todos estamos igual

martes, 12 de agosto de 2008

Sarlo, ¡qué Viva!

Por Oscar A. Cuervo

"Para un intelectual progresista o peronista era muy difícil no tomar una posición porque cuando el Gobierno convoca a la historia en su epopeya anticampo, evoca a través de la historia algunos hechos fehacientes de los últimos cincuenta, sesenta o setenta años". (¿Cuántos años tiene Beatriz? ¿hasta dónde llega su memoria?).

Flavia de la Fuente está contenta, muy contenta, porque descubrió, leyendo la última edición de ADN cultura (el suplemento cultural del diario La Nación) que la Sarlo (Beatriz, ¿qué otra Sarlo hay?) está más viva que nunca. La pobre Flavia estaba preocupada porque pensaba que, después de cerrar Punto de Vista, quizá la pobre Beatriz estuviera deprimida y sumida en un inquietante silencio. Se ve que Flavia no lee la interesante columna de Sarlo de todos los domingos en VIVA, porque ahí se la ve desplegando toda la viveza de su pensamiento. Bueno, la cosa es que Flavia sólo se tranquilizó al leer ese extenso reportaje en La Nación del sábado, del cual me permití citar el párrafo con el que comienza este post. La cosa es así: Beatriz cree que es errado hacer política convocando a la historia. ¿Cómo? Mejor que ella misma lo explique:

"Cuando el Gobierno se refiere a la participación o anuencia de la Sociedad Rural en golpes de Estado (aunque no es esta Sociedad Rural, es la misma institución), el Gobierno está evocando hechos probados que los buenos historiadores, no sólo la historia de Caras y Caretas o de Felipe Pigna, sino historiadores como Halperin Donghi, saben que sucedieron. Entonces, si uno hace política presente convocando a la historia, cosa que yo creo que es errado...".

O sea: la Sociedad Rural, le dice BS a La Nación, aunque no es esta Sociedad Rural, es la misma institución. ¿Es la Sociedad Rural la misma institución que la Sociedad Rural o no lo es? ¿La que participó o dio su anuencia a los golpes de estado del pasado era otra Sociedad Rural? Uno puede imaginar que esta pregunta en realidad se relaciona con el interlocutor con el que Sarlo está desarrollando esta línea de pensamiento vivo. Podríamos poner: aunque La Nación participó o dio su anuencia a los golpes de estado del pasado, no es este medio con el que estoy hablando, aunque es el mismo medio. ¿Ahora se entendió?

No. Bueno, sigamos:

“La política es creatividad hacia adelante, sin ignorar lo que ha sucedido y tomándolo en cuenta, pero sin alinear a los protagonistas respecto de un pasado. Porque yo no quisiera ser alineada como miembro del Partido Comunista Revolucionario prochino, del cual fui miembro hasta los cuarenta años. Quisiera ser alineada con mis transformaciones ideológicas y políticas en los veinticinco años que siguieron. Alinear a un protagonista respecto de ese pasado me parece inaceptable”.

Ah, no hay que alinear a los protagonistas respecto de un pasado: ella por ejemplo, era del Partido Comunista Revolucionario, pero eso fue hace mucho, mucho, mucho tiempo. Beatriz fue prochina hasta los cuarenta años. Y ella no quiere ser alineada consigo misma. ¡Es que ya pasó tanto! Ahora Sarlo ya no es prochina. Y aunque lo fuera, ahora ya ni siquiera China es prochina. Uno puede imaginar que los chinos de hoy no quieren ser alineados con la China de antes. O que La Nación no quiere ser alineada con el diario que durante tantas décadas promovió golpes de estado. Que uno se tenga que alinear con su pasado nos parece inaceptable.



¿Entonces hay que olvidar la historia, Beatriz?

"No hay que ignorar la historia, pero es errado hacer política presente convocándola porque se empiezan a confundir los protagonistas y detrás de la familia Miguens veo a la familia Martínez de Hoz y detrás veo a la dictadura militar y así. Y entonces el escenario presente y el diseño del paisaje presente se me pierden".

Pobres los Miguens, ellos nada que ver con Martínez de Hoz. Pero ¿hablábamos de la familia Miguens o de la Rural? ¿Hablábamos de los Mitre, de los Blaquier o del diario La Nación? (Bueno, en ese caso...). Si detrás de ellos empezamos a ver a la dictadura, el escenario presente y el diseño del paisaje presente se me pierden. No a mí, a Beatriz se le pierden.

Chicos, no sean mala onda, si ya todo pasó, si Sarlo ya no es la que era, ni La Nación, ni la Rural son los que eran. Que la propiedad de la tierra se herede de generación en generación, desde que el general Roca conquistó el desierto y liquidó a los habitantes que habitaban el desierto, que desde entonces los campos se alambraran y los hijos sucedieran a los padres en la propiedad de la tierra, todo eso es un desagradable corolario del uso de un mismo apellido. Porque todos saben que los Mitre que apoyaron la desertificación del desierto y su posterior conveniente re-ocupación no son los Mitre, aunque sean la misma familia. ¿O ahora vamos a ver detrás de los Mitre de hoy a los Mitre de 1976 o a los de 1880? Por favor, no seamos anacrónicos, que así se nos pierde el diseño del presente.

"Sobre la base de lo que hizo la Sociedad Rural en 1930, 1955 o 1976, yo no encararía ningún diseño de política. Y no porque tenga la menor simpatía por la Sociedad Rural, sino porque no me parece que la política tenga que ser definida mirando hacia atrás al mismo tiempo que se mira hacia delante. La política no es un Jano bifronte".

No hay que mirar hacia atrás al mismo tiempo que uno mira hacia adelante, porque uno corre el riesgo de quedar bizco como-ya-saben-quién. Cuando uno mira hacia atrás, mira el pasado, y el pasado ya pasó. Y cuando uno mira hacia adelante, entonces ya no mira al pasado. Y ojo, que Sarlo no siente la menor simpatía por la Sociedad Rural, ¡qué va! Si todos sabemos que ella era prochina, igual que De Angeli.

El periodista de los Mitre no le pregunta a Sarlo cómo es que era comunista revolucionaria y ahora ya no, es una pregunta de mal gusto, aunque quizá sería interesante dar lugar a que Beatriz se explayara acerca de en qué sentido uno sigue siendo el mismo que ya no es. No digo que tal cosa, el ya no ser y el todavía ser, sea algo imposible. Digo que sería interesante entender cómo esa tesis dialéctica se aplica al caso de Sarlo, al de la Rural y al del propio diario con el que ella está conversando. Y cómo se aplica a la Argentina.

La cuestión es que el periodista no se lo preguntó y que Sarlo tampoco tomó la iniciativa de explicarlo. Lo que al diario de los Mitre le interesaba indagar era, según declara Jorge Fernández Díaz, director de ADN Cultura, "las relaciones del poder con los pensadores". Si alguien está pensando que eso significaba indagar las relaciones de Sarlo con el diario de los Mitre, desde ya olvide la idea. No, les explico: donde dice el poder debe leerse el gobierno actual, no el diario La Nación, ni la Sociedad Rural, ni las personas que heredan la propiedad de la tierra por ser unos hijos de sus padres. Y donde dice los intelectuales que se relacionan con el poder, no debe pensarse en Sarlo sino en Carta Abierta. Ahora se va entendiendo un poco más. La Nación y la Rural no son el poder, Sarlo no es un pensador, en todo caso es una pensadora.



Y además Sarlo no es la misma Sarlo, aunque siga siendo ella. Esas divisiones esquemáticas quedan para los rencorosos que quieren partir el país en dos, cuando el país es uno solo, aunque ya no sea el mismo.

59 comentarios:

Anónimo dijo...

Beatriz Sarlo nació en el año 1942, dice en la solapa de uno de sus últimos libros. Aunque no hablo con ella, no la conozco, la ví muy bien aparentemente , en la retrospectiva de Ozu. iGUAL, NO HAY UNA EDAD FIJA PARA EMPEZAR A PERDER LA MEMORIA Y ESO NO ES FÁCIL EN UNA INTELECTUAL QUE EJERCITA SUS NEURONAS PERMANENTEMENTE COMO ELLA.
Busquemos por otro lado. Hay otras causales de olvidos.
Martha

Anónimo dijo...

Ahª! Otras razones pueden ser : emocionales, que se hizo partidaria de Heráclito, etc. Martha

Oscar Cuervo dijo...

Lo que yo creo es que ella no se acuerda de nada porque es muy joven y los padres no le contaron.

Anónimo dijo...

Esta barbaro que aparezca en la nacion esa entrevista. Tal vez sea que a la vejez le pinta sincerarse!!
Lucas

Cece dijo...

Oskiii...
sos taaaan bueno siendo malo!

Leí la nota en La Nación, me pareció que Sarlo estaba adaptando el discurso a su interlocutor; puso mucho cuidado en las palabras que utilizó y en la forma casi eufemística con la que describe la relación del gobierno con el pasado y la oligarquía.

Me pareció que la idea central de Sarlo es poner el ojo en la manipulación que hace el gobierno del pasado al replegar ciertas formas y discurosos, de manera descontextualizada y eficaz, a sus intereses en el presente.

Intereses que pueden ser legítimos o no, a los que yo puedo adherir o no; pero lo que no se puede justificar es la simplificación intencionada de la historia, porque eso es tan violento como el mismo accionar de la oligarquía.

Y las alusiones a la vejez de la Sarlo... eso no hacía falta en boca de tan inteligente comentador filósofo/político.

Anónimo dijo...

Beatriz Sarlo se trepó al vagón de los malditos (cada vez mas lleno) cuando publicó esta nota: http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=998895
Luego de tamaña traición a los intereses nacionales y populares (la noche en que le vibró el celular a Luisito D'Elia), cualquier cosa que diga, por mucho que se esmere en ser prudente y cuidadosa de no herir suceptibilidades (no se por que se esmera tanto sinceramente), cualquier, pero cualquier cosa que diga, será destrozada en tribunales de guerra (bloggeras lógico) ya sea mediante la burla, subestimación o directamente la injuria.
No creo que a Beatriz Sarlo le afecte demasiado este post (si es que se entera), pero de todas formas me parece que es un poco desmedida la saña.
La entrevista es muy interesante y siempre es grato leer a Sarlo.
Lo que no entendí muy bien es lo de los billetes de 100 pesos.
¿Alguna nueva promo de La Otra?
¿100 revistas?

Oscar Cuervo dijo...

"lo que no se puede justificar es la simplificación intencionada de la historia, porque eso es tan violento como el mismo accionar de la oligarquía."
Hola Cece: eso que vos describís tan bien es precisamente lo que hacen Sarlo y La Nación en el reportaje: la simplificación intencionada de la historia para adaptarla a sus intereses del presente. Yo creo que eso es un pecadillo que podemos tener todos, maquillar un poco nuestro pasado para adaptarlo a lo que somos ahora. Así hace uno cuando le cuenta sus historia a alguien a quien le quiere caer bien. Y eso no simepre es tan violento como el accionar de la oligarquía, a veces es una mentirilla tonta.

Ahora cuando lo que vos querés maquillar es tu pasado violento, el hecho de que mantuviste el poder y la riqueza durante un siglo a sangre y fuego, matando y mintiendo, ya reciclar tu pasado se vuelve un asunto delicado. Y cuando tu interlocutor te construye un relato a tu conveniencia, para que vos puedas reciclar tu rol de clase sangrienta y despiadada, cuando este locutor quiere hacer desaparecer, mediante un truco del discurso, tu verdadera naturaleza, ahí tenemos un verdadero caso de relación de un pensador con el poder, que es lo que La Nación quería indagar, aunque no precisamente aplicados a ellos mismos.

Yo creo que la madeja se puede desenredar precisamente a partir de esa caracterización que usan del "poder", pero no para referirse a ellos mismos.

Lo de Sarlo sería una simple defección, si es que algua vez hubiera estado en otro lugar que ese. Pero la verdad es que no sé donde estuvo, no sé si el PCR era un lugar distinto, porque yo era muy chico y Sarlo hizo aquellas otras cosas hace mucho, mucho, mucho tiempo.

Oscar Cuervo dijo...

Anónimo:
yo no escribo esto para que Sarlo se preocupe, lo escribo por mí, para tratar de entender qué me dicen cuando me hablan de manera tan agradable y mesurada como Beatriz lo hace.

Ella no se va a preocupar, está demasiado arriba, en un mano a mano con La Nación, con ese grupo de personas que aparecen en el reverso de los billetes de 100 pesos. ¿Qué le puede preocupar una revistita de 3 pesos con cincuenta?
Esa revistita nos preocupa solamente a vos y a mí.

Anónimo dijo...

Exelente post.

Una vez escuche un análisis muy interesante sobre los personajes de la historia que se encuentran en los billetes. Y es muy paradójico, que UNO DE LOS MAYORES ASESINOS DE LA HISTORIA ARGENTINA, este en el billete más importante: Julio Argentino Roca. Y en realidad eso se explica porque al poder le interesa construir una mirada (un punto de vista) de la historia. Para el poder, la memoria también es importante, no crean que no, pero ojo con la memoria, hay que moldearla, hay que legitimarla, hay que exorcizarla. La manera de ver la historia también puede ser un modo de moldear la idea que tenemos de patria, o de país, y en definitiva, que pretenden los gobernantes, en suma, el poder, de nosotros, "su" sociedad civil, lo que pretenden que pensemos de la historia.

A su vez, existen pensadores, como la conocida Beatriz Sarlo, que era ya muy conocida intelectual antes de su querida columna en Viva. Su lenguaje es mesurado, porque otra vez, va legitimando una forma de ver la historia, borra su pasado comunista, o más que borrar, lo oculta abajo de la revista del domingo, y leemos toda la revista y todavía la historia sigue sin aparecer...esta pero no esta, un pase de magia político.
Desde los años 90 y pico hasta ahora Sarlo no dijo nada que deslegitime ciertos movimientos de la cultura, la sociedad y la política en conflicto, el conflicto se le escapa de las manos, y hasta el día de hoy sigue siendo así

"lo que no se puede justificar es la simplificación intencionada de la historia, porque eso es tan violento como el mismo accionar de la oligarquía."

comparto, pero alguien puede pensar que Sarlo también nos esta dando un poquito de simplificación, la que nos esta diciendo lo que es la historia borrando sus propias huellas.

Anónimo dijo...

Y pensar que esta señora (Sarlo) fue mi profesora.
carmen cuervo

Ana Estu dijo...

Sarlo, la tipica intelectual zurda argentina, a la hora de los bifes siempre se alinean con la sociedad rural. Lo se bien porque mi papa era de la sociedad, a veces miraba el noticiero y me decia "mira, ese salio 10000, ese otro 20, ese no lo quisimos ni regalado, no sirve"

Anónimo dijo...

Que hora de los bifes?
RETENCIONES MOVILES!!!

Anónimo dijo...

Lo que yo me acuerdo del PCR ES QUE LE DECÍAN IRÓNICAMENTE "partido comunista rabioso" . Obviamente porque era la misma tibieza del comunismo con un toque revolucionario.
Martha

Anónimo dijo...

El PCR apoyò el golpe de Pinochet, poruqe los maoistas estaban contra el "prosovietico" Salvador Allende. Y aca en agentina apoyaban el gobierno de isabel y lpez rega. ahora lo tenemos a de angeli, la mascota preferida de la rural. y coca sarlo, la frutilla de la torta.

Anónimo dijo...

Lo que no me quedo claro es lo que dice polvoira en chimangos sobre la posicion de la coca sarlo, cuando polvora dice "lo que no se puede justificar es la simplificación intencionada de la historia, porque eso es tan violento como el mismo accionar de la oligarquía"
ahi se esta refiriendo a la justificacion intencionada de la historia que hacen el diario la nacion y sarlo o esta criticando al gobierno?
xq no entiendo como hacer equivaler una justificacion de la dictadura o de el genocido que fue la campaña del desierto con la politica de derechos humanos del goberno actual. son equivalentes los campos de concentracion de la dictadura y el exterminio de los aborigenes que hizo roca con algo que haya hehcpo el gobierno de los K?
polvora, vos decis que una cosa es tan violenta como la otra, pero que de lo que hizo el gobierno K es tan violento como la dictaudra y la campaña del desierto?

me equivoco o estas planteanmdo una nueva version de la teoria de los dos demonios donde un demonio es la dictadura y el otro el gobierno actual y los dos hacen cosas equivalentes. si me lo aclaras, te lo voy a agradecer, porque las cosas dichas al pasar en un blog pueden enetderse mal

Estrella dijo...

Me parece que no encotraremos nunca la punta del ovillo si mientras la buscamos vamos enmarañando la lana.
Claro que es importante la memoria, la mirada hacia atrás, pero si eso nos paraliza y nos impide ir hacia adelante, algo no está funcionando bien.

Cece dijo...

oscar,
a mi me da un poco de miedo eso de "maquillar el pasado" porque uno puede terminar "pintarrajeado como una puerta". Para mi la base para entablar un diálogo es la honestidad, sino es imposible siquera formular una pregunta. En la nota Sarlo distingue entre la tarea del intelectual y la del militante; marca momentos en los que el intelectual siente la obligación de convertirse en miltante en pos de una mirada a largo plazo, que trascienda los "errores cotidianos" del presente. Ahí aparece el maquillaje que decís vos. Creo que esta opción es completamente respetable y sumamente necesaria, pero siempre que se declare abiertamente, y que se asuman las consecuencias de abandonar en cierto sentido (o demorar) la perspectiva crítica.

Cece dijo...

Hola pipo,
La violencia a la que me refiero es una violencia retórica, que radica en el artilugio semántico de identificar un término por otro en base a omisiones; aunque es verdad que esta operación puede tener consecuencias nefastas. La teoría de los dos demonios que vos nombrás es un ejemplo. En menor escala, y como anécdota bizarra, otro ejemplo que me acuerdo fue cuando Menem, recién salido de unos meses de prisión domiciliaria, a fines de 2001, se identificó con Antonio Gramsci, como preso político (¿…?!).

Ahora, pipo, vos me estás diciendo que yo estoy reflotando una “teoría de los dos demonios”, y con esto estás haciendo lo mismo que critico: estás deslizando un término por otro; y así el resultado de la ecuación siempre será falso, aunque la simplificación nos seduzca y lo queramos pensar como verdadero. No es mi intención equiparar la campaña del desierto y la dictadura con el modo de hacer política de los K. Es claro que este gobierno quedará en la memoria por su oportuna y más que necesaria política de derechos humanos, ¿pero es necesario agradecérselo; y peor, agradecérselo apartando la mirada crítica?

Anónimo dijo...

Este gobierno quedará en la memoria por haber desperdiciado los años de mejor contexto internacional de la historia.

Anónimo dijo...

El contexto internacional les sirve a los exportadores de soja.

En mi caso no le agradezco al gobierno por tener una política de derechos humanos, critico a este país por tardar 30 años en tener política en este sentido. Y si queres ir más a la raíz del problema es que durante estos años toda la argentina calló y no exigió justicia para sus muertos, y ahí llegamos a otra explicación. El silencio durante la dictadura, el no te metas, se mantuvo durante la democracia, y fueron nuestros gobernantes los que no hicieron lo que debían, no restauraron la memoria a los argentinos.

Amén de eso, yo era de la idea de que, cuando pase el conflicto del campo íbamos a poder criticar al gobierno, o más que nada exigirle lo que necesitábamos como pueblo. Pero el conflicto se extendió, los grupos económicos presionaron tanto que se desvirtuaron las cosas (la cuestión de la duración de un reclamo tiene que ver con quien es el que lo ejerce). La tergiversación empezó desde los medios falseando las cosas, usando al campo para sus intereses, la oposición política que manipuló la coyuntura, y los dirigentes del campo, los pooles, etc., que usaron de rehenes a los peones y trabajadores a los que yo llamo verdadero campo, que es la gente que trabaja ahí, desocupada muchos (porque el sistema de siembra directa prescinde de muchos trabajadores) etc. (nadie salió a cacerolear por ellos, no seamos hipócritas).
Es decir, que nadie sacó el foco crítico sobre el gobierno, pero quien puede ponerse a debatir ideas tan idiotas como si hay doble comando, con las peleas de alcoba, con si Moreno es malo o es bueno, etc.
El silencio, la puteada, el desvirtuar las cosas, es hacer política, es una postura políticamente tan clara como criticar o poner bajo examen un gobierno. Por eso estoy totalmente de acuerdo con espacios como este para discutir cosas distintas, como por ejemplo abarcar tiempos históricos más amplio, o porque los intelectuales se alinean con grupos mediáticos como Clarín o Nación, y ya no pueden tener libertad para opinar, y la militancia se la tienen que comer.

Anónimo dijo...

¿Vos crees que Sarlo en realidad piensa distinto pero dice lo que dice para "alinearse" al grupo Clarín o La Nación?
Ser libre es decir lo que quiere escuchar Fede.
Escuchen.

Oscar Cuervo dijo...

Estrella:

creo que en tu frase "Me parece que no encotraremos nunca la punta del ovillo si mientras la buscamos vamos enmarañando la lana", en ese "buscamos" y "vamos" no hablás estrictamente de "nosotros", sino que es una forma suave de decir: "vos Oscar estás...". Es decir, encuentro un tono de reproche hacia mi post sobre Sarlo (tu mensaje es tan escueto que necesito interpretarlo de alguna manera). Pero como no hacés más precisiones acerca de lo que te parece reprochable, no puedo contestarte nada más que esto: registro tu tono de reproche.

Si en algún momento te decidís a señalarme lo reprochable, trataré de responderte puntualmente.

Oscar Cuervo dijo...

Cece:

a vos te da un poco de miedo eso de maquillar el pasado, y suponés una honestidad básica para debatir algo. No sé como unís una frase con la otra: lo que yo dije es "Yo creo que eso es un pecadillo que podemos tener todos, maquillar un poco nuestro pasado para adaptarlo a lo que somos ahora. Así hace uno cuando le cuenta su historia a alguien a quien le quiere caer bien".

¿A vos te da un poco de miedo eso? ¿Nunca lo hiciste? El límite de los discursos moralistas es que miden al oponente con una vara distinta que a sí mismos. Algunos quedarán pintados como una puerta y otros simplemente se delinean los ojos. Cuando más pesado sea el maquillaje, más ´patético el efecto que produce, como el protagonista de Muerte en Venecia. A mí eso no me da miedo, será porque ya soy muy viejo y tengo idea de cuánto puedo mentir y cuánto me pueden mentir. Me parece un rasgo de humanidad. Ahí donde vos descontás la honestidad (la suposición de que todos somos honestos) yo descuento la mentira (la suposición de que existe una probabilidad alta de que nos mintamos). Esto te lo digo muy en general y no específicamente referido a la discusión sobre Sarlo/ADN. No te dé tanto miedo la mentira porque si no vas a vivir aterrada.

Lo que yo cuestioné en el reportaje Sarlo y en las posteriores alborozadas alabanzas que se le abalanzaron en la lectora provisoria es la cuidada puesta en escena preparada por Sarlo/La Nación acerca de que "ella es una intelectual crítica con una mirada fría y objetiva que dice con descarnada lucidez lo que pocos se atreven a decir sobre las relaciones entre los intelectuales y el poder".

Eso que acabo de encomillar es un ejercicio de maquillaje no ya del pasado, sino del presente de Sarlo, La Nación y La Rural. Es un lifting de la derecha que ahora produce discursos sobre "los intelectuales y el poder" sin jamás haberse puesto a preguntar en serio qué es el poder. ¿Cómo tomarías vos un discurso sobre la conveniencia de la castidad en la boca de un sexópata?

Para que en un medio como La nación se pueda hablar de la relaciones de los intelectuales y el poder habría que leer antes un extenso y preciso ajuste de cuentas sobre la identificación de ese diario con el poder permanente de la Argentina, no hablo ya de relación, porque el diario de lso Mitre es el diario de los Mitre y uno puede leerlo década a década para reconocer una férrea identidad nunca abandonada. Siempre han estado infaliblemente en el lugar que les correspondía, como dueños del país que se sienten.

La nación nunca ha tomado distancia de esa línea y creo que no la va a tomar porque, a diferencia de la errática descocada pequeño-burguesía que hoy está acá y mañana allá porque nunca sabe bien lo que quiere, la oligarquía de la cual La nación es su inclaudicable vocero siempre ha sabido y sabrá muy bien lo que quiere.

Eso Sarlo lo sabe perfectamente pero no va a tener el mal gusto de decírselo al enviado de los Mitre, porque ella es una mujer de buen gusto y porque no es una intelectual crítica (que se vería inclinada a nombrar la soga en la casa del ahorcado) sino una comentadora obediente: en la VIVA de los domingos jamás se va a salir del tono que la revista de los domingos demanda y en un reportaje de La Nación ni se le va a ocurrir deslizar una frase acerca de la intervención de La Nación en la historia argentina, ni en la historia pasada ni en la presente. Lo que Sarlo va a decir es algo que va a sonar muy bien a los propietarios de La Nación y a los lectores de La Nación (entre los que por suspuesto están los miembros de la Sociedad Rural): que hay que mirar para adelante, que no se puede mirar a la vez hacia el pasado, el presente y el futuro, que la política tiene que ser creativa.

Esta no sería más que una sarta de vaguedades metafísicas y filosofía barata sino la pusiéramos en el contexto preciso en que es dicha: la Sarlo, que siempre se encarga de aclarar que pertenece al campo progresista, plantea una oposición entre los intelectuales críticos (ella) y los militantes obnubilados por las epifanías tardías (Horacio Gonzalez): esto es, una nueva versión de "la fiesta del monstruo" que, desde El Matadero hasta Luis D'elía ha hecho un trayecto tan rutilante en la historia de la literatura argentina.

A ADN no le convendría, por razones de marketing, quedar pegada al apoyo que La Nación hizo oportunamente a la conquista del "desierto" ni a la dictadura. Le conviene presentar a una mujer a la que se describe como una pensadora crítica de una lucidez implacable, que además aclara que ella no tiene ninguna simpatía por la Rural y que tien una intachable trayectoria progresista.

Lo más interesante es que esta puesta en escena es una magnífica actuación de la relación entre los intelectuales y el poder que la nota quiere indagar. Y es un estupendo ejemplo de lifting político, donde Sarlo y La Nación se legitiman recíprocamente.

Sobre eso se centró mi análisis.

El dilema plateado por Sarlo que vos hacés tuyo "la opción entre el intlectual crítico que señala los fallos del presente vs. el militante enceguecido por las e´picas y las epifanías del pasado y del futuro que hace la vista gorda a los errores cotidianos del presente" yo no lo concedo. Porque no creo que para ser militante de algo haya que hacer la vista gorda ante los errores del presente, así como tampoco le concedo a Sarlo la autoridad que ella se atribuye como la intelectual crítica que no es. Aceptar ese dilema es quedar atrapado en un maquillaje, justamente. Sarlo no tiene ojos para los errores del presente ni los del pasado y entonces se refugia en una vaga reivindicación de la creatividad, que en este caso funciona como un pobre eufemismo para la hipocresía.

Oscar Cuervo dijo...

Ano nimio:
¿piensa distinto la Sarlo de lo que dice a La Nación? Quizá sea una pregunta anecdótica: ni siquiera sé si Sarlo piensa. Más me parece que ella es pensada por otro y abre la boca. Fijate lo nerviosa que está antes de comenzar el reportaje, según narra el cronista. Fijate lo preocupada que estaba Flavia por la posibilidad de que Beatriz estuviera deprimida después de cerrar Punto de Vista. Fijate el tono de las columnas que escribe semanalmente en VIVA. ¿No es todo una deliciosa comedia de enredos?

Anónimo dijo...

cece:
vos sos la que esta deslisando un termino por otro, poruqe primero djiste que la simplificacion de la historia es algo tan violnento como el accionar de la oligarquia. como el accionar de la aoligarquia inclyue hechos muy violentos, yo te pregunte si estabas equiparando el exterminio de los aborigenes o el genocidio del,proceso a un acto de simplificacion de la historia.
si yo te lo pregunte fue porque me parece que simplificar la histroria no es tan violento como lo otro.
entonces vos ahora haces un deslizamiento semantico para decir que hablas de una violenca retorica. pero las matanzas de los indios y los campos de concentracion no fueron violencia retorica, asi que fuiste vos la pone un termino por otro.
y fijate que yo te pregunte si vos comparabas esas dos violencias para saber si aderias a la teoria de los dos demonios, te lo pregunte, ok? y vos volves a deslisar un termino por otro diciendo que yo afirme que vos aderias a los dos demonios.
viste que vos tambien podes acomodar tu discurso?

Anónimo dijo...

oscar: Me llamó Sarlo diciendo que le pares de pegar, dale tenele un poco de piedad.
Ya sabemos que sos discolo.
Si te seguís portando mal, lo llamo a Chacón.

Cece dijo...

Oscar,
la forma de exponer tus ideas no tiene desperdicio. No sé qué está mejor, si la entrada o el post que hiciste recién. Estuviste a un milímetro de convencerme...

sin embargo te voy a hacer caso, voy a procurar ser menos ingenua.

Estoy de acuerdo desde el primer momento, en que cualquier emprendimiento de La Nación por indagar la relación de los intelectuales con el "poder" es una payasada. Por eso, justamente, me parece que hay que leer lo que dice Sarlo entre líneas... porque es evidente que hay una meditada puesta en escena como decís. Ella misma en la nota dice que los asiduos lectores de política saben porqué cada uno dice lo que dice en cada medio: los discursos aparecen encriptados, y esto los hace tan vulnerables a los mal entendidos como a la tegiversación.

Pero bueno, tu análisis abre un montón de cuestiones que sigo pensando.

Cece dijo...

Hola Pipo,
cualquier acto de dominación, cualquier acto de exterminio no se puede realizar si no está acompañado de un discurso que "legitime" lo ilegitimable. Hete aquí: la oposición civilización / barbarie; la teo. de los dos demonios; la lucha antiterrorista... y un triste etcétera. Si los deconstruís, te das cuenta que se valen de una serie de jugarretas retóricas.

Repito que no fue mi intención equiparar las masacres con la política K. Pido disculpas si no me expresé claramente.

Anónimo dijo...

cece, esta entendido, gracias por aclararlo, saludos

César dijo...

Gracias por aclararlo, cece. Estas disculpada.

Anónimo dijo...

cesar, alguna vez aporta una idea en vez de seguir tu guerrita impotente contra lo que dicen otros

Oscar Cuervo dijo...

Cece:
efectivamente, no me creas, yo estoy tratando de quedar bien para borrar mi pasado menemista y lograr el aplauso de César y Ano nimio

te mando un beso a vos, cece

Anónimo dijo...

Ano nimio es mejor que Arru Gueli.
Mira que lo llamo en serio.

Cece dijo...

Jajaja...!
no te preocupes Oscar, todos hicimos cosas de las que nos arrepentimos.

(Nota para el lector desprevenido: lo de arriba es un sarcasmo)

Saludos a todos... no voy a entrar más en esta entrada, ya que dedo índice se agita mucho al hacer el scroll con la ruedita.

Anónimo dijo...

yo creia que la onda revanchista de este gobierno y de los que los apoyan llegaba hasta la ultima dictadura, pero en este post creo que se la agarran hasta con Roca! lo ultimo del gobierno fue declarar de lesa humanidad el bombardeo del 55, ¿con que necesidad? ¿que buscan realmente? ¿es para idemnizar a peronistas de esa epoca? era para eso la plata de las retenciones?
pero acá se pasan, agarrarselas con roca, mitre, no creo que estuvieran escribiendo si seguiamos siendo calchaquies, quilmes o araucanos.
ademas no hay una superacion intelectual? el nieto de mitre tiene que pensar necesariamente como su abuelo mitre? oscar cuervo vos pensas igual que tu abuelo? no hubo ningun cambio desde que empezaste la facu hasta ahora.

dejen de defender a este gobierno nefasto

Sebastian

Oscar Cuervo dijo...

Sebastián:
estás enojado y asqueado, por Lamborghini y por el revanchismo, porque estamos buscando indemnizaciones para los araucanos y porque culpamos a los pobres nietos de Mitre por las culpas de sus padres.
Te aviso: vamos por más.
qué le vas a hacer

Anónimo dijo...

Uh que miedo!

Anónimo dijo...

oscar

que paso con chacon y vos ? cada tanto lo nombran y no entiendo nada

César dijo...

ok Pipo, voy a aportar algunas ideas:
¿Y si te propones ser menos pedante y le pedis menos explicaciones a la gente sobre lo que dice y quiere decir? ¿Y si relativizas un poco tu papel de pseudo celador ideológico del blog?
Consejo de onda: dejalo un poco a Pigna, si te gusta el revisionismo, proba con Pepe Rosa, Galasso o el colorado Ramos.

Anónimo dijo...

cuando decis vamos por mas es por buscar mas atràs en el tiempo? a quien van a culpar por la propia ineficienda de las izquierdas (es que en este pais son muchas)... a las invasiones inglesas?

todo bien si quieren indenmizar a todo el mundo, pero la plata hay que sacarla de algun lado.

te tenia que escribir que era lindo el cuento de lamborghini? no lo entiendo, demasiado sadismo para mi gusto. la Sarlo me cae bien

Sebastian

Oscar Cuervo dijo...

Anónimo:
fuimos pareja y Chacón me pegaba.

Oscar Cuervo dijo...

Sebastián:
no, no me tenías que escribir nada más que lo que vos quieras escribir y yo te contesto nada más que lo que quiero contestarte y subo al blog nada más que los textos que quiero subir.
Si te cae bien la Sarlo y te asqueó el texto de Lamborghini está todo perfecto, no pretendo que sea de otra manera. En cierta forma es lo que corresponde, Porque la Sarlo quiere caer bien y cae bien. Y Lamborghini no quería caer bien y no cayó bien.

En cuanto al tema de las idemnizaciones y la izquierda, fijate que son cuestiones que trajiste vos, porque en mi post no hablé ni de las indemnizaciones ni de la izquierda. Es curioso: nunca en este blog ni en la revista escribí la palabra "indemnización"; es algo que trajiste de tu universo personal.

Tampoco soy especialista en la izquierda, preguntale a César, que te va a recomendar bibliografia.

Anónimo dijo...

cesar, mi amigo inseparable, asi que vos lees a galasso y jauretche?
parece que sos tan burro que no te sirvio de nada, si hace poco comparaste las retenciones a las rentas extraordinarias a cuando el comunismo te saca la propiedad privada de tu bicileta, jajjaja

te acordas que dijiste ¿a vos te gustaria que el gobierno te meta la mno en el bolsillo y te saque el 30 % de tu sueldo? comparaste el sueldo de un empleado con la renta de los terratenientes, mira que sos burro, por mas que estudies y leas a jauretche.
en todo caso decime la bibliografia que vos consultas para no quedar tan hehco mierda despues de leerla

Anónimo dijo...

No, pareja no fueron. Pero la trompada que le puso en la puerta del Desnivel todavía se comenta.
Oscar, se tomó un taxi y se fue.
Sin cenar.

César dijo...

Bueno, aca se sigue practicando el deporte de la interpretación imposible. Pipo, sabes bien que yo no dije eso. Cuando hable de la bicicleta lo hice en alusion a que uds. hablaban acerca de "defensores de la propiedad privada" como privativo de un sector, cuando en realidad, vivir en una sociedad burguesa implica asumir la institucion de la propiedad privada y eso nos atravieza a todos. Y no recuerdo haber dicho lo del descuento del 30 del sueldo equiparandolo con las retenciones. Te propongo que revises los archivos y te fijes en los posts.
Lo de Galasso y Pepe Rosa te lo dije de onda, esta bueno investigar, buscar fuentes, escuchar otras campanas. Capaz que hasta te conviene leer tambien a Halperín. Todo ayuda.

Oscar Cuervo dijo...

Ano:
sí te digo que fuimos pareja, por qué te crees que me pegó la trompada, ahora dentro de poco me voy a poner el diente postizo adelante.
Pero tus datos son erróneos, no fue en Desnivel (que por otra parte no sé donde queda), fue el día que fuimos a presenciar la performance de Hugo Cal en casa Brandon.

Oscar Cuervo dijo...

César:
jústamente tu lectura de la renta extraordinaria en términos de propiedad privada es lo que muestra que la bibliografía que citás no te hizo mella. Sos como una piedra en la que el agua no penetra.

La idea no era que nombraras a los autores que figuran en los programas de las materias que cursás, sino que además los leyeras. Citás a Jauretche, igual que Buzzi, pero pensás como Massot.

Anónimo dijo...

Así que no sabes donde queda?
Te habrá dado amnesia la piña.

Oscar Cuervo dijo...

Sí, me llevaron en camilla, por suerte Tomás Abraham lo contuvo, porque si no Pablo ese día me mataba, pero te digo que fue en casa Brandon, tengo de testigo a Hugo Cal.

César dijo...

jajaja, buenísimo, las confusiones crecen como bola de nieve.
vuelvo a repetir:
1. Uds. dijeron "defensores de la propiedad privada" a los campestres y yo respondí que la defensa de la propiedad privada no es privativo de un sector, sino que es algo mas que eso.
2. Jamás cité a Jauretche
3. Jasmás dije que había leído a Galasso. Solo le recomendé a Pipo que lo introdujera en sus lecturas, si le interesa el tema. Como decirte, "ah, te gusta Attaque77?, bueno, probá con The Clash".
4. Ni Galasso ni Jauretche ni el diario La Nación ni Tomas Abraham ni Quintin ni Buzzi (aclaro por las dudas) figuran entre los programas de mis materias. De todos modos es algo que ya no me preocupa porque he dejado la facultad y me dedico full time al negocio de la soja. Estoy detrás de un proyecto transgénico destituyente junto a varios oligarcas de por ahi. Ya tendrán noticias nuestras en Clarín Rural. Vamos por mas.
Saludos y viva la patria

Anónimo dijo...

No exageres oscar, tampoco para camilla.
Taxi nomas.

Oscar Cuervo dijo...

Ah, César, recomendendás libros que no leiste? Excelente, así procede un pensador serio.

Ok, ya sé: jamás fuiste un pensador serio.

César dijo...

jajaja
Estoy aprendiendo, che. Un poco de paciencia. Soy joven y vengo aca a iluminarme. Quiero ser un pensador serio del campo nacional y popular. Quiero decir muchas veces en mi discurso las palabras: "pooles", "oligarquía", mediático" "gorila" y cada tanto mandar un "lucha de clases".
Voy a rasgarme las vestiduras porque a Cristina los foristas de La Nación le dicen "yegua", pero me voy a mofar de lo vieja que esta la Sarlo.
Voy a decir que los ruralistan cortan rutas y no dejan pasar ambulancias en las que mueren personas pero voy a decir que es un golpe bajo recordar al tucumano que se le cayo una tribuna encima en Tucuman en un acto oficial.
Y a todo el que se me oponga: le voy a decir que se vaya a leer Perfil, Noticias o La Lectora Provisoria y me deje en paz a mi y los dos o tres que piensan como yo ,que nadie me diga como tengo que interpretar la historia. A mi, que soy un pensador serio.

Anónimo dijo...

Para ser pensador serio hay que ver muchas pelis de chinos karatekas por semana.
Mirá si hubieses tenido a un chinito de esos que te defienda, aquella noche.

Anónimo dijo...

Hola yo no tengo tanta lucidez como para sacar un comentario reluciente, pero me gusta leer este blog y la revista tambien. lo que si no entiendo este anonimo... quien es? Rial?

tambien veo que hay muchos mensajes con tono acusatorio mas que crìtico, y habiendo tantos blogs de boludeces por ahi vienen a aparecer por aca. bueno no quiero seguir con este tono obsecunte, pero pongan un poco de onda e ingenio en las criticas asi es un poco mas interesante las respuestas, como la de Ceci.

saludos, Miguel de Claypole

Oscar Cuervo dijo...

Miguel:
este anònimo que tenemos es un pelotudo, Juan Carlos Pelotudo, él la pasa bien asì. Viste que siempre hay algún pelotudo. El no puede producir otra cosa más que eso, no esperes algo más porque no lo da. Pero tiene que tener su lugar, pobre, si no quedaría muy expuesto.

Y despuès lo tenemos a César, que te manda a leer libros que no leyó. César lee nuestro blog y después consulta las obras de Fontevecchia y de Lanata para retrucarnos. Nos desprecia, como se desprende de sus tristes burlas, pero sigue perdiendo tiempo con La Otra. Así van pasando sus días. Alguna función en el plan divino debemos cumplir.


saludos, Miguel

César dijo...

Cuervo: No te desprecio. Valoro tu trabajo y te lo dije. Pese a nuestras disidencias, te tendí la mano amigablemente y me escupiste en la cara.
No pierdo el tiempo en este blog porque me gusta visitarlo a menudo, como lo hago con otros. Ademas, vos me necesitas. O mas bien, necesitas a alguien sobre quien proyectar tu odio.
Este blog funda su identidad política en el odio. No propone nada positivamente, porque su postura política -en este conflicto- se reduce a la oposición a los opositores del gobierno. Oposición estetizante y petrificada. Como las señoras de Barrio Norte con Cristina K, pero al reves.
Antes era Muro, ahora soy yo. En algun punto me divierte.

Anónimo dijo...

Es mas facil esquivar el bulto que las piñas oscar.

Oscar Cuervo dijo...

Sigan participando, muchachos, pero me aburren porque siempre dicen lo mismo. No tienen gracia como chistosos ni ideas como para debatir. Sigan hasta que ustedes mismos se aburran.