todos estamos igual

miércoles, 25 de marzo de 2009

La comunicación cambia la vida de la gente





Lo que sigue es la entrevista que en el último programa de La otra.-radio le hicimos a Santiago Marino (Magister en Comunicación y Cultura, Fac. de Ciencias Sociales, UBA; es docente e investigador en la materia Políticas y Planificación de la Comunicación de la UBA; y es columnista de Política y Medios de FM La Tribu.


LO.-R: Antes de la presentación de este proyecto se habían formulado los llamados “21 puntos básicos por el derecho a la comunicación”, que vos me sabrás decir quiénes los habían propuesto.

SM: Esos 21 puntos fueron los acuerdos mínimos a los que habían llegado una serie de organizaciones civiles, sociales, políticas, tales como la CTA, la CGT, Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, la Asociación Mundial de Radios Comunitarias a través de -su sede en Argentina (AMARC), la Federación Argentina de Radios Comunitarias, radios como La Tribu, la Universidad de Buenos Aires, las carreras de comunicación de las universidades de La Plata, Rosario, es decir, la mayoría del arco radiodifusor y de intelectuales que investigan y trabajan en la comunicación. Son 21 puntos y no 17 o 42 porque, en esta larga militancia por democratizar la comunicación y la cultura, llegamos a estos acuerdos justo cuando la democracia cumplía 21 años, hace 4 años. Porque básicamente entendemos que el modelo de democracia en que vivimos se define, en una parte muy importante, en su sistema de comunicaciones.

-Esta cuestión va a ser ineludible en la agenda política del siglo XXI, dado el poderío y la presencia que los medios han llegado a tener en la vida de todos en las últimas décadas.

- Sí, es cierto y es difícil explicarle a un extranjero por qué no ha sido un tema ineludible en los años que lleva la democracia argentina. Pero claramente el futuro pone estos temas en la primera línea de la discusión.

- Yo a un extranjero le explicaría que la democracia en Argentina se ha ido instalando de a poco, no es que en el 83 hubo de golpe democracia. Está aún instalándose. De hecho hace poco que la justicia pudo empezar a actuar sin escollos puestos por el propio estado y los genocidas recién están empezando a ser juzgados. Empezaron a ser juzgados los comandantes en la época de Alfonsín, pero los juicios fueron avanzando lentísimamente y todavía falta mucho por hacer.

- Es cierto lo que decís. De todos modos, el desarrollo de las comunicaciones en Argentina fue un emergente de la democracia. Radios como La Tribu son el resultado de esa primavera democrática que se dio en los 80, con condiciones complejas, como tener que ser una radio ilegal por no cumplir con los requisitos de una ley de la dictadura, por ser radios que respondían a asociaciones sin fines de lucro.

- Ley de la dictadura que todavía está vigente y que es la que va a ser derogada cuando se promulgue la nueva ley.

- Y además la ley de la dictadura, aunque duele mucho decir esto, ha sido empeorada durante los gobiernos democráticos, con modificaciones que por lo general favorecieron la concentración de medios.

- Y me parece que eso también va paralelo con el proceso económico que experimentó la democracia. Desde el punto de vista económico, estos años de democracia no han sabido reparar los daños económicos hechos durante la dictadura, muchas veces se agravaron esos daños. Pero, decime, ¿el proyecto de ley se basa en esos 21 puntos?

- Sí, el proyecto se basa en los 21 puntos, comienza planteando eso puntos, uno por uno, y exponiendo la manera como se va a conseguir dar cuenta de ellos. Es una decisión política interesante, porque la actuación de la militancia por la democratización de las comunicaciones así está contenida en el proyecto. A partir de ahí, y luego de una serie de discusiones llevadas a cabo en el 2008 el gobierno hizo una serie de reuniones con los sectores involucrados, empresarios, intelectuales, organizaciones no gubernamentales, etc., y esos encuentros sirvieron para darle forma al actual proyecto.

- El proyecto es bastante extenso, tiene 150 páginas. Vos que lo debés haber leído con mucho detenimiento, ¿nos podés enumerar tres o cuatro puntos fundamentales que la ley cambiaría respecto de lo que es el estado actual de las comunicaciones?

- El proyecto tiene un objetivo claramente democratizador, desconcentrador de la propiedad y tiene la intención de garantizar los derechos humanos a la libertad de expresión y a la información. Por ejemplo, una manera de garantizar el derecho a la información sería darle acceso a los espacios en el aire (que es un espacio finito y que tiene que ser administrado por el estado) a todos los sectores: al sector estatal, al sector privado comercial y al sector privado sin fines de lucro (es decir, sindicatos, partidos políticos, clubes, asociaciones civiles) en tres tercios equivalentes. Dentro del sector público también quedarían incluidos Universidades, municipios, legislaturas provinciales, etc.

- ¿Quiere decir que con la ley vigente una organización civil sin fines de lucro no tendría derecho a una licencia y una empresa privada con fines de lucro sí?

- En el año 80, cuando la ley vigente se aprobó, eso era tal cual: para tener una licencia una obligación era tener fines de lucro. En el año 2006 el congreso sancionó una ley que reforma ese aspecto de la actual norma y reconoce que las asociaciones civiles sin fines de lucro pueden aspirar a una licencia radial. Es cierto que hasta ahora sólo se entregó una licencia a la AM 530, la radio de las Madres de Plaza de Mayo. Pero lo que no tiene la ley vigente es un reconocimiento de división equitativa del espacio, de otorgarle un tercio para cada tipo de medios: un tercio para los estatales, un tercio para los privados y uno para las organizaciones civiles sin fines de lucro. Esta es una manera de garantizar la pluralidad de voces.

- ¿Cuál sería el segundo punto a destacar?

- La cuestión de quiénes pueden tener licencias y cuántas pueden tener, es decir, los instrumentos para evitar la concentración de los medios. La ley actual permite 24 licencias por licenciatario; es decir: una empresa puede hoy tener 24 medios entre FM, AM, televisión y tv por cable.

- Digamos: ¿8 canales de aire, 8 de cable y 8 radios?

- Exactamente. En la ley actual en una misma zona de cobertura no se pueden tener más de 4, pero sumando distinta zonas hoy se permiten 24 medios para un mismo dueño. Es un número alto, sobre todo pensando que se trata de un espacio finito. El nuevo proyecto baja ese número de 24 a 10 por empresa. De esas 10, se puden tener un máximo de 3 en una misma zona. Pero algo muy importante es que ahora esas tres licencias no podrán ser de un mismo tipo. Una empresa no podrá tener en la misma zona 3 FM o 3 AM o 3 canales de aire. Pero además el proyecto establece una condición que va a ser muy discutida por los multimedios: la exigencia de que, si se tiene un canal de TV abierta, no se puede tener también la propiedad de una distribuidora de señales de TV por cable.

- Que es el caso actual de canal 13 con la operadora de cable Multicanal-Cablevisión.

- Exacto. Además hay otro impedimento: para tener una licencia para vender televisión por cable se puede tener sólo una señal de cable y no más.
Siguiendo al mismo ejemplo, tenemos que el grupo Clarín hoy tiene, además de su canal de aire, su distribuidora de cable y varios canales de cable: TN, Volver, Magazine, Metro, TYC Sports y algún otro que se nos puede escapar. Este proyecto ya tiene comentarios negativos por parte de los multimedios y también de la oposición.

- ¿El tercer punto importante?

- Un aspecto interesante del proyecto es que el organismo de control que tiene que hacer cumplir esta ley va a tener participación de la oposición. Si hoy la ley se cumpliera a rajatabla, el COMFER, que es el organismo de control de la radiodifusión y televisión, debería estar dirigido por un general, un almirante, un brigadier, un representante de la SIDE y otro de la Secretaría de Información Pública. La ley dice eso. En el nuevo proyecto, el organismo de control va a estar integrado por una comisión parlamentaria. Este proyecto propone 7 miembros, 5 propuestos por el Poder Ejecutivo (aprobados por una comisión bicameral) y 2 propuestos por la misma comisión bicameral en representación de las minorías parlamentarias.

- Esa distribución de 5 y 2, ¿a vos te parece correcta o es discutible?

- Todos estos puntos son discutibles desde el momento en que el proyecto se presenta a debate en la foros de ciudadanos, donde se le pueden aplicar mejoras, y recién después se pondría a consideración del congreso. Pero, además, este es un proyecto de ley comentado, lo cual no es muy común en la legislación argentina. Una ley comentada es aquella que, luego del artículo, incluye los argumentos por los cuales se propone. Sólo el Código Civil en Argentina es una ley comentada. En esos comentarios del actual proyecto se incluye la legislación comparada de EEUU, Canadá y Europa, y en general los organismos de control tienen esta composición. Es cierto que la distribución podría ser más equitativa, por ejemplo de 4 y 3, pero eso está sujeto a discusión, lo importante es que se trate de una comisión integrada por diversas representaciones parlamentarias.

- ¿Y qué otro punto se podría destacar?

- El otro importante, que a mí me preocupa en cierta medida, se relaciona con el crecimiento de las telefónicas. Este proyecto establece algo que responde a un proceso tecnológico, que es permitirle a las empresas de telefónía básica brindar televisión por cable. Esto está impedido desde el año 91, cuando se privatizó ENTEL. En el pliego de licitación decía que se les permitía dar cualquier servicio menos radiodifusión. El actual proyecto lo permite, pero con la obligación de que cedan el control del 50 % del mercado con el que cuentan si aspiran a entrar también en la órbita de televisión por cable. La tecnología en estos años se ha ido desarrollando en esa dirección, la de posibilitar la unificación de diversas prestaciones, y puede pensarse como argumento a favor que es preferible reglamentar esa posibilidad antes de que el cambio se dé de hecho. La cesión del 50 % del mercado telefónico que una empresa posee sería una forma de compensación para evitar la concentración monopólica.

- ¿Esto sería uno de los puntos discutibles?

- Sí, habrá que discutirlo, primero para ver cómo se instrumenta técnicamente, y en segundo lugar porque los organismos de control antimonopólico en Argentina han fracasado constantemente. Lo importante aquí es destacar que todas estas modificaciones afectan a la vida cotidiana y definen quién puede hacer cultura, quién puede difundir su cultura y quién no.

- Sí, lo estamos viviendo. No es casual que en estas semanas en las que se planteó el tema estemos siendo sometidos a una presión mediática acerca de una supuesta ola de inseguridad (que por ejemplo la jueza de la Corte Carmen Argibay cuestiona y atribuye en gran parte a la exageración de los medios), que empieza a repercutir en nuestra percepción de la realidad, nuestras ideas y ansiedades, los medios se comportan de manera muy tendenciosa en la adminsitración de la información, qué noticia ponen en primer palno y cuál queda relegada o directamente oculta. Incluso tenemos el problema de cómo los mismos multimedios están tratando de impedir este debate sobre el proyecto de ley, desinformando acerca del espíritu de la reforma que se está proponiendo. Es muy difícil enterarse acerca de esta nueva ley, porque lo que aparece en Clarín y los otros multimedios son críticas al proyecto sin que se informe sobre el proyecto mismo.

- Sí, está claro que aquellos que tienen que comunicar qué regula esta ley o qué aspectos tendrían que cambiarse son justamente los sectores que verían afectados sus intereses y como tales se oponen. Por ejemplo nunca se dice que el aire es patrimonio de la humanidad (que es un estatus que lamentablemente no tiene el agua). El aire es un bien público que tiene que ser administrado equitativamente.

- Entonces es decisivo que en estos 60 días de debate el espíritu de la ley sea difundido y debatido por todos los sectores sociales, porque está en juego algo que cambia la vida de todos. Hay una campaña bastante clara de distorsión. La jefa de la Coalición Cívica dijo que como opositora, ella va a defender a los grandes grupos económicos porque ante todo debe oponerse a los Kirchner. Y esa voz se amplifica por los multimedios que quieren impedir el debate, presentando al proyecto como un atentado contra la libertad de expresión o un intento del gobierno por adueñarse de todos los medios. Y mientras tanto no nos estamos enterando de lo que el proyecto dice.

- Sí, y es una autocrítica que nos debemos hacer, tanto desde La Tribu como desde otras instituciones vinculadas al problema de las comunicaciones, que no hemos logrado instalar este debate para que todos perciban qué importantes son las comunicaciones en nuestras vidas. Y tal vez esta sea una deuda histórica, pero también una oportunidad histórica. Y esto no significa convertirse en kirchnerista u oficialista, sino ayudar a definir el modelo de democracia en que vivimos. Me enteré para mi agrado que el gobierno lanzó en estos días una campaña publicitaria sobre el proyecto. Esta semana se empezó a ver esa publicidad en algunos diarios.

- Sí, yo ayer ya vi el spot publicitario en la televisión. Aparece la junta de comandantes de la dictadura del 76 y una leyenda dice: “En esa época, los medios de comunicación estaban en muy pocas manos”. Y acto seguido aparece un segundo cartel que dice: “Hoy también”.

4 comentarios:

Jotafrisco dijo...

Se actualizó la lista de links. Oscar, te agradezco cambies el enlace a Rapidshare por éste:

http://rapidshare.com/files/213438684/Links_BAFICI_Actualizaci_n_25-03.txt

Anónimo dijo...

Esta ley tiene y tendrá todo mi apoyo hasta el día que se logre sancionar por fin. Por todos los motivos conocidos y por motivos desconocidos.

Solo hay algo que quiero objetar, y que vengo reflexionando después de ver esta coyuntura política.

Las "políticas en comunicación" históricamente en la argentina han sido utilizadas con fines non santos.
Esto lo puede decir Marino, Mastrini, Mariotto y todos los que estudiaron el tema. A los gobiernos nunca les importo legislar sobre comunicación y siempre los hicieron a la fuerza por algún interés. Siempre se vieron obligados a realizar políticas al respecto.

El momento actual sin ir más lejos obliga a este (o cualquier gobierno) a legislar sobre comunicación en principio porque las tecnologías son totalmente distinas a las de hace 15 años, entonces esos cambios deben ser contemplados. Por ejemplo el triple play, la televisión digital.

Ni siquiera la ley actual legisla algo sobre cable, lo que propicia los monopolios que conocemos.

Si vamos a historia como venía diciendo, fijemonos que siempre se lanzaron políticas de comunicación a finales de gobierno y a principio de gobierno ¿Por qué?.
La respuesta es obvia, cuando un gobierno asume en Argentina legisla en comunicación para poner los medios a su favor, y cuando se va modifica leyes para que sus amigotes puedan permanecer con los negocios.

Los leyes de medios en Argentina fueron todas firmadas por militares. Incluso la primer ley de radiodifusión (en la época del General Perón).

Todo esta historia debe servinos para entender que siempre se quiere manipular la opinión pública de alguna manera, tanto del gobierno como de los otros.

Si vamos a la actualidad comprobamos que la sanción de esta ley es urgente a todas luces. Pero habrá que debatirla en todos los puntos para que no se atente contra la libertad, para que se garantice el pluralismo, para que todos tengan acceso, participación, que el area de cobertura sea en esos lugares donde no es negocio poner medios.

El problema más grave que sufre la argentina en términos de medios es el de la concentración. El nivel de monopolios y oligopólios que hay no ocurre ni en el peor de los mundos comunicacionales. Nosotros que copiamos el modelo competitivo comercial estadounidence lo tergiversamos y torcimos al hartázgo. Quiero decir, en norteamérica no hay los oligopólios que hay acá. Imaginar solo 24 licencias más testaferros es todavía imaginar poco.

Además es parte del problema que venimos discutiendo en este blog y en muchos otros. El problema de que los medios arman agendas, que parecen que hablan a una sola y misma vos. ¿Por qué todos cubren la noticia de la misma manera?. Los medios dictan políticas y problemas de la ciudadanía. Además el argentino es un gran consumidor de medios con lo cual esta muchas veces sobreinformado, saturado, pero de la misma infobasura.

En principio esas serían a mi modo de ver las claves para empezar a discutir el problema. Muchos medios van a negar la ley porque destruye sus negocios, pero necesitamos una comunicación más abierta y democrática.

Que yo este escribiendo esto en este blog es parte de lo que estamos hablando, no hay medios alternativos. Y aparentemente los blogs son una pequeña puerta donde se filtra algo distinto, otro tipo de discuciones.

Creo que la gente estaría encantada de saber estos temas y debatirlos, pero no hay quien baje a tierra estos asuntos, quien explique de que se trata la ley y que es lo que se pretende con ella.

Creer que todo es negociado y politiquería es minimizar el problema. A mi modo de ver, hay que buscar algo más, y sobre todo revalorizar la noción de "lo público", que desde los milicos pasando por los 90 fue tan vaciado y destruido, casi reducido a cero.

No soy muy optimista con este gobierno, habrá que ver aunque no se si es tan importante mi optimismo, pero ojalá logren algo de todo esto.

Saludos.

Oscar Cuervo dijo...

Fede:
después de leer todo tu comment, no ubico la parte de lo que querés objetar. Entiendo que estás expectante, como muchos de nosotros, pero ¿cuál sería la objeción?
Para mi, el lanzamiento de este proyecto es hasta ahora la mejor noticia de lo que va del año. Creo que excede todas las discrepancias que podamos tener acerca del actual gobierno. El principal escollo de este proyecto es que va a ser difícil que la gente lo pueda conocer sin distorsiones, porque justamente los medios masivos, los canales y radios de mayor audiencia y los diarios de mayor tirada están en contra porque afecta sus intereses. Como Clarín, La nación, Manzano-Vilas, TYC, no tienen ningún escrúpulo ni estiman especialmente el derecho a la información (son medios que desprecian a sus lectores y televidentes) no van a hacerle llegar a su audiencia los datos puros acerca de las modificaciones que propone la nueva ley. ya se vio en estos días que mienten descaradamente y la presentan como un avance del matrimonio perverso sobre "la prensa independiente". Sabemos además que hay una parte considerable de la ciudadanía muy dispuesta a que le mientan al respecto (porque han apostado su vida a la mentira).
Así que el momento de la difusión del proyecto, de sus objetivos, y la discusión sobre ello previa a presentar el proyecto en el congreso es una instancia crucial de la democracia. El esquema de medios va a incidir de manera decisiva en el poder de las próximas décadas. Cualquier opositor con sensatez y buena fe debería desear llegar al poder algún día con medios plurales y no con pulpos concentrados. Es interesante ver las posiciones públicas que asuman todos los sectores de la oposición, porque eso va a trazar una línea muy clara entre los honestamente críticos al gobierno actual y los descaradamente oportunistas. Estos últimos van a sufrir, en un eventual gobierno futuro, la medicina que ahora está probando el propio kirchnerismo por haber sido complaciente con Clarín.
Por todo ello, la nueva ley de medios es prioridad uno para La otra (blog, radio y revista). Y vamos a insistir mucho con esto, y a seguir insistiendo aún si la ley no llegara a promulgarse o el gobierno repentinamente perdiera interés en ella.
saludos

Anónimo dijo...

Que tal Oscar. No se trata de objeción, en realidad todo lo que apuntas es cierto y yo también lucho porque la ley se sancione.

Simplemente recordé un poco el uso que hicieron los gobiernos y los políticos de los medios, y su legislación, en sentido, siempre les costó legislar en este sentido. De hecho la primera radio estatal fue una iniciativa privada, es paradógico. Yo dije eso porque me preocupa que la ley sea puesta en juego en un momento complicado de la política nacional, corre el serio riesgo de que no se trate la ley y hay una utilización de la ley (y todos los sectores sociales que estamos a favor de ella) para que estemos a favor del gobierno.

Quiero decir, estamos a favor de la ley y su sanción pero me jode que se use la ley... y ojala me equivoque y se sancione y no se estanque el proyecto cuando pase la joda. Asi como todos los legisladores votan el adelanto de las elecciones, espero que esos mismos voten por una comunicación más democrática.

Dicho eso tenés razón, lamentablemente los medios no tratan ni van a tratar la ley, y vamos a ver como se alinean los políticos en la cruzada por la defensa privatista. Siguen jodiendo con el paro del campo y con toda la bola... y ahora interfieren los satélites ... dios mio.

Fue interesante ayer leí un tal creo que se llama Livolti, del FAA (Federación Agraria) disidente. Dice que Buzzi se "derechizo" y que De Angeli defiende los sojeros de más de 4000 toneladas.

¿Eso no sale en los medios?

Volvemos de nuevo... Ley de radiodifusión urgente!

Saludos.