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jueves, 15 de enero de 2009

Ian Curtis: Ese oscuro objeto del deseo

Por Fernando Velazco

El nombre de Rob Gretton es muy familiar para todo aquel que se considere a sí mismo “fan" de Joy Division. Porque Robert Leo Gretton no sólo fue el manager de Joy Division y New Order, y consiguió que la banda firmara para Factory Records, sino que junto con Anthony Wilson, fue el creador del club nocturno The Hacienda. Esto nos permite considerarlo una especie de “quinto Joy Division”.

Gretton durante durante dos años apuntó en sus cuadernos todo lo referido a su más preciado tesoro: la música de Ian Curtis. Estos escritos podrían haber quedado inéditos si no fuera por una viuda que decidió hacer de ellas otro merchandising más, a pesar de que no fueron escritas para ser publicadas. Ahora se publicaron y es impensable que algún fanático se quede sin tenerlas.

1 Top Class Manager es el nombre del libro que la viuda de Gretton, Lesley Gilbert –no confundir con la tecladista de New Order, Gillian Lesley Gilbert– acaba de publicar. El libro reproduce más de 20 cuadernos de notas escritos por Gretton entre 1978 y 1980. Hay cartas, notas de estudio y hasta una lista de nombres alternativos que los Joy Division pensaron para denominar a su banda luego de la muerte de Curtis. Ahí figuran Man Ray, Radical Jesuits, Arab Legion, Sons Of God y finalmente el nombre de New Order.

Otro dato no menor, 1 Top Class Manager fue publicado en una edición limitada de 1500 copias y estas solo pueden ser adquiridas mediante la página www.1topclassmanager.co.uk/book/order.php .

Con motivo de esta rara pero seductora publicación, Lesley Gilbert accedió amablemente a ser entrevistada para La otra. A esta altura, donde lo privado de una estrella trágica pasa a ser público, uno se pregunta: ¿qué más queda por mostrar? ¿Tendrá Curtis, al igual que Kurt Cobain, un diario íntimo que algún día su mujer, Deborah, decida publicar?

- ¿Cómo y cuándo conociste a Rob Gretton?

Conocí a Rob cuando ambos teníamos 20 años. Solíamos trabajar juntos para una compañía de seguros. Rob no estaba metido en la música aún. Dejamos nuestros trabajos y trabajamos en un kibutz en Israel por seis meses. Después viajamos a Grecia por dos meses. Fue cuando volvimos a casa que Rob quedó enganchado con las bandas.
- ¿Cómo era Ian Curtis?

- Ian era joven muy agradable, tímido. Siempre muy cortés, pero su epilepsia lo deprimía. Pienso que es una gran pena que Ian se haya suicidado, podría haber seguido haciendo grandes cosas.

- ¿Cómo podes describirme la relación entre Ian y Rob?

- Rob y Ian se llevaban muy bien, como con el resto de la banda, pero Ian era una persona muy privada. Si hubo algún conflicto entre ellos, se arregló rápidamente.

- ¿Qué me podés contar sobre tu libro, 1 Top Class Manager?

- Quise hacer algo en honor a la memoria de Rob, especialmente para nuestros hijos Benedict y Laura. La idea original del libro vino de Mat Norman en el Manchester District Music Archive.
Jon Savage que es amigo mío también pensó que los cuadernos de Rob eran realmente interesantes. Él utilizó algunas páginas en el documental de Joy Division que realizó con el director Grant Gee. Yo quería tener el control total sobre el proyecto, porque tenía una idea muy clara de cómo quería que luciera, por eso decidí editarlo yo misma.

- En el libro figura una lista con los nombres que los otros Joy Division habían pensando en ponerle a su nueva banda. ¿Qué podés decirme de esto?

- Cuando Ian murió, el resto de la banda obviamente quería continuar con un nuevo nombre. No pienso que algunos de los nombres de la lista fueran sugerencias serias.

2 comentarios:

Koba dijo...

Una pena lo de este pibe, un verdadero creador que se fue muy rápido. Recomiendo Joy Division, el documental de Grant Gee, no así Control, película de ficción basada en el libro autobiográfico "Touching from a Distance" de Deborah Curtis, viudad de Ian.

Oscar Cuervo dijo...

Coincidencia: Control es un verdadero fiasco, fotografía glamorosa, imagen digital b&w tersa, al servicio de un teleteatro chapucero.
El documental es muy superior: al menos se puede vel la mirada a cámara del verdadero Curtis, esos ojos acuosos que te miran impresionan.