todos estamos igual

sábado, 25 de octubre de 2008

sordera?

Por Liliana Piñeiro

¿De qué se trata Paranoid Park? ¿De la descripción de un hecho policial? ¿De un homicidio? ¿De un accidente? Alejado de las estridencias, Gus Van Sant es un director sutil. Se sumerge con la cámara en esa etapa de la vida que Michaux describe como “rostros sin capitán”, rostros a la deriva, con un pie en la infancia, sin un yo definido que los encauce:

Miradas de la infancia, tan particulares, ricas en no saber, ricas de extensión, de desierto, grandes por ignorancia, como un río que fluye (el adulto ha vendido la extensión por los hitos en el camino), miradas todavía no atadas, densas de todo aquello que se les escapa, plenas de lo todavía indescifrable. Miradas del extranjero…

Es en este contexto donde, como consecuencia de un hecho banal, entra en escena la muerte. Por sobre el registro de lo fáctico, Van Sant enfoca la experiencia de un adolescente, y de cómo procesa éste la irrupción brutal de la responsabilidad en su vida. Los padres, la escuela, la sexualidad, los compañeros: todo es incierto y se busca algún lugar donde hacer pie. Apelar al lenguaje, reubicar lo traumático en el discurso puede ser una salida. Alex irá construyendo un sentido, y nosotros con él…si podemos escucharlo.

Porque Paranoid Park es una película auditiva, sin duda. Pero lejos de la grandilocuencia (nunca tan apropiada esa palabra) a las que nos tiene acostumbrados cierto cine, Van Sant escucha otros sonidos. Así como en Gerry escucha el silencio, aquí el tono es íntimo: la voz de Alex va y vuelve, nos va hablando desde el principio hasta el final, mientras nosotros miramos el desconcierto en su joven rostro. Y la película termina allí, por supuesto, cuando él pudo decir(se) y decirnos, todo. ¿Qué más?

Para los que no somos sordos, claro…

14 comentarios:

Anónimo dijo...

Has dicho lo esencial. Es la que me falta de Gus Van Sant y por lo visto es indispensable de modo que trataré de subsanar eso.
Marthe

Anónimo dijo...

Y dale con pARANOID pARK. lA PELICULA MAS SOBREVALORADA DEL ANO. La repetición condescemdiente y sin alma de lo que Van sant había logrado en su trilogía anterior, como si hubiera querido hacer un mix entre eso y sus films mas mainstream, con "mensaje". Porque solo Cuervo no ve el "mensaje" de PP, como buen comisario político del no mensaje...

Anónimo dijo...

Qué impresión! Qué cosas grossas decís!
Ahora, por qué para llamar a alguien "comisario político" ( suena duro no, en este país que tiene la historia que tiene) por qué no das la cara , digo yo?
A vos, ¿Cómo habría que denominarte?
martha

meridiana dijo...

Lili, bien por ese enlace con Michaux, acuerdo en que el eje de la película es esa imposibilidad de atrapar algo en los rostros de los que aún no son adultos.

Alex y sus miradas, la mirada sobre Alex y el sonido que atraviesa la escena cuando no se puede decir.

Por eso es extranjero, sobre todo de sí mismo y deriva en los espacios, no los apropia ni los comparte.

En especial recuerdo esa escena con todos los skaters lanzándose al "ruedo" una y otra vez y el sentado sobre su patineta, solo mirando, mirando.

Un beso

Lilián

Oscar Cuervo dijo...

Martha:

no te preocupes ni te impresiones, una de las formas libérrimas de la comunicación contemporánea consiste en lanzar estas voces altisonantes y por supuesto anónimas para neutralizar cualquier posibilidad de diálogo.

Ya se sabe, Liliana escribe un comentario sobre una película en el blog de La Otra y desde la clandestinidad un pensador de la resistencia lanza una acusación así.

De mod oque asistimos a este momento heroico del combatiente anónimo. ¿No es conmovedor?

Anónimo dijo...

Martha se impresiona por qué un anónimo use la palabra "comisario político", pero no porque la use su anfitrión Cuervo. Cosa rara, Martha, porque Cuervo la usa cada dos por tres, pero se ve que a él también se le olvida aclararlo acá... Por qué será?

Oscar Cuervo dijo...

Anónimo intrigante:

Ya que decís que uso esa palabra cada dos por tres, ¿podés citar cuántas veces dije esa expresión y en qué contexto? Si no citás explíctitamente ese uso constante de la palabra que me atribuís, lo que hacés es tender un manto de sospecha sobre algo que yo haría todo el tiempo, sin mostrar alguna evidencia.

Dado que decís que uso esa palabra cada dos por tres, debe haber abundantes ejemplos de esto, quizá en este mismo blog o en otros, o en la revista. Si no podés citar unos cuantos ejemplos de una supuesta conducta habitual mía, sólo querés embarrar la cancha.

De todos modos quiero agregar algo más: vos podés citar una o dos ocasiones en que yo hube dicho (efectivamente) esa expresión, porque yo firmé eso cuando lo dije, en cambio el anónimo que me llama "comisario político" (de hecho no sé si sos vos mismo, porque te resguardás en el anonimato y de este modo no te hacés responsable de lo que estás diciendo en este momento) por un comentario acerca de Paranoid Park (curiosamente a propósito de un comentario firmado por otra redactora del blog) no hace algo equivalente a lo que yo hice.

Yo me expongo a la crítica y lo tuyo es tirar la piedra y esconder la mano. Algo parecido a la cobardía, un mecanismo de sospecha anónima muy usado por el fascismo más clásico.

¿De qué tenés miedo para no firmar tu "denuncia"? ¿O es un simple hábito tuyo el no hacerte cargo de lo que hacés?

Anónimo dijo...

Martha, Lilián, Oscar: gracias.

Anónimo(s): ...está todo dicho (menos tu nombre)

Anónimo dijo...

Si, está todo dicho. Cuervo reconoce haber usado la desgraciada frase, y aunque lo recuerda mejor que nadie, me pide que haga una revisión bibliográfica... Mientras tanto, la claque aplaude. Yo soy solo un comentarista de blog, y lo que importa es el argumento, no el nombre. Sos vos el que firma esas lindas frases, y se da el lujo de acusar de fascista a quien se lo señala... Lo que me gustaría saber es que opina la indignada Martha, o si ahora va decir que la frase esta bien si la emplea el susodicho.

Oscar Cuervo dijo...

Vos no sos solo un comentarista de blog, sos un tipo que no se puede hacer cargo de lo que dice, porque ni siquiera te da para firmar unapequeñita calumnia, como que yo uso una expresión dos pór tres.
Tendrás que cargar ese peso por mucho tiempo, algun día quizá puedas decir algo más que estas bobaditas.
Quizá si te dan la oportunidad hasta llegues a ser un botón hecho y derecho, por ahora hacés como que.

Anónimo dijo...

Si sirvió para que no la uses mas, misión cumplida. Pero no creo, porque a botón no te gana nadie.

Oscar Cuervo dijo...

No anónimo, no servís ni siquiera para eso, porque voy a usar la expresión cunado haga falta. Además, de qué hablarías vos si no me parasitaras a mí?

Anónimo dijo...

Mirá, anónimo: si a uno no le gusta un blog lo que tiene que hacer es manifestar el desacuerdo en forma civilizada dándose a conocer. Caso contrario irse y no entrar mas en ese medio: Hay tantos!! Pero vos elegís el del anonimato injuriando desde la sombra. Cómo no vas a generar indignación?
Pero hago mal porque seguramente éso te genera algún tipo de morbosa satisfacción, porque de alguna manera lograste captar la atención de nosotros.
Y desviarlo del buen comentario de Liliana, por ejemplo.
mARTHA

Anónimo dijo...

"Voy avolver a utilizarlo cuando haga falta", dice Cuervo de su uso facista de la expresión "comisario politico". Y después cuelga su entrevista con Mograbi, lo que ilustra muy bien la ultima reflexion del cineasta...
Mientras tanto, Martha dice que se desvia la atención, y aprovecha para desviar la atencion de la cuestion central: su indignación con esa frase cesó cuando supo que era de Cuervo.
Aquí el unico injuriado fui yo. Y cualquier lector mayor de cinco años, anonimo o portador de nick o de su nombre, que se sigue preguntando como un defensor de tan altos valores usa la abyecta frase "comisario politico" para atacar a los que no piensan como él. Eso desbarata cualquier otro argumento. cualquier intento de critica, y cualquier intento de escapar a la critica.