por Martin Farina y Guillermo Villalobos
Solo pocos pueden hacer la película más vista y admirada
por la gente de su pueblo en toda la historia del cine.
En la Argentina el mago se llama Leonardo Favio.
En Taiwán es Wei Te Shen.
¿Por qué Cape n° 7 (海角七號) es una gran película?
¿Por qué hay tipos cómo éstos,
que pueden hacer reir y llorar al mismo tiempo a todos?
A pesar de que el público de los festivales suele ser reticente a aplaudir
al finalizar la función, en este caso nadie dudó.
"Estadísticamente" fue la película más
rápidamente aplaudida de todo el festival.
Es decir, nadie dudó ni un segundo
en reconocer con lágrimas en los ojos que acaba de ver una película de esas
que te van a acompañar por siempre.
Si hay algo a lo que generalemente le tenemos miedo es al ridículo.
Todo el tiempo nos esforzamos enormemente para no rozar situaciones
que nos comprometan o que nos dejen en orsai.
Directores como Wei Te-Sheng atraviesan el rídiculo,
lo perforan de tal forma que nos devuelven
la capacidad de amar, como si fuese la primera vez.
Esa primera vez que rompiste las patas de la cama
o sacaste el colchón al balcón por la ventana.
Esa que no se repite nunca más, ¡hasta que se repite!
REITERAMOS!!!
Solo pocos pueden hacer la película más vista y admirada
por la gente de su pueblo en toda la historia del cine.
En la Argentina el mago se llama Leonardo Favio.
En Taiwán es Wei Te Shen.
Solo pocos pueden hacer la película más vista y admirada
por la gente de su pueblo en toda la historia del cine.
En la Argentina el mago se llama Leonardo Favio.
En Taiwán es Wei Te Shen.
¿Por qué Cape n° 7 (海角七號) es una gran película?
¿Por qué hay tipos cómo éstos,
que pueden hacer reir y llorar al mismo tiempo a todos?
A pesar de que el público de los festivales suele ser reticente a aplaudir
al finalizar la función, en este caso nadie dudó.
"Estadísticamente" fue la película más
rápidamente aplaudida de todo el festival.
Es decir, nadie dudó ni un segundo
en reconocer con lágrimas en los ojos que acaba de ver una película de esas
que te van a acompañar por siempre.
Si hay algo a lo que generalemente le tenemos miedo es al ridículo.
Todo el tiempo nos esforzamos enormemente para no rozar situaciones
que nos comprometan o que nos dejen en orsai.
Directores como Wei Te-Sheng atraviesan el rídiculo,
lo perforan de tal forma que nos devuelven
la capacidad de amar, como si fuese la primera vez.
Esa primera vez que rompiste las patas de la cama
o sacaste el colchón al balcón por la ventana.
Esa que no se repite nunca más, ¡hasta que se repite!
REITERAMOS!!!
Solo pocos pueden hacer la película más vista y admirada
por la gente de su pueblo en toda la historia del cine.
En la Argentina el mago se llama Leonardo Favio.
En Taiwán es Wei Te Shen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario