entonces? - escribe "nuestras" canciones. Esta, por ejemplo:


viernes, 27 de octubre de 2017

Vení como estés


Vení como estés
como seas,
como yo quiero que seas
como un amigo
como un amigo,
como un viejo enemigo
tomate tu tiempo
apurate,
vos decidís
no llegues tarde
tomate un respiro
como un amigo
como una vieja memoria
memoría
memoría
memoría.

Vení embarrado,
desinfectado
blanqueado
como yo quiero que seas
como un trend
como un friend,
como una memoria conocida
memoría
memoría
memoríia.

Y te juro que no tengo una pistola
no, no tengo una pistola.
te juro que no la tengo.

jueves, 26 de octubre de 2017

Ella cree que nos mata, yo creo que se suicida



En la sesión de ayer la cámara de diputados votó el desafuero de Julio De Vido y se allanó a una operación de Martín Irurzun, Claudio Bonadío, Ricardo Lorenzetti y otros funcionarios facciosos de Comodoro Py. No se trata de la inocencia de Julio De Vido, asunto que debiera dirimirse en un sistema judicial del que el país hoy carece.

Que los diputados se plegaran a esta operación empuja a nuestra sociedad un paso más rumbo al estado de excepción, con el principal partido de oposición en proceso de ser proscripto.

Entre quienes se sumaron a esta defección están los diputados trosquistas, quienes en algún momento, si se volvieran peligrosos para el régimen, serían los próximos proscriptos.

Myriam Bregman ha sido una destacada militante trosquista y abogada luchadora por los derechos humanos, por lo que se ganó un merecido prestigio.

Ayer Bregman no participó de la votación, puesto que no forma parte de la cámara de diputados. Pero salió a defender la vulneracción de la presunción de inocencia por la cual se le quitaron los fueros y se detuvo inmediatamente a De Vido.

Los criminales de lesa humanidad gozaron de las garantías en juicio que ayer sus pares le negaron a De Vido.

Yo no esperaba nada bueno de los diputados radicales o justicialistas vendidos al macrismo. Pero sí guardaba mucho respeto por el apego a los derechos humanos de parte de Myriam Bregman especialmente. Los DDHH tienen vigencia para un pibe de la villa, para un genocida o un ex-ministro. Quien permite que se vulneren en un caso cualquiera, permite que se vulneren en cualquier otro. El mismo criterio vale para la prisión política que está sufriendo Milagro Sala en Jujuy. Los principios vulnerados son los mismos, aunque las personas y las acusaciones sean distintas. Los poderes judicial y legislativo nacionales procedieron de idéntica manera ayer a como lo vienen haciendo desde enero de 2016 los poderes judicial y ejecutivo de Jujuy. Así, la provincia norteña gobernada por los radicales ha sido el laboratorio en el que se probaron las violaciones a los derechos que ahora vemos extenderse al resto del país. Por eso caminamos hacia el estado de excepción, allí donde los analistas frívolos solo ven el ejercicio de un poder ejecutivo "fuerte", avalado por los votos. La democracia es bastante distinto a esto.

Si un diputado trosquista llegara a molestar al gobierno podría ser sometido al mismo trato que De Vido, el mismo que recibe Milagro Sala. Ese día pediríamos que se respete el derecho del trosquista perseguido. Pero mi respeto a Myriam Bregman está definitivamente perdido. Por cálculo político, el trosquismo necesita crecer gracias a la proscripción del kirchnerismo. Esa mezquindad practicó ayer Bregman. Al relativizar su defensa del estado de derecho, ella se alineó con el estado macrista de excepción: se colocó como el ala izquierda del régimen perseguidor. Ese estado de excepción alguna vez puede vulnerar a los compañeros de Bregman, si llegan a molestar al poder, algo hoy improbable, dada su completa funcionalidad con macri, Bonadío, Pichetto e Irurzún. Los trosquistas en los poderes legislativos pueden presentar los proyectos más audaces, pero en esa función son completamente declamativos. Hasta pueden volver a ser invitados a la totalidad de los medios oficiales, dada su funcionalidad, incluso sobreactuando sus berrinches. En el momento en que se transformen en un peligro real para el sistema, ellos mismos van a caer gracias a su defección actual y ahí saldremos a defender sus derechos.

Probablemente al trosquismo y a Bregman no les moleste ser colaboracionistas si eso beneficia su presencia en los medios y su aceptación en la escena política, como los revoltosos inocuos.

Ella cree que nos mata. Yo creo que se suicida.

¿De qué minoría se trata?



por Lidia Ferrari

Después de la decepción enorme por los resultados de la elección del 22 de octubre, decepción que expresa la distancia entre lo que uno espera que suceda y lo que efectivamente sucede; después de forzarme a entender que ahora éramos minoría, que somos minoría los que apostamos a la construcción de un mundo algo más solidario, un pensamiento se me hizo presente. Recordé que desde que se instaló la democracia en 1983 siempre voté por alternativas minoritarias. Así fue durante toda nuestra vida democrática para mí. La idea de que no había opciones a las que quisiera apoyar que tuvieran reales posibilidades de llegar al gobierno. Los votos se peleaban por la posibilidad de meter algún diputado en el congreso. Siempre con esa inevitabilidad de ser minoría. En 1995, cuántos de nosotros pronunciamos: si lo eligen de nuevo a Menem me voy del país. Y la mayoría lo eligió de nuevo. Y después el desastre… uno de los tantos que hemos transitado. 

Cuando Néstor ganó por el 22% no imaginábamos que podía suceder lo que vino después. Recordar ese 22% me llevó a pensar que, si se hubiera sabido quién era Néstor Kirchner y lo que iba a hacer, no lo hubieran permitido. Entonces, la primera vez que mi voto formó parte de una mayoría que llegaba al gobierno fue con los Kirchner. No puedo ahora olvidar esta procedencia. Se trata de una excepción. 

Ahora volvimos al llano, pero con un cambio espectacular. Esa minoría convencida de una política de izquierda (peronista o no) ya no es la que forma parte de una minoría mínima que siempre está allí, como testimonio y punto. Después del kirchnerismo, se construyó una alternativa mayoritaria, podemos decir cerca del 40% de la población, con muchos convencidos por una opción que se plantea un destino “en serio” de voluntad emancipatoria. Pasar de esa minoría mínima que se jugaba todo para que entrara algún diputado en el Congreso a esta alternativa de una voluntad popular que tiene un piso de casi el 40%, me hizo pensar que la década ganada no se perdió. Está allí, en nosotros, ya no para pelear por alguna banca en el Congreso sino para jugar en la serie mayor, la de llegar al gobierno o para ejercer una oposición que pueda poner algún freno a la barbarie neoliberal. Porque la experiencia ya la tuvimos y salió muy bien. Tres presidencias sin desfallecimiento, sin golpes (obviamente, con las adversidades que no te van a ahorrar quienes están enfrente). Si pensamos en el contexto histórico argentino, estos últimos doce años son una victoria extraordinaria. Y su legado, este casi 40% leal y coherente con un proyecto emancipador, me aleja del fantasma de convertirnos, nuevamente, en una minoría mínima.

Mientras estaba hilvanando estos pensamientos leo el texto de Jorge Alemán, que formula, de manera brillante, cómo situar estas elecciones y al kirchnerismo en el contexto de la política argentina, que empieza así:


(para La Tecl@ Eñe)

El orden neoliberal se caracteriza por disponer de un estado de excepción política donde se puede apropiar de una crisis económica y social, y revertirlas a su favor. Posee medios, dispositivos, aliados políticos, que permiten que lo que en cualquier otra situación se podría presentar como una gran erosión traumática de lo social culmine en una nueva integración del orden dominante. En términos gramscianos el neoliberalismo es experto en producir "revoluciones pasivas".

Por ello, los sucesivos ajustes en marcha o los problemas estructurales que en la economía argentina tarde o temprano se presentarán, no garantizan en absoluto la emergencia de un proyecto transformador. Para esto último, se trata siempre de la ardua tarea de la construcción de lo político. Sobre este punto es donde quisiera subrayar y detenerme en un punto clave, que la última coyuntura electoral permite visualizar.

Sin entrar en debates históricos (aunque supongo inevitables) el peronismo desde 1974 no supo ni quiso librarse de las distintas ambivalencias tacticistas y oportunistas que lo han transformado en una función bisagra para las elites dominantes del Poder. El peronismo, no en su sentido doctrinal ni en aquello que lo hacía el representante mayor de las luchas populares, fue capturado en su devenir histórico por esa típica metamorfosis neoliberal que lo pone a disposición del Poder. No entro aquí en el debate de si es posible definirse como peronista o no, porque en ese caso lo verdaderamente central es cuál es el antagonismo que se asume y por tanto a quienes se identifica como los verdaderos adversarios políticos... [Sigue acá]

miércoles, 25 de octubre de 2017

Jorge Macri destruye el Area Natural Yrigoyen


por Tomás Botet

Hay un lugar que llamamos humildemente el Yrigoyen porque “el ranchito” le quedaba muy chico. El Yrigoyen es el último pulmón verde de Vicente López. Once hectáreas. No sabemos si es el nombre final que le queremos dar a este lugar. Un lugar que descubrimos con amigos e hicimos algo inaudito. Algo fuera del condicionamiento habitual en que transcurre la vida cotidiana. Hicimos algo por placer, algo que se hace grande por compartirlo. Un espacio donde trabajar, no solo uno sino hombro a hombro con el otro. No dejó de crecer. Entiendo que esté, que ya estuvo, que ya estaba en peligro.

Nosotros estábamos dedicados a la organización del lugar, no solo a la organización física de los espacios, sino también al vínculo con distintas organizaciones. El compromiso tejió un red afectiva. Estábamos organizados en asambleas semanales, a veces de a dos por semana, porque el clima era árido y no podíamos dejar las cosas en suspenso. No pudimos, ni quisimos que quedara en suspenso cualquier posibilidad de riesgo de un lugar que queremos tanto.



Ese riesgo se expuso de manera clara cuando un policía se presentó en el lugar. Cuando lo filmaron, se ofendió, manifestó su enojo con soberbia armada y luego utilizó la palabra “desmontar”. Ese día estábamos en una asamblea, alrededor del fuego, como todos los viernes, viendo cómo construir la comunidad, con la comunidad.

Ellos utilizaron la palabra “desmontar” con un operativo enorme contra unos un grupo de 30 personas que se rehusaron a abandonar el espacio, a dejar de defenderlo. Sabemos lo que pasa. Cerca de ahí, en toda la costa del Vial Costero, tras varios años de activismo, desmontaron a un grupo que estaba al tanto de las consecuencias ambientales que genera desmontar tanto territorio, que no toleraban lo que se escondía tras la desidia, por hacer un paseo de la costa. Algunos de esos activistas hoy están entre nosotros.

La policía no opera bien, eso también es algo sabido. En el arroyo Raggio, también cerca, del otro borde del Vial Costero, mientras las máquinas se adentraban en la tala, fueron enfrentados por quienes defienden el lugar. Eran varios defendiendo y varios operando ilegalmente: los que defendían les pidieron papeles a los policías y no los tenían. Un policía expuso que estaban haciendo un "paseo de la costa". Sin consideración ambiental, bajo la jurisdicción de Jorge Macri. Lo que decimos no es menor. Una semana tantearon con tirar escombros ilegales en la entrada del Yrigoyen. Lo hicieron durante algunos días por la mañana, hasta que descubrimos sus horarios y varios nos organizamos para hablar con alguna autoridad. Hablamos con el capataz de la obra, le advertimos que estaban tirando escombros ilegales en un lugar público. Estaban rehaciendo las cañerías para los edificios altos que coparon los costados del río después que hicieran el Vial Costero. No pretendemos deducir que para eso fue hecho el Vial Costero, pero el territorio fue poblado, fomentando el turismo, “justificada” la acción. Tenían un proyecto de parquizar toda la costa, hasta Tigre. Eso lo impedimos.

17 de mayo: El municipio sigue haciendo obras sobre el Arroyo Yrigoyen sin consultar a l@s vecin@s, destruyendo con topadoras el espacio verde.

Después de eso, hubo días en que avanzaron igual con los escombros, ilegalmente. Tuvimos que encontrar la manera de hablar con los esquivos representes de la comunidad. Los que afirman que quieren una comunidad “verde”. Un hombre llegó a nosotros y no se presentó hasta la mitad de la asamblea. Ya estábamos al tanto de que venía de parte del gobierno. Que nos quería sacar información. En cambio se encontró con un grupo de vecinos organizados, una comida compartida y buenas discusiones.

Antes de que este proyecto estuviera de pie había gente viviendo en los alrededores, la policía justificó su entrada por eso. Fue una pregunta recurrente de ellos, su necesidad de no afirmar la buena disposición de los miembros de la comunidad activa en este proyecto.

Tenemos vínculo con el COA (Club de Observadores de Aves), otra agrupación que defiende el territorio. Ellos avistan aves, descubrieron 158 especies y una que está en extinción. Valoramos, a pesar de nuestras diferencias, el apoyo que ellos dan al lugar, el cariño con que lo ven.



No nos parece un dato menor la fauna. Insistimos con que no es un lugar que algunos llamaran “recreativo”. Defendemos el lugar, volvimos a insertar carteles que no solo sacó la policía. Lo limpiamos del pésimo estado en que se encontraba. Atestado de basura, sectores intencionalmente ensuciados para que no se visiten. De las personas que se quedaban a vivir no queda ninguna. Se fueron yendo a medida que el espacio se poblaba, también se fueron por acción de la policía. Hablamos bien con algunos, algunos solo venían a limpiar su ropa, por necesidad, pero ya no vienen, el espacio está habitado, están de acuerdo en que sea defendido.

Queremos mencionar todas las eventualidades que atravesó el lugar. Como el mes de los incendios. Hubo un mes en que hubo tres incendios bastante seguidos uno del otro. Uno de un lado del camino, por donde se entra al sector de fogón principal. El camino atajó la propagación del fuego. Después hubo un incendio justo del otro lado de ese camino. Ambos en la entrada, visibles. Puedo hablar de esto porque en el segundo incendio yo estaba ahí. Estábamos con algunos de los chicos en el fogón principal cuando uno advierte humo, algo sorprendido. Corrimos hacia el sector y descubrimos que se propagaba el fuego. Las chicas se quedaron ahí llamando a los bomberos, mientras buscábamos bidones de agua, recuerdo sudar entre las cortaderas incendiadas, tirando casi sin efecto bidones de agua en un fuego que tardó dos camiones de bomberos en apagarse. Cuando llegó la policía, yo estaba sentado en el camino sufriendo, conmovido por lo que pasaba, sintiendo compasión por lo que pasaba a la tierra. La policía vino y usó la frase habitual de esos momento: “¿Vos vivís acá?”. No le demandé sensibilidad pero tampoco me enrosqué en su inoperancia. Como hay una sola entrada posible, les preguntamos por la filmación de la cámara de seguridad. Tenían el horario exacto de quién pasó por ahí y no nos lo dieron, tampoco lo investigaron. Incendios primero de un lado, luego del otro, lo vivimos desde cerca y eso fortaleció nuestro lazo afectivo con el lugar. Hasta las personas que no lo conocían pudieron apreciar las hojas verdes surgiendo de las cortaderas sobre quemadas, aplacadas por la ola del incendio.


El municipio no deja pasar a l@svecin@s al área natural Yrigoyen. 
Policías sin identificación y que no nos dicen quién dio la orden.

Hoy día estamos vinculados con el Centro de Actividades Educativas Camino (CAEC), varios compañeros trabajan allí. Hay un proyecto de huerta concretado, una huerta hecha y activa. Por un camino de atrás llegás al CAEC, hay chicos con síndrome y podemos decir que el Yrigoyen les hace bien. Realmente les hace bien tener un espacio fuera del contexto que hasta las masas padecen. Hay otros proyectos en pie ahí, la vinculación es activa por los compañeros que trabajan allí, hay buena predisposición para actividades, visitas guiadas a colegios o grupos scouts.

Hicimos varios festivales. Les dijimos a los vecinos que había un lugar hermoso y que lo podían conocer. El primer festival fue exitoso. Radio abierta en la entrada, plantaciones de árboles nativos, estábamos entre el arte y el rito. Expusimos una huerta, las casas en los árboles, los territorios bien delimitados y dispuestos a ser transitados. Hubo paseos guiados, música, limpieza de la costa. Cavábamos grupalmente agujeros para los árboles, fue algo hermoso compartir eso, afectaciones sinceras en algo simple como plantar árboles. Nos potenciamos mucho. Fue propulsor del segundo festival que vino meses después. El primero cerró con murgas, vimos brillar los ojos de los chicos y también los de los adultos. Al final del primero cercaron la entrada con rejas.


Tras haber avanzado tanto, haber peleado tanto por la organización del Yrigoyen  teniendo el proyecto legal hecho, nos encontramos, tras una tarde tranquila, con la represión policial. Nos sacaron a la fuerza el 15/10/2017. No hubo resistencia física de nuestra parte. Tenemos videos que exponen toda la situación, estarán circulando en los medios que sean más efectivos para la defensa del lugar (ver la página Todxs por el Yrigoyen en facebook). La policía, como decíamos, entró y saco a la fuerza a varias personas, incluyendo la utilización de gas pimienta. Nos prohibieron momentariamente la entrada, porque no se puede impedir legalmente la entrada al Yrigoyen . Ahora convocamos a los vecinos para dar visibilidad a lo que está sucediendo en el lugar. Tenemos un proyecto legal y no solo peleamos por hacerlo reserva natural, ya es un lugar cuidado que demanda sus derechos en contra de consecuencias ambientales claras.

martes, 24 de octubre de 2017

Oh, sanidad


Lo único sano es ser insano
los psicóticos construyen un castillo
en el que los neuróticos habitan
no sé qué hacer con mi sanidad
cuando el mundo está al borde de la calamidad.

Oh sanidad, oh sanidad
¿qué voy a hacer con vos?
beber, diparar, lo que vos quieras
pero ella siempre está parada detrás de mí
como un diablo en el infierno.

Oh sanidad, oh sanidad
¿por qué no me dejás ir?
vamos
¡cortala!

lunes, 23 de octubre de 2017

Es triste, pero no estoy triste, prefiero enterarme pronto de las malas noticias

La otra.-radio de la noche del 22 al 23 de octubre de 2017, para escuchar clickeando acá


Ilustración: Carmen CuervoEs la noche de un día agitado y estuve trabajando como un perro: el sábado tuvimos nuestro seminario filosófico con Esther Díaz y el domingo fiscalicé en una escuela de Burzaco para Unidad Ciudadana, donde tuve la pequeña satisfacción de que nuestra lista arrasó. Por lo demás, las noticias políticas de hoy son pésimas: ganó la derecha dura con una campaña prometiendo ajuste y represión, dando rienda suelta desde el sistema de medios oficiales a las pasiones más degradadas de lo humano que fueron aprobadas por una parte muy importante del electorado. Previsiblemente el macrismo ganó sus elecciones de medio término, pero lo hizo en un contexto social horrible que nos dice que, además de que el gobierno se pone en línea con lo más reaccionario del mundo, muchos de los que nos tenemos que cruzar en las calles muestran que el progreso lineal de la humanidad no existe, que hay tanta vileza e impiedad como en el peor momento de la historia y que la propagación de estas pasiones bajas y la anulación de la capacidad de pensar son perfeccionados por el desarrollo tecnológico.

Nada que no supiéramos. Pero es desagradable acordarse del lado más feo de la época.

Es la ciudad en la que vivimos, es el país, es el mundo y es la era. Todo junto.

Pero igual, la constatación de todo eso no logra sumirme en un estado ni siquiera de tristeza. Será porque lo sabía y solo lo recordé, será que siento que me resulta más placentero conectarme con los matices luminosos del mundo, que no dejan de brillar ni en los peores momentos. Será que yo hace rato que asumí que todo está perdido, pero encuentro el motivo para vivir en empezar ya a trabajar y no permitirle a nadie que mi vida se envilezca. 

No lo permito 
y para eso necesito 
a muchos otros y 
sé que están ahí y 
hay que salir 
a encontrarlos.

La evaluación política de las elecciones la hicimos al toque con mi amigo y compañero Maxi Diomedi en La otra de anoche, en Radio Gráfica, atravesando una ciudad asechada por patrulleros que nos pararon un par de veces. De pronto, pocas horas después del triunfo electoral de la derecha horrible (moderna, democrática) avalada por la parte horrible de la sociedad, ya transitar por la ciudad se vuelve peligroso. Pero ni eso logra bajonearme. No tengo la fórmula, pero no me pasa: trabajé mucho durante este día y esta noche y todavía a esta hora de la madrugada estoy trabajando,  más tarde tengo que seguir, reconozco que tenemos que hacerlo mejor, pero no quiero saber nada con quejas, lamentos ni indignación. Hagámonos de abajo. Dejate de joder con el bajón, el mundo es malo, no lo empeores. 

Sobre los resultados de ayer no quiero extenderme porque ese primer análisis ya lo hicimos en la radio y lo pueden escuchar acá. Solo resumo que una lectura fina no habilita a la sensación de catástrofe con la que muchos se enganchan. Sí con la de una derrota. Pero el que no incorpora la derrota como una de las posibilidades más propias, quien no aprende a caminar al lado de ella, mejor que se dedique a aliarse con los cretinos, a oprimir, a alcahuetear, a descargarse con los débiles.

Pasando a algo más concreto, creo que la elección de Unidad Ciudadana distó de ser mala, que Cristina se revalidó como la máxima líder de la auténtica oposición, desbaratando todos los intentos peronismoides que quisieron sacarla de la cancha, que Rodríguez Saa y Verna dieron vuelta resultados adversos con garra, que Massa, Randazzo, Abal Medina y el Chino Navarro se merecen lo poco que valen, que el mito del panperonismo se cayó a pedazos, que las PASO con los peronistas de derecha, como en Santa Fe, demostraron no garantizar ninguna unidad, que el peronismo está en crisis... desde 1951. Que la unidad de la CGT a la que tanta importancia le asignan algunos valiosos compañeros solo sirvió hasta ahora para sumir a los trabajadores en la parálisis y que la CGT no es el movimiento obrero organizado, porque no defiende los intereses de los obreros ni está organizada. Y que con reivindicarse peronistas y nada más no alcanza, que hay que construir una nueva unidad política que rescate lo mejor de ese movimiento y convencerse de una vez por todas que con Urtubey, Schiaretti, Bordet, Perotti, Pérsico o los sindicalistas-empresarios (que anteponen su segunda condición a la primera) no hay unidad que no lleve al desastre popular. Que a la unidad hay que ponerle contenido y "peronista" no es a esta altura un contenido. 

Me alegro del fracaso del cordobesismo y su entrega impúdica al macrismo, porque eso es lo que son desde hace rato y no debe quedar ningún rastro de ilusión con juntarse con estos tipos, me alegro de la derrota de Urtubey porque para derecha horrible ya tenemos primera marca, me alegro de la evaporación de Massa que se la tiene merecida. No quiero que me sugieran que tengo que juntarme con esos cosos para ganarle a esta cosa que tenemos porque los cosos son parte de la cosa.

El resultado de este domingo sirve para contarnos las costillas: estos somos los que somos ahora, tenemos vocación de ser más y de ser mejores, pero no con cualquiera, no con estos.

Tenemos un movimiento de derechos humanos no sometido a períodos eleccionarios que ya sacudió varias veces en un año al poder concentrado y no tiene intenciones de cesar.

macri va a intentar a partir de esta mañana aplicar un plan político y económico más cruento y despiadado de lo que ha sido hasta ahora y el costo será alto: pero se trata de la declaración de una enfermedad que veníamos incubando, de la que éramos portadores hace rato, quizás décadas. Y el peronismo no es la solución, sino parte del problema (y ojo que yo no desdeño la palabra "problema"). Así que ahora sabemos que el 40 y pico lo votó sabiendo lo que el gato es, no lo votó engañada. Y la mayoría absoluta de Jujuy apoya la catástrofe humanitaria que está provocando Gerardo Morales y por ende el pueblo sí se equivoca: no es que falló la táctica del pituto ni la técnica del mentalismo, es que el 51% de los jujeños quiere que Milagro Sala sea sometida a lo que está viviendo y es lo que ELLOS le hacen. Y no es que Lanata no le repregunta a Carrió, es que la mitad de los porteños se sienten representados por ese monstruo abominable que en nada nos permite burlarnos de Donald Trump (en la ciudad más sofisticada de Sudamérica nos vamos poniendo cada vez peores). 

Es triste, pero no estoy triste, prefiero enterarme pronto de las malas noticias, parar de sufrir y ponerme a pensar.

Si quieren, escuchen el programa acá.

domingo, 22 de octubre de 2017

Medianoche de decisiones


Hoy a las 12 de la noche en Radio Gráfica nuestra ya clásica noche de escrutinio en La otra.-radio.

Online http://radiografica.org.ar o acá.

Ilustración: Carmen Cuervo.

sábado, 21 de octubre de 2017

No nos olvidemos de Milagro: "ya no quiero seguir viviendo"



El Comité por la Libertad de Milagro presentó ayer una denuncia penal contra el presidente Mauricio Macri, el ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, Germán Garavano y el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales. Los funcionarios fueron acusados del delito de instigación al suicido de la dirigente social y diputada del Parlasur Milagro Sala, producto del incumplimiento de la medida cautelar dictada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y otras resoluciones internacionales y del permanente hostigamiento que sufre.

La denuncia fue presentada en mesa de entradas de los Tribunales Federales de Comodoro Py. Recayó en la Fiscalía Nro. 1 en lo Criminal y Correccional Federal, a cargo de Jorge Di Lello, y en el Juzgado Criminal y Correccional Federal Nro. 11, a cargo de Claudio Bonadío.

Alrededor de las 21.30 del jueves la diputada del Parlasur, tras ser notificada del rechazo de un nuevo recurso de habeas corpus en su favor, se auto infligió lesiones en un nuevo intento de quitarse la vida.

“Ella fue compulsivamente trasladada del domicilio donde estaba detenida al penal de Alto Comedero por una orden del juez Pullen Llermanos sin aviso a ella ni a sus abogados, haciendo caso omiso al planteo de los peritos médicos que señalan especialmente el grave deterioro de su salud psíquica, su estado depresivo y la necesidad de que esté acompañada permanentemente por un familiar. El hostigamiento y el maltrato al que es sometida Milagro es una incitación clara al suicidio”, planteó la coordinadora del Comité y secretaria de Género de la CTA Estela Díaz.

“El gobierno no cumple con las resoluciones internacionales y le niegan a Milagro la atención médica. Por eso dejamos bien en claro que los responsables políticos de lo que le pueda suceder a ella, a Mirta Guerrero y a las demás presas políticas de Jujuy es responsabilidad de Macri, de Garavano y del contador Morales”, agregó el coordinador nacional de la Tupac Amaru e integrante del Comité, Alejandro “Coco” Garfagnini.

***

Milagro habló ayer por AM750 con Víctor Hugo Morales y contó las vejaciones que soporta en la cárcel de Alto Comedero.

“Hace más de 20 días que pido la internación, porque me siento mal de salud. Es inuhumano lo que están haciendo conmigo. Anoche me lesioné feo, me hicieron cinco puntos por fuera y cuatro por dentro. No me siento nada bien. Que alguien venga y que intervenga por mí y por mis compañeras. No puedo encontrar el camino, por eso hice eso ayer. Esto es el comienzo de lo que voy a hacer, porque yo así no quiero seguir viviendo”, dijo Milagro.

viernes, 20 de octubre de 2017

Santiago: no te vamos a olvidar, no los vamos a perdonar


"Es Santiago" dice Germán.

Hasta hoy esperamos tu aparición con vida.

Ahora prometemos no olvidarte. No perdonaremos a tus asesinos y encubridores.

El estado argentino ha cometido una desaparición forzada seguida de muerte. Fue la gendarmería, fueron bullrich y noceti. Fue macri.

"Unir a los argentinos...": ¿alguien recuerda un viernes preelectoral como este desde 1983?


"Basta": ilustración de Carmen Cuervo

La derecha hace política con muertos. ¿Te cabe alguna duda?

Momento mágico

La otra.-radio del domingo pasado, para escuchar clickeando acá 


El programa del domingo de La otra.-radio fue musicalizado por primera vez por nuestro discjockey invitado, Luciano Rosé, que nos trajo un montón de cosas extrañas cuya existencia ignorábamos, mayormente vinculadas a diversas vertientes del hip hop contemporáneo con vínculos con la electrónica (Danny Brown, A Tribe Called Quest, Darkside, Death Grips, Digable Planets, Madvillain) junto con algunos tecnoclásicos como Kraftwerk y Suicide y el clasicísimo y eléctrico Lou Reed, que hizo especialmente para la banda de sonido de Lost Highway (David Lynch) una canción de 1960 originalmente grabada por The Drifters y recreada por Lou para Lynch:



Este momento mágico
tan diferente, tan nuevo
yo estaba en cualquiera
hasta que te besé.
y entonces pasó,
me tomó por sorpresa
sé que sentiste lo mismo
por la forma en que mirabas.

Más dulce que el vino
más suave que una noche de verano
todo lo que quiero, lo tengo
cuando te aprieto contra mí.

Este momento mágico
mientras tus labios en los mios
va a durar siempre
siempre hasta el final del tiempo.



Lo único que me resta decir es que el tema cantado por Lou es uno de los pocos momentos cancionísticos de este programa lleno de sonidos raros y desafiantes, que pueden escuchar todos clickeando acá.

jueves, 19 de octubre de 2017

Manifiesto: El arte existe para trabar la maquinaria


El mercado y los medios de comunicación masiva bastardean el pensamiento de la vida popular. Disputemos la vida popular tomando de ella su alegría, su creatividad y su sufrimiento. De otro modo, sus sentires quedarán hablando la lengua del cautiverio mediático. Estamos ante un mundo en incesantes cambios tecnológicos. El arte debe investigar y al mismo tiempo debe cuestionar su dominio sobre la conciencia humana.

El habla de los medios conforma y construye un sentido común que solo reafirma ideas ya instaladas por ellos mismos. De este modo, toda experiencia transformadora se diluye. Reconstruyamos y estemos alertas a todas las experiencias populares en las que se ha logrado una comunidad justa y venturosa.



En el imaginario de la vida popular la educación continúa siendo la máxima inspiración para los adultos, para sus hijos y para los hijos de sus hijos. Pese a los arquetipos mediáticos, no aceptar sin más la idea de que las cosas son así. Si aceptamos esa frase, dejamos que las injusticias y los dolores de un pueblo se reproduzcan eternamente. Lo imposible es un estado de espera, no un obstáculo para realizar tal o cual cosa. Es un compás de espera, un tiempo de espera. Hay que estar al acecho, pero para estar al acecho culturalmente, tenemos que estar al acecho con las grandes creaciones y tener la lucidez de retomar las grandes líneas culturales y artísticas heredadas. Saber que no es posible sacudirse la memoria de los muertos. Los desaparecidos no están desaparecidos. Están entre nosotros. La realidad se compone de muchos planos. Comprender esa complejidad es la manera de acercarse a la claridad.



A los movimientos populares nuevos y antiguos les debe corresponder un gran arte. El arte no debe ser un olvido ni mucho menos un adorno. El arte está para impedir la reproducción de la maquinaria. Si hay estructura, si hay maquinaria andando, no hay transformaciones. la política, como el arte, tiene que tener esa capacidad de trabar la maquinaria. Hacer, reacer, desarmar, volver a armar, estallar, destruir, volver a construir sin miedo, con responsabilidad y memoria. Este es el mundo del arte y de la política. Desarmar para volver a armar, desarmar para volver a andar.



Del territorio y el tiempo: no estamos en cualquier lugar, estamos en Latinoamérica. Y hay que actuar temblando, ante la conciencia profunda de que esta tierra está siendo entregada, vendida y diezmada. La Patria se ha entregado. El neoliberalismo no tiene terrirorio. Su territorio es de empresa a empresa, de computadora a computadora, de finanzas, de negocios. Van por el obrero, por el empleado, por el maestro, por el científico, por el artista, por el niño de la calle, por la mujer, por el aire, por el fuego, por el agua, por la tierra. Este futuro es tierra baldía, tierra arrasada.


Las palabras que se dicen en un manifiesto no permiten un reposo. Están dichas para continuar y alentar otros pensamientos. En este caso, se trata de voces sobre nuestra patria. Compromisos sobre el territorio, el tiempo, la cultura, el arte, la tecnología, los medios de comunicación masiva y la memoria. Dilemas de un mundo sombrío que enluta nuestro país. Por eso también es un llamado a debatir e intervenir, con energía, audacia y fortaleza.

Liliana Herrero elaboró un manifiesto que se extenderá por 6 capítulos, del que ya publicamos el capítulo 1 acá. A fines de noviembre será proyectado en su totalidad, y luego se llevará a cabo un un debate sobre las perspectivas culturales y artísticas de este grave momento que vive nuestra Patria.

Realización y producción audiovisual: Gimena Tur y Majo Malvares.
Voces en off: Cristina Banegas, Luisa Kuliok, Carolina Papaleo, Dolores Solá, Rita Cortese y Liliana Herrero. Grabación y edición de Sonido: Acho Estol y equipo.

Producción y realización: Liliana Herrero y equipo.
Publicación y administración en redes: Silvina Rouvier, Hernán Giner y equipo web.