por Marcela Medina
Sweetgrass, de Llisa Barbash y Lucien Castaing-Taylor.
Un viaje intenso y trabajoso. El plano inicial ya es prometedor de lo que vendrá: una oveja rumiando se detiene para clavarnos la mirada de frente y apelar a nuestra atención,lo que por supuesto logra. Lo que sigue va mostrando el trabajo en los criaderos de ovejas, las esquilas, los cuidados hacia los recién nacidos y la aventura que implica atravesar una montaña.
Miles de ovejas como el mar inundan el paisaje rocoso. Será cansador pastar en la larga caminata que los espera. Los acompañantes son viejos conocedores del territorio, y disfrutan de este trabajo que también los agota.
Los antropólogos / realizadores apelan a ciertos rasgos del género western; y maravillosamente vemos cowboys de verdad. Sweetgrass nos propone peligro, humor, dulzura y la entrañable ceremonia de convivencia entre animales y seres humanos.
Sa. 17, 20: 15 hs., Atlas S. Fe 2
Do. 18, 18 hs, Atlas S. Fe 2
1 comentario:
La película me pareció por momentos fascinante.
Uno de los mejores es la conversación telefonica con la madre mientras vemos un plano general de las montañas. A mi me resultó muy graciosa la charla.
Y sobre todo la relación tan pasional que tenía con las ovejas, que las trataba de mother fuckers, y de pronto les decía ovejitas.
Me gustó mucho esta pelicula.
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