¡¡¡Estalló el BAFICI!!!

Primer día con ponjas parturientas y con catálogo





por Alejandro Ricagno

Y ya arrancó el Bafici.

Hasta ahora todo bien. La acreditación estaba, y hasta me dieron catálogo ¡sin que tuviera que mendigarlo! (Debe ser que tenían cola de paja por haber incluido un texto mío que yo había escrito para un Bafici anterior sobre la película de Ricardo Becher, Tiro de gracia, sin avisarme. Pero bueno, lo incluyeron y no me quejo, porque eso me dio acceso directo al catálogo, del que siguen tan canutos como siempre con la prensa, incluida la internacional como pude comprobarlo. Delante mío se lo negaron a una periodista brasileña).

Desde ya, si no vieron nunca Tiro de Gracia, la película beatnik vernácula de los 60, con música de Manal y Javier Martínez como actor, ésta es una buena oportunidad. Va el 17 en el Malba a las 20:00.Y la acompaña un documental sobre los días actuales de su director, que actualmente escribe una novela desde un geriátrico, seguido por la cámara de uno de su discípulos: Tomas Lipgot. El doc se llama Ricardo Becker, recta final y va el domingo 11 en el Hoyts 5 y sábado 17, 18:15 en el Malba. Allí, estaré sin duda.

Y hoy vi el primer documental del ponja loco Kazu Hara, al que el festival le dedica uno de los focos. Extreme private eros: love song, es un film raro. Raro en su extrema intimidad y en el seguimiento que hace Hara de la vida de su ex mujer, que lo abandona para trasladarse a Okinawa y vivir como copera en un bar. Hara sigue su derrotero con las siguientes parejas de su ex (una lesbiana y otra interracial heterosexual con un negro que la embaraza y la deja), se mete en las discusiones, entra en cuadro, manda su asistente a grabarla, la filma a veces con rabia, a veces con desconcierto y también con mucho amor. Rodada en 16, con sonido asincrónico (algo molesto porque impide veces identificar quien está hablando) durante los 1972 y 1974, la película esgrime su tour de force en la escenas de dos partos naturales a falta de uno. El primero de ellos deja al parto real de Noemí Kawase en Shara como el de una película de Walt Disney. No para estómagos sensibles. Aún estoy pensando sobre los alcances y limites de esta experiencia, que en el momento de su realización debe haber resultado más revulsiva o novedosa de lo que parece hoy, cuando el documental de intimidad ha superado las barreras de lo intrusivo con creces… Pero estos son sólo apuntes. Debo pensar más todavía. Cuando vea la que es considerada la obra maestra Hara, The emperor’s naked army marches on, volveré sobre esta canción de amor intimo y extremo.

(Exterme private eros: love song va los días 11 a las 19:15 en la Sala Lugones. Y repite en la misma sede los días 16 y 17 a las 17:15 y 22 respectivamente).

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